1- Ya ha salido lo de Abogacía.

2- Sinopsis. Asume que lo del TJUE es un cambio de doctrina king-size. Es decir, asume la jerarquía del derecho comunitario sobre el estatal –puede parecer la invención de la sopa de ajo, pero Fiscalía, glups, no sólo parece no asumirlo, sino que en ese punto está en modo Espoz y Mina, con la navaja en la boca y todo; lo que acojona–. Abogacía reconoce la inmunidad parlamentaria de Junqueras. Es decir, el problemón. Y va más allá, al proponer que “como miembro de la cámara (Junqueras) puede dar cumplimiento a su misión”. Vamos, que Junqueras, inhabilitado por 13 años en el país favorito de la Divina Providencia, fuera de él no lo está. Wala. La sentencia, el juicio, el itinerario creativo por el que fue juzgado en el TS, y no en el TSJC, y por el delito de rebelión, y no por el de trilero, es como la pulsera all-included de Disneylandia. Sólo cuela en Disneylandia. Abogacía asume como solución al pifostio que el TS/Disneylandia emita un suplicatorio al PE. Un suplicatorio que, por otra parte, no está claro –ya veremos– que el PE vote favorablemente. Lo que, si ese es el caso, sería un revés al nacionalismo esp –no creo que la sentencia, desmesurada, ni su itinerario judicial hasta el TS, tenga que ver tanto con el Estado de Derecho como con el nacionalismo esp, ese psicoanálisis–, sólo comparable al hecho incomprensible de que el primer hombre que pisó la luna no fuera esp.

3- Lo de Abogacía, no obstante, tiene un punto magui. Fija que Junqueras es usuario del PE mientras la JEC no se pronuncie sobre la incompatibilidad de su condena con su condición de parlamentario electo. No se pierdan, en ese sentido, el punto 13, en el que, me temo, deberán apartar a los niños.

4- Lo de Abogacía es chachi. Si bien, a efectos jurídicos, no tiene por qué servir para nada. El TS, en la solución al pollo planteado por el TJUE, se debe más a Fiscalía que a la lírica. La propuesta del TS para que las partes –las partes que no son Fiscalía, quiero decir– alucinen y hagan su lectura parece ser antes algo encaminado a dilatar la emisión de su punto de vista –el TJUE le pidió al respecto medidas inmediatas; no ha sido así, gracias a ese pedir pareceres– y, por el mismo precio, se diría, incluso a dilatar la investidura. Alejarla del frame navideño, esa happy hour.

5- Pero lo de Abogacía, a su vez, tiene una importancia política absoluta. Facilita el pacto PSOE-ERC. Verbaliza el posicionamiento del Gobierno. Esa era su función. Una foto-finish. Un no-os-la-voy-a-dar-con-queso. O un al-menos-no-mucho. Una condición para el pacto cumplida, diría que con nota.

6- Del pacto PSOE-ERC sabemos poco. Seguiremos sabiendo poco incluso cuando se acaben las filtraciones y empiecen los datos empíricos. Lo que ha trascendido es que las demandas de ERC eran una vía de solución a la cosa cat, pero también una vía de solución a la cosa esp, a su exceso yuyu de judicialización. Los temas de conflicto, nos dicen non-stop, es a) establecer una mesa de diálogo nueva. Nada que ver con la ventanilla Estado-Gene ya existente. Es asumible. Un b) calendario, para ver si el niño progresa adecuadamente. Algo más nebuloso para el PSOE. Por definición, ningún gobierno quiere ser controlado. Los gobiernos procesistas de la Gene emitieron calendarios para la indepe precisamente para evitar ser controlados, por motivos propagandistas, esa subnormalización, es decir, esa ausencia de control. A su vez, c), ERC quiere garantías de cumplimiento. Pero también el PSOE, que quiere estabilidad, pruebas de que se votarán los presupuestos. Bueno, ya se lo montarán. Que es lo más verosímil. O no.

