1. Número 1 · Enero 2015

  2. Número 2 · Enero 2015

  3. Número 3 · Enero 2015

  4. Número 4 · Febrero 2015

  5. Número 5 · Febrero 2015

  6. Número 6 · Febrero 2015

  7. Número 7 · Febrero 2015

  8. Número 8 · Marzo 2015

  9. Número 9 · Marzo 2015

  10. Número 10 · Marzo 2015

  11. Número 11 · Marzo 2015

  12. Número 12 · Abril 2015

  13. Número 13 · Abril 2015

  14. Número 14 · Abril 2015

  15. Número 15 · Abril 2015

  16. Número 16 · Mayo 2015

  17. Número 17 · Mayo 2015

  18. Número 18 · Mayo 2015

  19. Número 19 · Mayo 2015

  20. Número 20 · Junio 2015

  21. Número 21 · Junio 2015

  22. Número 22 · Junio 2015

  23. Número 23 · Junio 2015

  24. Número 24 · Julio 2015

  25. Número 25 · Julio 2015

  26. Número 26 · Julio 2015

  27. Número 27 · Julio 2015

  28. Número 28 · Septiembre 2015

  29. Número 29 · Septiembre 2015

  30. Número 30 · Septiembre 2015

  31. Número 31 · Septiembre 2015

  32. Número 32 · Septiembre 2015

  33. Número 33 · Octubre 2015

  34. Número 34 · Octubre 2015

  35. Número 35 · Octubre 2015

  36. Número 36 · Octubre 2015

  37. Número 37 · Noviembre 2015

  38. Número 38 · Noviembre 2015

  39. Número 39 · Noviembre 2015

  40. Número 40 · Noviembre 2015

  41. Número 41 · Diciembre 2015

  42. Número 42 · Diciembre 2015

  43. Número 43 · Diciembre 2015

  44. Número 44 · Diciembre 2015

  45. Número 45 · Diciembre 2015

  46. Número 46 · Enero 2016

  47. Número 47 · Enero 2016

  48. Número 48 · Enero 2016

  49. Número 49 · Enero 2016

  50. Número 50 · Febrero 2016

  51. Número 51 · Febrero 2016

  52. Número 52 · Febrero 2016

  53. Número 53 · Febrero 2016

  54. Número 54 · Marzo 2016

  55. Número 55 · Marzo 2016

  56. Número 56 · Marzo 2016

  57. Número 57 · Marzo 2016

  58. Número 58 · Marzo 2016

  59. Número 59 · Abril 2016

  60. Número 60 · Abril 2016

  61. Número 61 · Abril 2016

  62. Número 62 · Abril 2016

  63. Número 63 · Mayo 2016

  64. Número 64 · Mayo 2016

  65. Número 65 · Mayo 2016

  66. Número 66 · Mayo 2016

  67. Número 67 · Junio 2016

  68. Número 68 · Junio 2016

  69. Número 69 · Junio 2016

  70. Número 70 · Junio 2016

  71. Número 71 · Junio 2016

  72. Número 72 · Julio 2016

  73. Número 73 · Julio 2016

  74. Número 74 · Julio 2016

  75. Número 75 · Julio 2016

  76. Número 76 · Agosto 2016

  77. Número 77 · Agosto 2016

  78. Número 78 · Agosto 2016

  79. Número 79 · Agosto 2016

  80. Número 80 · Agosto 2016

  81. Número 81 · Septiembre 2016

  82. Número 82 · Septiembre 2016

  83. Número 83 · Septiembre 2016

  84. Número 84 · Septiembre 2016

  85. Número 85 · Octubre 2016

  86. Número 86 · Octubre 2016

  87. Número 87 · Octubre 2016

  88. Número 88 · Octubre 2016

  89. Número 89 · Noviembre 2016

  90. Número 90 · Noviembre 2016

  91. Número 91 · Noviembre 2016

  92. Número 92 · Noviembre 2016

  93. Número 93 · Noviembre 2016

  94. Número 94 · Diciembre 2016

  95. Número 95 · Diciembre 2016

  96. Número 96 · Diciembre 2016

  97. Número 97 · Diciembre 2016

  98. Número 98 · Enero 2017

  99. Número 99 · Enero 2017

  100. Número 100 · Enero 2017

  101. Número 101 · Enero 2017

  102. Número 102 · Febrero 2017

  103. Número 103 · Febrero 2017

  104. Número 104 · Febrero 2017

