En una especie de repetición de 2011, el mapa de España vuelve a teñirse de color azul. Como sucediera por aquel entonces, también se tiñe en esa aldea gala del PSOE que es el feudo de Andalucía. El Partido Popular, liderado entonces por Javier Arenas, arrasó de la mano de la victoria de Rajoy en Madrid y como pasara hace 5 años, ayer Andalucía se mimetizó con lo ocurrido a nivel estatal dándole al partido conservador una victoria mínima, pero victoria, con el candidato desconocido Juan Manuel Moreno Bonilla a la cabeza.

Un palo para Susana Díaz que, pagando el abc de la política que dice que el éxito o la derrota lo marcan las expectativas, frenó la temida ascensión de Unidad Popular, pero sale derrotada con este resultado que la lleva al segundo puesto autonómico ante un Pedro Sánchez que, logrando el peor resultado histórico del PSOE a nivel nacional, aguanta el sorpasso y sale vivo del 26J. Nadie cogerá un AVE Sevilla-Madrid esta semana para reemplazar a nadie.

Si analizamos el resultado (PP 23, PSOE 20, Podemos 11, Ciudadanos 7),  poco ha cambiado respecto al pasado 20D, pero nos encontramos algunos detalles significativos si ponemos la lupa en las provincias. En esa estrategia por la transversalidad, a Unidos Podemos le ha funcionado mejor Diego Cañamero que el general Julio Rodríguez. En Jaén, tierra abonada al bipartidismo hasta ayer, la lista encabezada por el líder del SAT Diego Cañamero ha levantado 1 escaño que es, de alguna manera, histórico por lo que representa. En la circunscripción de Almería, liderada por el general Julio Rodríguez, ese escaño logrado por Podemos el 20D, se fue ayer del lado del Partido Popular. En Córdoba, tierra del padre espiritual de la confluencia, Julio Anguita, no hubo efecto Monereo y ese ansiado escaño que sumar al conseguido en diciembre no cayó del lado de Unidad Popular. En la simbólica capital, Sevilla, también hubo cambios respecto al 20D. Esa victoria del PSOE que hace 6 meses se tradujo en votos y escaños (PSOE 5, PP 3, Podemos 2, Ciudadanos 2), ayer se transformó en una victoria exclusivamente en votos: el PP iguala al PSOE en 4 asientos por la parte alta y Unidos Podemos se posiciona con 3 escaños.

Esas voces que con el descenso de participación a las seis de la tarde pronosticaban caída del PSOE acertaron.