7-El pack negociaciones PSOE-ERC ha permitido, no obstante, visualizar dónde vivimos, en lo que tal vez sea un servicio no deseado por PSOE-ERC. Vivimos en un bucle nacionalista esp y cat, tan barroco que es imposible un diálogo efectivo y con juego de piernas sin ser denunciado, por dos nacionalismos, como traidor a la patria respectiva. El PSOE no ha podido desprenderse del bucle constitucionalista –que no constitucional; tal vez, incluso, su contrario–. Una presión nacionalista que impide llamar al pan, pan, y al vino, vino. ERC, a su vez, lo mismo, pero desde el barroquismo de otro nacionalismo con otras leyes férreas, el procecismo. Espero que en algún momento hayan podido abandonar las muecas y hablar en un lenguaje que no sea el calderoniano. Si bien no hay pruebas de ello. Lo veremos en breve, a tiempo real.

8- El tomate de estos días ha permitido, también, ver la brutalidad del Estado y del procesismo. Ver cómo el Estado, para solucionar el tema cat por la vía judicial –algo sumamente hipotético– se saltó la ley. Como mínimo en el tramo europeo. Que como los estudiantes y repetidores de primero de Derecho saben, es esp y de obligado cumplimiento. Y ver cómo el procesismo carecía de toda inteligencia salvo una. De toda acción política y democrática salvo un impulso y desvelo que no necesariamente es político ni democrático: evitar el empure de sus líderes, que no de su sociedad, vía triquiñuelas. Como poner, reiteradamente, en la cabeza de sus listas a sus líderes empurados. Ha funcionado. O, mejor, ha perdido este round el punto de vista más brutal, poseedor de más fuerza bruta y, por ello, más desmesurado en su respuesta. El Estado. A su vez, el procesismo no ha ganado. Pero ha quedado mono.

9- PSOE y ERC, en todo caso, se han arriesgado. Más, diría, ERC. Se expone al nacionalismo doctrinario, vertical, autoreferencial, derechista, modulado verticalmente en medios de comunicación, sin sentido ni posibilidad política, salvo la electoral, y que tanto colaboró en crear. Es decir, se expone a una pista americana continua. Hasta las elecciones cat. Es imposible saber si ERC resistirá la presión del pack JxC. Desde un punto de vista histórico, es imposible que la resista. Pero haber trabajado para este pacto con PSOE ya es algo fuera de los anales históricos e intelectuales del procesismo. 

10- Sobre la pista americana cat. La Gene es, de tantos botines anteriores, la única que queda en pie tras la crisis. Sus sueldos pueden suponer la diferencia entre existir como proyecto político, unificado y disciplinado, o ser visualizado como una troupe de payasetes. No sé, los Hermanos Pompoff, Thedy, Supremacismy y Carlistón. Es lógico que JxC mate por su permanencia en la pomada. El futuro, en esa lucha por la vida, es incalculable. Por el momento, ya se ha iniciado la campaña por alejar a ERC de los eternos campos de caza de la catalanidad, ese corpus estrechado por el procesismo. Por otra parte, el tempo de la opción Torra se agota, sin los resultados calculados. Se esperaba que resistiera a su inhabilitación un tiempo, vía recurso, hasta que Puigde decidiera su amortización. Pero parece que todo se acelera. Torra va a desaparecer, todo apunta a ello, antes de lo deseado. Por ley, asumirá la Presidencia de la Gene Aragonès/ERC, hasta que se vote otro presi, o hasta que el presi Aragonès convoque elecciones. Es posible que Puigde acorte esa agonía, de manera que Puigde, ese presi no electo, ordene a Torra, otro presi no electo, la convocatoria de elecciones. O es posible una campaña de chantaje sentimental para que en el Parlament se vote, aceleradamente, otro presi no electo de JxC. Todo está abierto.

11- Lo que está claro es un aumento de la agresividad en Cat. Desde hace horas se comunica por TV3 un acto político –es decir, propagandístico– de Puigde en Perpinyà, sobre el 13-E. Se informa de él como si fuera el Corpus del siglo XXI. Igual es el inicio de la campaña electoral. O un punto álgido en esta campaña electoral non-stop denominada procesismo. En todo caso, es la señal de que van a por todas. Esto también va a ser a cuchillo. A dagas voladoras. Fiu-fiu-fiu.

12- Y ya puestos a hablar de cuchillos, les presento al punto 13. O La casa de las dagas voladoras.