  105. Número 105 · Febrero 2017

  106. Número 106 · Marzo 2017

  107. Número 107 · Marzo 2017

  108. Número 108 · Marzo 2017

  109. Número 109 · Marzo 2017

  110. Número 110 · Marzo 2017

  111. Número 111 · Abril 2017

  112. Número 112 · Abril 2017

  113. Número 113 · Abril 2017

  114. Número 114 · Abril 2017

  115. Número 115 · Mayo 2017

  116. Número 116 · Mayo 2017

  117. Número 117 · Mayo 2017

  118. Número 118 · Mayo 2017

  119. Número 119 · Mayo 2017

  120. Número 120 · Junio 2017

  121. Número 121 · Junio 2017

  122. Número 122 · Junio 2017

  123. Número 123 · Junio 2017

  124. Número 124 · Julio 2017

  125. Número 125 · Julio 2017

  126. Número 126 · Julio 2017

  127. Número 127 · Julio 2017

  128. Número 128 · Agosto 2017

  129. Número 129 · Agosto 2017

  130. Número 130 · Agosto 2017

  131. Número 131 · Agosto 2017

  132. Número 132 · Agosto 2017

  133. Número 133 · Septiembre 2017

  134. Número 134 · Septiembre 2017

  135. Número 135 · Septiembre 2017

  136. Número 136 · Septiembre 2017

  137. Número 137 · Octubre 2017

  138. Número 138 · Octubre 2017

  139. Número 139 · Octubre 2017

  140. Número 140 · Octubre 2017

  141. Número 141 · Noviembre 2017

  142. Número 142 · Noviembre 2017

  143. Número 143 · Noviembre 2017

  144. Número 144 · Noviembre 2017

  145. Número 145 · Noviembre 2017

  146. Número 146 · Diciembre 2017

  147. Número 147 · Diciembre 2017

  148. Número 148 · Diciembre 2017

  149. Número 149 · Diciembre 2017

  150. Número 150 · Enero 2018

  151. Número 151 · Enero 2018

  152. Número 152 · Enero 2018

  153. Número 153 · Enero 2018

  154. Número 154 · Enero 2018

  155. Número 155 · Febrero 2018

  156. Número 156 · Febrero 2018

  157. Número 157 · Febrero 2018

  158. Número 158 · Febrero 2018

  159. Número 159 · Marzo 2018

  160. Número 160 · Marzo 2018

  161. Número 161 · Marzo 2018

  162. Número 162 · Marzo 2018

  163. Número 163 · Abril 2018

  164. Número 164 · Abril 2018

  165. Número 165 · Abril 2018

  166. Número 166 · Abril 2018

  167. Número 167 · Mayo 2018

  168. Número 168 · Mayo 2018

  169. Número 169 · Mayo 2018

  170. Número 170 · Mayo 2018

  171. Número 171 · Mayo 2018

  172. Número 172 · Junio 2018

  173. Número 173 · Junio 2018

  174. Número 174 · Junio 2018

  175. Número 175 · Junio 2018

  176. Número 176 · Julio 2018

  177. Número 177 · Julio 2018

  178. Número 178 · Julio 2018

  179. Número 179 · Julio 2018

  180. Número 180 · Agosto 2018

  181. Número 181 · Agosto 2018

  182. Número 182 · Agosto 2018

  183. Número 183 · Agosto 2018

  184. Número 184 · Agosto 2018

  185. Número 185 · Septiembre 2018

  186. Número 186 · Septiembre 2018

  187. Número 187 · Septiembre 2018

  188. Número 188 · Septiembre 2018

  189. Número 189 · Octubre 2018

  190. Número 190 · Octubre 2018

  191. Número 191 · Octubre 2018

  192. Número 192 · Octubre 2018

  193. Número 193 · Octubre 2018

  194. Número 194 · Noviembre 2018

  195. Número 195 · Noviembre 2018

  196. Número 196 · Noviembre 2018

  197. Número 197 · Noviembre 2018

  198. Número 198 · Diciembre 2018

  199. Número 199 · Diciembre 2018

  200. Número 200 · Diciembre 2018

  201. Número 201 · Diciembre 2018

  202. Número 202 · Enero 2019

  203. Número 203 · Enero 2019

