La sanidad española, cuarta por la cola de la UE en camas dedicadas a la atención psiquiátrica
En 2014 murieron en España el doble de mujeres que de hombres a causa de enfermedades mentales y desórdenes de comportamiento
Carlos H. de Frutos 29/01/2018
Urgencias del Hospital de Alta Resolución de Benalmádena, Málaga.
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España es uno de los países de la Unión Europea que menos camas de hospital por habitante dedica a la atención psiquiátrica. Según datos recientemente publicados por Eurostat, en 2015 nuestro país contaba con algo menos de 40 camas habilitadas para servicios de atención psiquiátrica por cada 100.000 habitantes, muy por debajo de las 72 disponibles de media en la UE para este tipo de cuidados –equivalente al 14% del total–. En este sentido, la sanidad española es la cuarta de la UE que menos recursos dedica a la atención de pacientes con dolencias relacionadas con la psiquiatría, tan solo por encima de Irlanda (35), Chipre (22) e Italia (9). A la cabeza de esta lista, caracterizada por una tendencia a la baja generalizada con respecto a los últimos datos fechados en 2010, destacan Bélgica, Malta y Alemania, con 174, 132 y 127 puestos de atención sanitaria dedicados a servicios psiquiátricos respectivamente.
Estos datos contrastan con los altos índices que presenta nuestro país en cuanto a personas que sufren enfermedades mentales y desórdenes de comportamiento, por encima de los promedios comunitarios en muchos de los apartados que se reflejan en la estadística adjunta al informe. Según los datos de Eurostat, durante 2014 murieron en España 18.699 personas a causa de enfermedades psiquiátricas o trastornos de conducta, lo que supone un 4,7% sobre el total de muertes. Un dato notablemente superior al 3,7% de media del conjunto de países que conforman la UE28, entre los que sumaron 183.469 personas fallecidas como consecuencia de este tipo de dolencias.
Las variaciones que se contemplan en este ámbito en función del género de las personas fallecidas es especialmente relevante. Según apunta el documento, apenas un 2,8% de hombres murieron de media durante el citado año a causa de este tipo de enfermedades dentro de la UE, mientras que hasta un 4,7% del total de personas que murieron fueron mujeres. En el caso de nuestro país, la distancia entre ambas cifras se ensancha hasta alcanzar una diferencia de más de 3 puntos porcentuales –3,2% varones fallecidos, frente al 6,4% de mujeres–. En otras palabras: en España murieron el doble de mujeres que de hombres a causa de enfermedades mentales y desórdenes de comportamiento.
En el caso de la enfermedad de Alzheimer y trastornos relacionados con la demencia, los ratios de los datos presentados por Eurostat mantienen dinámicas muy similares. El número de personas afectadas por este tipo de patologías fue de media superior en España que en resto de la UE, tanto en hombres como en mujeres. De esta forma, a nivel comunitario 48 hombres y 52,8 mujeres por cada 100.000 habitantes sufrieron este tipo de afecciones psiquiátricas relacionadas con la edad. Mientras, en el caso de nuestro país, los datos presentan valores notablemente más altos en líneas generales, particularmente en cuanto a la variación entre hombres y mujeres. De cada 100.000 españoles, a casi 58 hombres por cada 100.000 habitantes se les diagnosticó dolencias relacionadas con la demencia o la enfermedad de Alzheimer durante el año 2014, aproximadamente 10 menos que en el caso de las mujeres (68,5).
Por otro lado, en cuanto a trastornos relacionados con cuadros de depresión, esta brecha de género se mantiene en la misma tendencia: en todos los países de la UE28 –además de Turquía, Islandia y Noruega– la proporción de personas deprimidas fue mayor en el caso de las mujeres que en el de los hombres. España destaca además como el segundo país que mayor distancia registra en función del género en este apartado –tan solo por detrás de Portugal (17,2%)–, con una diferencia porcentual de más de 8 puntos entre hombres y mujeres. De esta forma, mientras que los hombres españoles presentaron índices de depresión inferiores a la media comunitaria, en el caso de las mujeres el promedio español supera con creces el de la UE.
Por último, en referencia a estas variaciones según el género, cabe resaltar las diferencias significativas que muestran los datos del informe en el sentido contrario al anteriormente expuesto, cuando se trata de índices de trastornos provocados a causa del consumo de alcohol y drogas. En este aspecto, el promedio regional de hombres afectados por patologías mentales y desórdenes de comportamiento a consecuencia del abuso de drogas fue cinco veces mayor que el de las mujeres (0,5 hombres frente a 0,1 mujeres por cada 100.000 personas). Y muy cercano a ese ratio se ubicaba el de consumo de alcohol, para el cual las medias comunitarias fueron de 4,7 hombres y 1,1 mujeres (por cada 100.000 habitantes). Nuestro país reduce notablemente estos índices a nivel global, aunque mantiene las variaciones por género. Los hombres españoles que desarrollaron problemas psiquiátricos a causas del alcohol apenas superaron el ratio de 1 por cada 100.000 habitantes, mientras los datos para las mujeres se limitaron a un 0,1, variación que se mantiene similar en el caso de las drogas.
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Espacio de información realizado con la colaboración del Observatorio Social de “la Caixa”.