Los petrodólares amenazan a la aristocracia del fútbol europeo
Países que inyectan dinero a los equipos, controles económicos que se eluden, normativas que afectan de distinta forma a los traspasos, mercados disparados… El verano deja un panorama preocupante para el fútbol continental
Ricardo Uribarri 6/09/2017
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Es posible que dentro de unos años recordemos este verano de 2017 como un punto de inflexión en el mundo del fútbol. Ocurrirá siempre y cuando los responsables de los organismos internacionales que lo regulan dejen de mirar para otro lado y de hacerse los sordos y pongan remedio a un paciente que de tanto engordar, corre peligro de estallar como un globo. La radiografía que le han hecho en estos últimos días nos deja un diagnóstico preocupante: países aportando dinero para realizar fichajes; clubes que se saltan a la torera el control económico; el mercado disparado con pagos fuera de toda lógica; distintas reglas para las ligas; jugadores en rebeldía…
La conclusión parece evidente. Las normas vigentes se han quedado obsoletas para la nueva realidad que vive el balompié a su más alto nivel. Tan absurdo sería negar que algunos de los equipos que ahora se ven amenazados, como pueden ser Real Madrid y Barcelona, fueron los que empezaron a hinchar hace unos años al enfermo, como no reconocer que los síntomas se han agravado con la compra de ciertos clubes por parte de fondos de inversión pertenecientes a países árabes con posibilidades económicas casi ilimitadas. El pago del PSG parisino al Barcelona de 222 millones por Neymar y la compra, encubierta de cesión, de Mbappe por el que deberá abonar otros 180 millones al Mónaco han disparado las luces rojas de alarma.
El que fuera presidente del Deportivo de la Coruña durante 26 años, Augusto Cesar Lendoiro, es de los que opinan que es necesario tomar medidas: “Si en los años noventa asistimos a la aparición de la 'Ley Bosman', que supuso un cambio estratégico trascendente en la relación jugador-club, ahora viviremos el nacimiento de una especie de 'Ley Mbappé', una norma UEFA, aplicable en toda Europa, que modificará totalmente la redacción del Fair Play Financiero-Control Económico”.
Javier Tebas parece olvidar que la Comisión Europea falló hace un año que siete clubes españoles habían recibido 69 millones en ayudas de Estado ilegales
A petición de la Liga de Fútbol Profesional, que ve peligrar de cara al futuro la posición de liderazgo en Europa de sus principales clubes, la UEFA ha decidido abrir una investigación al PSG, propiedad de Qatar Investment Authority (QIA) a través de su filial especializada en inversiones deportivas, y podría hacerlo también con el Manchester City, controlado por Abu Dhabi United Group (ADUG). “La financiación del PSG y del City gracias a ayudas estatales distorsiona las competiciones europeas y crea una espiral inflacionista que perjudica irreparablemente a la industria del fútbol”, afirma el presidente de la patronal de clubes nacional, Javier Tebas, que parece olvidar que la Comisión Europea falló hace un año que siete clubes españoles habían recibido 69 millones en ayudas de Estado ilegales.
Hace tres años, la UEFA ya impuso una multa a PSG y City de 60 millones por violar las reglas del fair play financiero, la norma que utiliza la institución continental desde 2011 para vigilar que los clubes que participan en competiciones europeas no superen unos límites de gasto en relación a sus presupuestos. En realidad sólo dejaron de percibir 20 millones cada uno de sus ingresos por competiciones europeas, ya que los otros 40 estaban condicionados a infracciones futuras. Es decir, una sanción que apenas les hizo cosquillas. En aquel momento, la UEFA, estaba presidida por Platini, que en 2010 se comprometió a apoyar la candidatura catarí para acoger el Mundial de 2022. Se dice que una de las contrapartidas fue la compra del PSG, el equipo favorito del entonces presidente galo, Sarkozy.
El actual presidente del organismo europeo, Aleksander Ceferin, está ante una gran oportunidad de demostrar que tiene las manos libres para poner coto a esta situación a pesar de contrapesos tan fuertes como el patrocinio que mantiene la propia Catar con la FIFA, el mayor en la historia de la institución que rige el fútbol mundial, que le proporciona 50 millones por temporada hasta 2022. El dirigente ha reconocido que “se deben hacer algunas modificaciones en el fair play financiero para borrar sus imperfecciones con el fin de que todos los clubes que participan en nuestras competiciones tengan el mismo trato. La credibilidad de la UEFA y del fútbol está en juego. Nadie está por encima de la ley”.