13- Hola, soy el punto 13, y me conocerán por otras películas, como La casa de las dagas voladoras. Ya sabrán, por el punto 3, que Abogacía va y dice que la cosa Junqueras, no obstante, debe pasar por la cosa JEC. Es decir, para dar respuesta a la cosa TJUE da bola a un organismo administrativo, no jurídico, integrado por ocho bravos ocho magistrados del TS y por cinco bravos cinco pollos nombrados por partidos. Se trata de un organismo –insisto, administrativo, no judicial– sensible a la politización y a la épica constitucionalista, y al cual, en el anterior ciclo electoral, el TC –el gran ausente en los últimos tiempos; la razón: lo quemaron; judicializar la política tiene eso– tuvo que llamar al orden. Abogacía da mucha cámara a la JEC. Demasiada. Excesiva. La razón: el caso Junqueras –y el caso Torra– están ahí, por demanda del PP. Se trata de algo irracional. Se pide a un organismo –administrativo, repito, y con fuerte tendenciosidad política–, un rol, fuerza, energía y gravedad propias de un órgano jurídico. La razón: el constitucionalismo –el legado intelectual de Aznar; lo contrario, en ocasiones, a lo constitucional– corta ahí el bacalao. Sí, también lo corta en el TS, en Fiscalía y –vete a saber– en Abogacía. Pero es lo que tienen más a mano, conscientes, supongo, de que el TS no puede ir por el mundo desautorizando el derecho europeo. O no ahora. No creo que lo que decida la JEC –que, por otra parte, está cantado– afecte al pacto PSOE-ERC. Sólo afectará a la erosión del Estado en Europa, superior a la calculada por aquí el menda. Y a la elaboración de la propaganda, por parte de las derechas esp, para acometer al próximo Gobierno de coalición. Un Gobierno indepe –no será el caso– y anticonstitucionalista. Es decir, no necesariamente anticonstitucional. Tienen medios –de comunicación–, por lo que nos van a freír. 

14- En lo que es un indicio de lo que viene, MariPP, MariC’s y MariVox, las Trillizas Constitucionalistas, ya han llevado a los tribunales la filtración, este finde pasado, del informe de Abogacía. Algo, por otra parte, que no es delito. Abogacía es en principio del Ejecutivo, y hace, como con su culo, lo que quiere con él. El mundo de las filtraciones, por otra parte, es un mundo en sí, como atestiguan las filtraciones del caso CDR –sólo pudieron emitirse por Fiscalía o GC y, además, están resultado falsas–, o la propia filtración de la sentencia del juicio al procés –sólo pudo hacerlas el TS, otro órgano constitucionalista–. La medida, en todo caso, explica el actual momento de las derechas esp frente a Europa: Europa molaba cuando reía la gracia constitucionalista y daba fondos de cohesión como para chulear a Italia y a Francia y, casi, a Alemania. Pero no mola cuando opina sobre la decoración del cortijo. La sentencia del TJUE ha supuesto el despertar de una bestia –el antieuropeísmo de la derecha nacionalista esp– y el adormecimiento de otra –el antieuropeísmo de la derecha nacionalista cat–. 

15- Bueno, la cosa está así. ERC debe aprobar el pacto en breve, a través de su Consell Nacional. Vamos, pim-pam. El trámite puede ser útil para evaluar la presión que puede ejercer JxC sobre los minions ERC. Que puede ser poca o mucha. A su vez, PSOE puede, o no, llevar el pacto a su Comité Federal. Lo que supondría darle la voz a sus baronettes. Es decir, poder evaluar también la capacidad del constitucionalismo, la forma ulterior de nacionalismo esp, sobre los minions PSOE. En toco caso, PSOE y UP han anunciado, mientras escribo estas líneas, la presentación de su programa de Gobierno. Algo que indica que la cosa va que arde y posee cierta seguridad. 

16- O, lo que es lo mismo, que puede haber Gobierno para el 5-E. Lo que posibilitaría otra opción que ya había descartado. Que el 6-E, o Santa Epifanía de los Reyes Magos, esté en casa, con mi hijo, viendo cómo abre un paquete en el que él cree que hay una PS4, y en el que habrá, como máximo, un botijo. Por lo que tendré que irme a MAD por piernas. Y esquivando las dagas voladoras. Un niño sin PS4 es, por definición, otra casa de las dagas voladoras. 

17- Mañana les hablo del programa de gobierno PSOE-UP.