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“¡Qué susto! Me habían dicho que saliera, que el entrenador quería hablar conmigo y pensaba: ¿Qué habré hecho ahora? Ya me van a echar...”. Así, bromeando, recibe a CTXT la jugadora del Atlético de Madrid y de la Selección sub-19 Itziar Pinillos (Madrid, 2000) en la primera entrevista que concede a un medio de comunicación. Risueña y algo cansada tras una de las primeras sesiones de entrenamiento previas a la fase final del Campeonato de Europa Femenino sub-19, Pinillos se muestra natural y desenvuelta. Este torneo, que se celebrará en Escocia entre el 16 y el 28 de julio, es especialmente relevante, ya que acceder a la semifinal equivale a asegurarse la clasificación para el Mundial sub-20 del año que viene. Un reto que asume con la seguridad que le da la experiencia de haber formado parte del equipo que se proclamó campeón de Europa en 2018 tras imponerse en la final a Alemania por 1 gol a 0.

¿Cuál es vuestro objetivo para esta Eurocopa?

Lo fundamental es clasificarnos para el Mundial, pasar la fase de grupos. Y luego ya está claro que vamos a ganar el Europeo.

¿Qué análisis hace de Bélgica, Inglaterra y Alemania, vuestros rivales en la fase eliminatoria?

Nos ha tocado un grupo muy duro. Son potencias que, a lo mejor, físicamente son un poco superiores, pero nosotras nos vamos a imponer con nuestro juego. Creo que podemos pasar de la ronda de grupos perfectamente e, incluso, ganar el Europeo, como ya hemos demostrado. 

¿Cuál cree que es el más complicado?

Si me tuviese que mojar, por la potencia que es, Alemania. 

¿Afrontáis todos los partidos manteniendo vuestro estilo o cambiáis la forma de jugar en función del rival?

No, no. Creo que lo que nos caracteriza es que jugamos a nuestro juego, al toque, a tener el balón, a generar ocasiones y, en definitiva, a ser una selección diferente al resto. Al final, si sabes que el equipo rival es un poco superior a ti físicamente, lo que tienes que hacer es poner el juego y, para ello, es fundamental tener el balón.

¿Se juega con más presión siendo una de las favoritas?

No, yo creo que no es que juegues con más o menos presión porque, ya te digo, es tu juego y tu objetivo siempre es ganar. Pero es que en este Europeo no partimos como favoritas ni mucho menos, va a estar todo muy igualado.  

El año pasado ya jugó y ganó un Campeonato de Europa. ¿Cómo usa esa experiencia cuando le toca afrontar un partido decisivo o especialmente complicado en lo emocional?

Haber podido jugar ya este tipo de partidos hace que en otras situaciones similares no te pongas tan nerviosa o sepas afrontarlo de una manera distinta que si no lo hubieras hecho. Igual luego me pongo yo mucho más nerviosa, ¿eh? Pero me parece que la experiencia te ayuda a manejar mejor este tipo de situaciones, te da más tranquilidad.

¿Cuál es su papel dentro de la Selección?

No lo sé exactamente, no sé cuál es mi rol... Aquí juego de central o de lateral y es un puesto que tiende a ser más defensivo, pero en este equipo todas participamos cuando se ataca y cuando se defiende. Al final, todas tenemos el mismo rol que es ir todas a una y luchar hasta el final todas juntas. 

Este avance del fútbol femenino hace que cada vez haya más niñas queriendo jugar y que las que estamos abriéndonos camino cada vez estemos más motivadas

Pinillos llegó a la cantera del Atlético de Madrid en 2012 y, cinco años después, ya jugaba con el Atlético B. El verano pasado, nada más ganar el Europeo, viajó a Colombia para sumarse a la pretemporada del primer equipo con el que, con solo 17 años, había debutado en febrero. Aunque actualmente juega como centrocampista, empezó desempeñándose como defensa central: “En el Atleti depende mucho del entrenador que te ve en una posición, te ve en otra... –explica– Y me tocó con una entrenadora que me vio más progresión en el medio. Estuve un año jugando de central y ya llevo como cinco o seis años de medio”. Ambos puestos son muy diferentes y, por tanto, “te exigen características distintas, pero poder jugar en varias posiciones y saber la idea que hay que tener en cada una ayuda mucho, tanto para venir a la Selección como para progresar en tu equipo”. 

¿En qué se diferencia el estilo de juego de la Selección del que tiene el Atleti B?

Partimos de la base de que las jugadoras son diferentes, por lo que ya de entrada no puedes jugar igual. Pero en el Atleti lo que buscamos también es tener el balón y generar ocasiones a través de la tenencia del balón. En ese sentido es igual que en la española.  

Al tener estilos similares le será más fácil pasar de un equipo a otro.

¡Sí, sí! Y más con estas jugadoras, que te lo hacen todo muchísimo más fácil. 

Aunque es habitual en el filial, ya sabe cómo se juega en el primer equipo. ¿Se mantiene el mismo estilo o cada uno juega en función de quién lo entrene?

No, se mantiene totalmente, desde el primer equipo hasta el último. Todos los entrenadores se reúnen para seguir el mismo esquema. Es que lo estás buscando, al final, son jugadoras para tu primer equipo, entonces tienes que basarte en el sistema que se utilice ahí. Eso hace que luego sea más fácil seguir subiendo. 

¿Cree que este es uno de los factores por los que el Atlético de Madrid es uno de los equipos más potentes de LaLiga Iberdrola?

Sí, claro, porque al final esto no solo te ayuda a tener mejores jugadoras, sino que tienen las características justas que necesita el sistema de juego con el que estás trabajando. Al hacerlo así, el equipo puede funcionar mejor; todo es mucho más sencillo.

El Atlético de Madrid batió el récord de asistencia al estadio en San Mamés, y después en el partido contra el Barça en el Metropolitano. Cuando se enfrentó al Athletic en cuartos de la Copa de la Reina la final se emitió en Telecinco... ¿Todos estos hitos la motivan o la echan para atrás?

¡Nooo! Todo lo contrario. Este avance del fútbol femenino, porque es de todas no solo del Atleti, hace, primero, que cada vez haya más niñas queriendo jugar y, después, que las que estamos abriéndonos camino cada vez estemos más motivadas. Todo el esfuerzo que han hecho muchísimas jugadoras desde atrás está mereciendo la pena y ahora lo que tenemos que hacer es seguir, seguir y seguir. Motiva, motiva mucho.