El Manchester City es el equipo que más dinero ha gastado en el mundo en los últimos seis años, unos 1.050 millones de euros, seguido muy de cerca por el PSG, que alcanza los 940 millones. En ese mismo tiempo, el Barcelona ha invertido 727 millones mientras que el Real Madrid se ha quedado en los 557, según datos de la web especializada Transfermarkt. El balance entre compras y ventas refleja unos números negativos de 750 millones en el caso de los parisinos y de 708 en el de los ingleses, un balance que no podrían aguantar de no ser por las ayudas externas que reciben.
Porque más allá de los artificios contables que se puedan hacer para aparentar cumplir con las leyes, lo que está en cuestión es el dopaje financiero que realizan los propietarios de estos clubes con un dinero que no procede del fútbol y que no se ven obligados a devolver. La dinastía de los Al-Thani que gobierna Catar desde el siglo XX, aprovecha las multimillonarias ganancias que les dan el gas y el petróleo para invertir a lo largo del mundo a través del holding QIA, con un patrimonio estimado de 270.000 millones de euros.
lo que está en cuestión es el dopaje financiero que realizan los propietarios de estos clubes con un dinero que no procede del fútbol y que no se ven obligados a devolver
Las inversiones deportivas las realizan a través de Qatar Sports Investments, que inyecta fondos a través de acuerdos publicitarios inflados con la línea aérea Fly Emirates y la autoridad turística de Catar. El mismo sistema utilizan los Al Nahayan, la familia dominante de Abu Dhabi, que por medio de la empresa de desarrollo e inversión ADUG, aporta grandes recursos económicos al City bajo el paraguas del acuerdo comercial que tiene con Etihad, la aerolínea estatal del emirato.
Siendo el asunto del fair play financiero uno de los problemas graves que acechan al fútbol europeo, no es el único sobre el que debería reflexionar la UEFA. No es de recibo que las principales ligas no funcionen bajo las mismas reglas. Y nos estamos refiriendo al tema de las cláusulas de rescisión, que sólo están vigentes en España. Este verano se ha demostrado que los clubes de nuestro campeonato compiten en desigualdad de condiciones en el mercado. Cualquier club extranjero puede llevarse a un jugador de nuestro campeonato abonando la cláusula pactada en el contrato, pero un equipo español no puede hacer lo mismo ya que en Inglaterra, Francia, Alemania o Italia, no existen.
Así, el Barcelona se ha quedado sin poder fichar, por ejemplo, a Verrati o a Coutinho. El presidente del PSG, Nasser Al-Khelaifi, fue explícito sobre este aspecto, afirmando que “tenemos suerte que en Francia no debemos poner esas cláusulas”. En España existen desde 1985, cuando salió adelante el Real Decreto 1006 que regulariza la relación de los deportistas profesionales con sus clubes con el fin de sustituir al antiguo derecho de retención. Su derogación parece complicada, ya que necesitaría un procedimiento parlamentario.
Otra cuestión importante a debate es decidir cuándo se deben cerrar los periodos de fichajes. Los entrenadores de los equipos más importantes han vuelto a recomendar a la UEFA en su reunión anual, que el mercado de verano debería cerrarse antes de que comiencen las competiciones nacionales. Así, cada equipo sabría con la plantilla que cuenta antes de empezar los torneos oficiales, evitando que durante varias semanas se produzcan situaciones como la de jugadores que se rebelan y no juegan alegando cualquier problema al querer marcharse a otro club, como ha pasado con Dembele, Coutinho o Diego Costa.
El verano se acaba, el mercado se cierra y parece que los partidos lo tapan todo, pero mal haría la UEFA si no toma medidas para controlar a un paciente al que los excesos a los que le someten unos y otros le están minando seriamente la salud.
Autor >
Ricardo Uribarri
Periodista. Empezó a cubrir la información del Atleti hace más de 20 años y ha pasado por medios como Claro, Radio 16, Época, Vía Digital, Marca y Bez. Actualmente colabora con XL Semanal y se quita el mono de micrófono en Onda Madrid.
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1 comentario(s)
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florin
jo, pues yo lo que se es que el madrid ha pagado millonadas por sus crak desde hace tiempo, y que lleva siendo favorecido bochornosamente en europa en sorteos, arbitros y demas....victimismos los justos, se los dejamos para los fans del imperio y llorones de la hispanofobia que nos tienen jajajaj, pobres españolitos del palio.
Hace 7 años 2 meses
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