  204. Número 204 · Enero 2019

  205. Número 205 · Enero 2019

  206. Número 206 · Enero 2019

  207. Número 207 · Febrero 2019

  208. Número 208 · Febrero 2019

  209. Número 209 · Febrero 2019

  210. Número 210 · Febrero 2019

  211. Número 211 · Marzo 2019

  212. Número 212 · Marzo 2019

  213. Número 213 · Marzo 2019

  214. Número 214 · Marzo 2019

  215. Número 215 · Abril 2019

  216. Número 216 · Abril 2019

  217. Número 217 · Abril 2019

  218. Número 218 · Abril 2019

  219. Número 219 · Mayo 2019

  220. Número 220 · Mayo 2019

  221. Número 221 · Mayo 2019

  222. Número 222 · Mayo 2019

  223. Número 223 · Mayo 2019

  224. Número 224 · Junio 2019

  225. Número 225 · Junio 2019

  226. Número 226 · Junio 2019

  227. Número 227 · Junio 2019

  228. Número 228 · Julio 2019

  229. Número 229 · Julio 2019

  230. Número 230 · Julio 2019

  231. Número 231 · Julio 2019

  232. Número 232 · Julio 2019

  233. Número 233 · Agosto 2019

  234. Número 234 · Agosto 2019

  235. Número 235 · Agosto 2019

  236. Número 236 · Agosto 2019

  237. Número 237 · Septiembre 2019

  238. Número 238 · Septiembre 2019

  239. Número 239 · Septiembre 2019

  240. Número 240 · Septiembre 2019

  241. Número 241 · Octubre 2019

  242. Número 242 · Octubre 2019

  243. Número 243 · Octubre 2019

  244. Número 244 · Octubre 2019

  245. Número 245 · Octubre 2019

  246. Número 246 · Noviembre 2019

  247. Número 247 · Noviembre 2019

  248. Número 248 · Noviembre 2019

  249. Número 249 · Noviembre 2019

  250. Número 250 · Diciembre 2019

  251. Número 251 · Diciembre 2019

  252. Número 252 · Diciembre 2019

  253. Número 253 · Diciembre 2019

  254. Número 254 · Enero 2020

  255. Número 255 · Enero 2020

  256. Número 256 · Enero 2020

  257. Número 257 · Febrero 2020

  258. Número 258 · Marzo 2020

  259. Número 259 · Abril 2020

  260. Número 260 · Mayo 2020

  261. Número 261 · Junio 2020

  262. Número 262 · Julio 2020

  263. Número 263 · Agosto 2020

  264. Número 264 · Septiembre 2020

  265. Número 265 · Octubre 2020

  266. Número 266 · Noviembre 2020

  267. Número 267 · Diciembre 2020

  268. Número 268 · Enero 2021

  269. Número 269 · Febrero 2021

  270. Número 270 · Marzo 2021

  271. Número 271 · Abril 2021

  272. Número 272 · Mayo 2021

  273. Número 273 · Junio 2021

  274. Número 274 · Julio 2021

  275. Número 275 · Agosto 2021

  276. Número 276 · Septiembre 2021

  277. Número 277 · Octubre 2021

  278. Número 278 · Noviembre 2021

  279. Número 279 · Diciembre 2021

  280. Número 280 · Enero 2022

  281. Número 281 · Febrero 2022

  282. Número 282 · Marzo 2022

  283. Número 283 · Abril 2022

  284. Número 284 · Mayo 2022

  285. Número 285 · Junio 2022

  286. Número 286 · Julio 2022

  287. Número 287 · Agosto 2022

  288. Número 288 · Septiembre 2022

  289. Número 289 · Octubre 2022

  290. Número 290 · Noviembre 2022

  291. Número 291 · Diciembre 2022

  292. Número 292 · Enero 2023

  293. Número 293 · Febrero 2023

  294. Número 294 · Marzo 2023

  295. Número 295 · Abril 2023

  296. Número 296 · Mayo 2023

  297. Número 297 · Junio 2023

  298. Número 298 · Julio 2023

  299. Número 299 · Agosto 2023

  300. Número 300 · Septiembre 2023

  301. Número 301 · Octubre 2023

  302. Número 302 · Noviembre 2023

  303. Número 303 · Diciembre 2023

  304. Número 304 · Enero 2024

  305. Número 305 · Febrero 2024

  306. Número 306 · Marzo 2024

CTXT necesita 15.000 socias/os para seguir creciendo. Suscríbete a CTXT

extrema derecha 2.0

Budapest: la nueva meca de los ultras

Vox tiene como modelo a la democracia iliberal de Orbán. Por eso son frecuentes sus peregrinajes a orillas del Danubio. Para aprender cómo convertir una democracia plena en un régimen sin pluralismo ni derechos

Steven Forti 28/05/2022

<p>Viktor Orbán. </p>

Viktor Orbán. 

Luis Grañena

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí

Desde hace un par de décadas, Budapest se ha convertido en una de las ciudades más visitadas en Europa. En 2019, el año anterior a la covid, más de 60 millones de turistas extranjeros viajaron a Hungría y una gran parte de ellos pasearon también por su preciosa capital. Entre estos millones de personas, cada vez hay más ultraconservadores provenientes de todas las latitudes que ven en la ciudad a orillas del Danubio la nueva meca de la extrema derecha 2.0.

No debería extrañar, pues, que los pasados 19 y 20 de mayo se haya celebrado en la capital húngara el primer encuentro en Europa de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), la importante convención de los republicanos estadounidenses, hoy totalmente trumpizados, que en los últimos años está intentando crear franquicias por doquier. De hecho, la CPAC ha organizado ya encuentros en Australia, Corea, Japón y Brasil. Y el próximo septiembre lo hará también en México. Sin embargo, los casos brasileño y húngaro son los más sintomáticos. El Brasil de Jair Bolsonaro –muy involucrado, junto a su hijo Eduardo, en la realización de la CPAC Brasil– ha intentado convertirse en el centro neurálgico de la ultraderecha en América Latina. Y lo mismo puede decirse, pero con mucho más éxito, para la Hungría de Orbán en el continente europeo.

La Hungría de Orbán se ha convertido en un modelo a estudiar en los círculos de la derecha radical y extrema de todo el mundo

No hace falta recordar que el líder de Fidesz gobierna con mayorías absolutísimas desde 2010 y que el pasado mes de abril ganó las cuartas elecciones consecutivas, con más del 50% de los votos que le permitirán quedarse en el poder, como mínimo, hasta 2026. Digámoslo claro para no dejar lugar a dudas: la Hungría de Orbán se ha convertido en un modelo a estudiar y seguir en los círculos de la derecha radical y extrema de todo el mundo. Lo repitieron estos días todos los miembros de la delegación yankee que, además de con unos cuantos congresistas y senadores republicanos, contaba también con Mark Meadows, exjefe de gabinete de Trump; Matt Schlapp, presidente de la Unión Conservadora Americana –la entidad que organiza la CPAC– y la estrella mediática ultra por excelencia al otro lado del Atlántico, el presentador de Fox News Tucker Carlson. Pero no hace falta ir tan lejos. Tras un encuentro con Orbán en mayo de 2021, también Santiago Abascal, líder de Vox, lo expresó sin medias tintas: “Queremos seguir en España el ejemplo de Hungría”, fueron sus palabras en la rueda de prensa celebrada en la ciudad natal de Ehrich Weisz, conocido con el nombre artístico de Harry Houdini.

Buxadé y Tertsch, entre antisemitas y conspiranoicos

Abascal participó en la CPAC de Budapest con un mensaje en vídeo, como también hicieron Donald Trump, Nigel Farage, Eduardo Bolsonaro y el diputado conservador británico James Wharton. Presencialmente estaban los dos principales embajadores de Vox en el extranjero: los eurodiputados Hermann Tertsch y Jorge Buxadé, también vicepresidente del partido. El hiperactivismo internacional de estos hombres es reseñable. A través de la Fundación Disenso y el Foro de Madrid han viajado a menudo por América Latina para estrechar lazos con los líderes ultraderechistas regionales bajo el paraguas de la “idea” de Iberosfera. Tras Bolsonaro, se han encontrado con el chileno José Antonio Kast, el argentino Javier Milei, la peruana Keiko Fujimori o el mundo político uribista en Colombia. Precisamente, el pasado mes de febrero se organizó en Bogotá un encuentro del Foro de Madrid. Y, últimamente, además de acompañar a Marine Le Pen en su cuartel general de París la noche de la segunda vuelta electoral para las presidenciales francesas –junto a Macarena Olona, necesitada de contactos internacionales y visibilidad mediática de cara al 19J–, Buxadé y Tertsch han estado también en Budapest, celebrando como hinchas de un equipo de fútbol la cuarta victoria electoral de Orbán.

En la CPAC de Budapest estaba una buena parte de la crème de la crème de la extrema derecha europea. Además de Orbán y la plana mayor de su gobierno, en el Bálna Conference Center intervinieron también el presidente del FPÖ austriaco, Herbert Kickl; el presidente del Vlaams Belang flamenco, Tom Van Grieken; el expresidente de la República Checa, Vaclav Klaus; el presidente de la Agrupación Nacional francesa, Jordan Bardella; el vicesecretario de la Liga y estrecho colaborador de Salvini, Lorenzo Fontana; el eurodiputado de Hermanos de Italia, Vincenzo Sofo, exsalviniano y marido de Marion Maréchal Le Pen; el presidente de Nazione Futura, think tank de Hermanos de Italia, Francesco Giubilei; y varios dirigentes de otros partidos, como los polacos de Polonia Solidaria, aliados de Ley y Justicia, o los holandeses de JA21, una nueva formación surgida tras una escisión de los ultras del Foro para la Democracia.

En la CPAC de Budapest se reunió buena parte de la extrema derecha europea, además de periodistas, influencers y empresarios ultras

Entre los ponentes había también presidentes de fundaciones y think tanks, periodistas, influencers y empresarios ultras. Destacan Jack Posobiec, blogger de la Alt Right estadounidense, conocido por difundir la teoría del complot del PizzaGate, según la cual los líderes del Partido Demócrata habían montado una red de abuso infantil en el sotano de una pizzería de Washington, y el periodista húngaro Zsolt Bayer, amigo de Orbán y cofundador de Fidesz, famoso por sus exabruptos contra judíos, afroamericanos y gitanos. Pero también Matthew Tyrmand, miembro de la junta del Proyecto Veritas, asociación que se dedica a la difusión de bulos y fake news; George Farmer, CEO de Parler, la red social más utilizada por la extrema derecha por su falta de moderación y censura del discurso del odio; o su mujer, Candace Owens, “la influencer preferida por Trump”, una joven afroamericana que ataca duramente el movimiento Black Lives Matter y minimiza la amenaza del supremacismo blanco.

Todos ellos han debatido en paneles sintomáticamente titulados “La civilización occidental bajo ataque”, “In God We Trust”, “Las guerras culturales en los medios”, “El padre es un hombre, la madre es una mujer”, “Revival conservador” y “Patria, seguridad”. Es decir, los caballos de batalla de la extrema derecha 2.0. Orbán, que tras cerrar a cal y canto el Parlamento durante los primeros meses de la pandemia acaba de aprobar una nueva ley de emergencia con la excusa de la guerra en Ucrania, ejerció como anfitrión, presentándose como el mejor ejemplo de lo que debería ser el conservadurismo en el siglo XXI. De hecho, tras explicar que Occidente se está suicidando, citó también la teoría conspiranoica del Gran Reemplazo, según la cual una élite mundialista, representada por George Soros y otros multimillonarios, estaría sustituyendo a la población blanca, cristiana y europea con inmigrantes africanos y asiáticos. Una teoría del complot que ya está en boca, explícita o implícitamente, de todos los líderes e influencers ultraderechistas. Y es reivindicada por los terroristas supremacistas blancos, como, por mencionar solo el último, el autor de la masacre de Buffalo. Según The New York Times, el ya citado Tucker Carlson ha nombrado la teoría del Gran Reemplazo en al menos 400 de sus programas en Fox News, llegando así a millones y millones de estadounidenses.

Antiabortistas a orillas del Danubio

La CPAC de Budapest no es ni de lejos el primer encuentro ultra que se organiza a orillas del Danubio. En 2017, Orbán fue el anfitrión del Congreso Mundial de las Familias, uno de los principales lobbies ultraconservadores activos a los dos lados del Atlántico contra de la igualdad de género, el aborto y los derechos LGTBI. Dos años después, con Salvini en el Ministerio del Interior, el congreso se organizó en Verona gracias a la labor del entonces eurodiputado de la Liga, Lorenzo Fontana, mientras que en 2012 fue Ignacio Arsuaga, fundador de HazteOír y buen amigo de Abascal, quién lo montó en Madrid. Lo que le dio la posibilidad al año siguiente de crear CitizenGO, la rama internacional de HazteOír, financiada y apoyada por una poderosa y adinerada red global, que va del estadounidense Brian Brown al oligarca ruso Konstantin Malofeev, muy cercano a Putin.

Además, desde 2015, cada dos años la capital húngara acoge el Budapest Demographic Summit, un encuentro que de científico tiene muy poco. En su cuarta edición, celebrada en septiembre de 2021, además de Orbán y sus ministros, participaron también Marion Maréchal, el exvicepresidente estadounidense Mike Pence, el liguista Fontana, el exministro del PP Jaime Mayor Oreja, los primeros ministros checo, esloveno y serbio, Babis, Janša y Vucic, o el vicepresidente de la Unión Conservadora Americana, Dan Schneider, presente también en la CPAC que se ha celebrado recientemente en la capital húngara.

Para que tengamos clara la centralidad de Budapest, vale la pena añadir que esta misma semana, el 26 y 27 de mayo, se ha celebrado allí también la convención titulada “Libertad en juego. Construyendo y fortaleciendo una agenda a favor de la libertad a nivel mundial”. El encuentro ha estado organizado por el Political Network for Values, organización presidida por el excandidato ultra en las recientes presidenciales chilenas, José Antonio Kast. Entre los ponentes encontramos miembros de los gobiernos de Brasil, Ecuador, Guatemala y Eslovaquia, además de diputados conservadores de Colombia, Irlanda, Austria, Chile, Kenya, Estados Unidos y, ça va sans dire, España. En concreto, los españoles presentes eran la eurodiputada de Vox Margarita de la Pisa, y el diputado del PP, y a la sazón presidente de la asociación Familia y Dignidad Humana, Javier Puente, recuperado en 2019 por Casado tras su abandono del partido debido a sus posiciones antiabortistas. La delegación española, sin embargo, ha sido mucho más nutrida: a la meca húngara han regresado también los ya citados Arsuaga y Mayor Oreja, que, no se olvide, además de uno de los principales lobbistas antiabortistas en la Península, es también profesor del Instituto Superior de Sociología, Economía y Política (ISSEP), es decir, la filial española de la escuela de Marion Maréchal que Vox ha abierto hace un par de años en Madrid.

Las redes son ya sólidas y se basan en un sinfín de organizaciones y think tanks que defienden en todo el mundo los valores ultraconservadores

Como se puede apreciar, muchos nombres se repiten en estos encuentros. Las redes tejidas son ya sólidas y se basan en un sinfín de asociaciones, organizaciones y think tanksque defienden en todo el mundo los valores ultraconservadores: desde la Heritage Foundations a CitizenGo, pasando por la Fundación Burke –que organizó la Conferencia Nacional de Conservadurismo en Roma en febrero de 2020, a la cual asistieron, entre otros, Orbán, Abascal, Giorgia Meloni y Marion Maréchal– o el Centro Europeo para la Ley y la Justicia, un lobby con sede en Estrasburgo presidido por el jurista ultracatólico Grégor Puppinck, presente también en la convención de Budapest. A la que no ha faltado tampoco el actor y productor cinematográfico mexicano Eduardo Verastegui, director del movimiento ultracatólico Viva México y organizador de la CPAC que se celebrará en el país centroamericano en septiembre.

Quizás es el Centro para los Derechos Fundamentales, entidad húngara estrechamente vinculada al gobierno de Orbán que ha organizado la CPAC de Budapest, la organización que resume mejor los objetivos de todo este entramado. En su presentación, se explica que “su misión es preservar la identidad nacional, la soberanía y las tradiciones sociales cristianas”, además de “formar un contrapeso al fundamentalismo de los derechos humanos y la corrección política que han estado afectando a numerosos aspectos de nuestra vida cotidiana”. Simplificando, defender la que llaman la civilización cristiana europea de la “dictadura progre” representada por las izquierdas y el liberalismo.

Orbán, el modelo para Abascal

Hay que añadir una última vertiente a todo esto: la reorganización de la extrema derecha a nivel europeo. En la actualidad los ultras están divididos en dos partidos a escala comunitaria y dos grupos en el Europarlamento. Por un lado, Identidad y Democracia (ID) con Salvini, Le Pen, el FPÖ, Alternativa para Alemania, los portugueses de Chega! o el Partido de la Libertad holandés. Por el otro, los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) con los polacos de Ley y Justicia, Hermanos de Italia y Vox, entre otros. A principios de 2021, la expulsión de Fidesz del Partido Popular Europeo (PPE) dio pie a especulaciones sobre la posible creación de un único macropartido ultra. Salvini lo ha intentado en diferentes ocasiones, reuniéndose en abril del año pasado con Orbán y Morawiecki, pero sin éxito.

Los ultras están divididos en dos partidos a escala comunitaria y dos grupos en el Europarlamento. Las diferencias geopolíticas han sido el principal escollo

Las diferencias geopolíticas han sido el principal escollo –rusófilos versus atlantistas–, junto a las ambiciones personales y a las cuotas de poder. Meloni, por ejemplo, elegida hace un par de años presidenta del ECR, no quiere ni oír hablar de perder la centralidad conquistada recientemente, además frente a un Salvini aliado y a la vez competidor en el Belpaese, que está en caída libre en intención de voto. Esto explica que no haya habido avances, más allá de declaraciones de principios sobre mínimos comunes como el manifiesto firmado en julio de 2021.

Además, las relaciones entre Varsovia y Budapest han saltado por los aires con la invasión rusa de Ucrania, y el grupo de Visegrado está partido en dos: en un lado está Orbán, bien relacionado con Putin, que se opone al embargo al petróleo y el gas rusos; en el otro están polacos, checos y eslovacos, que empujan a la OTAN a intervenir aún más directamente en Ucrania. Las tensiones estaban en realidad ya a flor de piel en la cumbre de Madrid organizada por Vox a finales del pasado mes de enero. Salvini y Meloni, ocupados con la elección del presidente de la República en Italia, no acudieron, mientras que Morawiecki estuvo muy molesto con Orbán, Le Pen y los austriacos del FPÖ por no condenar la amenaza rusa, aunque a última hora se añadió una breve mención para salvar los muebles.

Una prueba ulterior de cómo está el patio la hemos tenido tras la victoria de Orbán y el excelente resultado de Le Pen en las presidenciales francesas el pasado mes de abril. Entre los que han felicitado al primer ministro de Hungría y a la líder de la Agrupación Nacional ha habido esencialmente miembros de ID: los de ECR han callado o, como mucho, han hecho declaraciones muy neutras. Hubo solo una excepción: Vox. El partido de Abascal, como se recordaba antes, envió a Buxadé, Tertsch y Olona a orillas del Danubio y del Sena. Además, el 22 de abril Orbán, tras ser recibido por Bergoglio en el Vaticano, se reunió con Salvini –acompañado del fiel Lorenzo Fontana– para lanzar un nuevo proyecto de “centroderecha” a nivel europeo. El objetivo sería el de presentarse como más moderados y canibalizar al PPE, en franco declive en todo el continente. Meloni y Morawiecki, los principales líderes de ECR, no dijeron ni mu.

Vox siempre ha cuidado las relaciones con el mundo ultraconservador estadounidense

No ha habido muchos avances en las siguientes semanas, más allá de la CPAC de Budapest que, sin embargo, puede darnos algunas pistas. De hecho, casi ningún miembro de ECR estuvo presente, excepto la plana mayor de Vox, dos figuras de segundo nivel de Hermanos de Italia (Sofo y Giubilei) y otros diputados menos conocidos de Polonia –pero no de Ley y Justicia– y Holanda. Es cierto que Abascal y los suyos han cuidado desde el minuto uno las relaciones con el mundo ultraconservador estadounidense: gracias a la intermediación de Rafael Bardají, vinculado a los neocons en Washington desde los tiempos de Bush y Aznar, Espinosa de los Monteros en 2019 y el mismo Abascal el año siguiente fueron invitados para asistir –y así hacerse conocer– a la CPAC de la casa madre, la de Estados Unidos. Así que una CPAC en Europa era una ocasión que no se podía perder.

Ahora bien, si, como parece, el proyecto de un nuevo macropartido ultra en la UE ha nacido cojo y tiene visos de convertirse en un simple lavado de cara de Identidad y Democracia, que se ampliaría a Orbán, deshaciéndose quizás de Alternativa para Alemania, la gran pregunta es qué quiere hacer Vox. ¿Se aliará con Salvini, Orbán y Le Pen, dejando en la estacada a Meloni y Morawiecki? El tiempo dirá.

Lo que queda claro es que, hagan lo que hagan en cuanto a alianzas en Bruselas, para los de Abascal la democracia iliberal de Orbán es el modelo a seguir y a importar en España. Por eso se van tan frecuentemente de peregrinaje a orillas del Danubio. Para aprender cómo convertir una democracia plena en un régimen híbrido, es decir, camino a ser un autoritarismo competitivo donde el pluralismo existe solo en la fachada y los derechos de las minorías brillan por su ausencia. Estaría bien que lo tuviesen claro los ciudadanos andaluces que irán a votar el próximo 19 de junio.  

Desde hace un par de décadas, Budapest se ha convertido en una de las ciudades más visitadas en Europa. En 2019, el año anterior a la covid, más de 60 millones de turistas extranjeros viajaron a Hungría y una gran parte de ellos pasearon también por su preciosa capital. Entre estos millones de...

Este artículo es exclusivo para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí

Autor >

Steven Forti

Profesor de Historia Contemporánea en la Universitat Autònoma de Barcelona. Miembro del Consejo de Redacción de CTXT, es autor de 'Extrema derecha 2.0. Qué es y cómo combatirla' (Siglo XXI de España, 2021).

Suscríbete a CTXT

Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias

Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí

Artículos relacionados >

Los comentarios solo están habilitados para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí