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Barcelona, 15 de enero de 2017

Apreciados suscriptores y suscriptoras de CTXT,

Con más deportividad que convencimiento, "los abajo firmantes" hemos asumido la tarea de coordinar, dentro de la sección Culturas de CTXT, un apartado de reflexión y de información crítica que hemos titulado, con crasa ironía, ‘El Ministerio’. En él se tratará de promover análisis, relatos, ensayos, comentarios, propuestas y debates que estimamos de interés, ensayando, en la medida de lo posible, nuevas estrategias mediante las que dilatar los cauces más bien rutinarios del periodismo cultural. No es un propósito fácil de cumplir, menos aún con los limitados recursos de que disponemos, pero nos basta con esta declaración de intenciones para poner a rodar una voluntad y una actitud que sólo prosperarán en la medida en que acierten a incorporar en su camino actitudes y voluntades cómplices.

Haciendo de la necesidad virtud, ‘El Ministerio’ cuenta con la cantera de la red, donde, si se presta la debida atención, se detectan tonos nuevos cuyo potencial reclama ser explotado. Se trata a menudo de discursos encapsulados en un restringido círculo de seguidores. Uno de los objetivos de ‘El Ministerio’ es actuar como plataforma y lanzadera de esos discursos, convenientemente cribados, para articularlos –es decir, relacionarlos– por encima de sus respectivas "comunidades" estancas. Si en lo que dure nuestra andadura conseguimos dar mayor circulación y credibilidad de la que ahora tienen a ciertas voces que a nuestro juicio merecen atención, nos daremos por muy satisfechos.

Naturalmente, contamos con la participación de firmas ya conocidas, y con el concurso de quienes vienen trabajando, desde hace mucho o poco tiempo, en el periodismo más o menos convencional. Lo que sí querríamos es resistirnos a las múltiples inercias que hacen que el periodismo digital se atenga todavía a formatos, a condicionamientos, a limitaciones heredadas de la prensa impresa. Explorar la flexibilidad, la imprevisibilidad, la conectividad, la fluidez que permite el soporte digital.

La intención de resistirse a las inercias de los formatos periodísticos convencionales es solidaria de la de resistirse a las fraseologías, géneros, circuitos, prioridades y jerarquías que condicionan comúnmente el tráfico cultural en la prensa periódica. ‘El Ministerio’ se propone prescindir de lo que se entiende por "agenda", obviará el reseñismo convencional, y se esforzará por desoír las recomendaciones de los departamentos de promoción. Practicará con celo particular la crítica de la crítica, poniendo en evidencia los clichés retóricos e ideológicos de esta última, y no descuidará la dimensión propositiva que ha de incorporar cualquier proyecto de intervención cultural. Privilegiará un concepto de cultura funcional, suspicaz ante las determinaciones de la industria y de la ideología dominante, y en la medida de lo posible descentralizado, es decir, integrador de voces y miradas procedentes también de lo que cabe entender por periferias, en un sentido no sólo geográfico.

‘El Ministerio’ brindará piezas de la más diversa índole, prescindiendo de plantillas y postulándose como campo de pruebas de nuevos modos de escribir sobre cultura. Cada mes propondrá un tema principal de reflexión que abordará semana a semana desde diversas perspectivas. Los artículos no llevarán al pie los comentarios de los lectores. Éstos deberán dirigirse a una cuenta de correo (culturas@ctxt.es), y se harán públicos en la medida en que se estimen de interés, incorporados al artículo en cuestión ya sea a modo de coda, ya en debate con el autor. Entre los proyectos de ‘El Ministerio’ se cuenta el de ensayar textos armados colectivamente a partir de una reflexión de partida que se iría ampliando y enriqueciendo con la contribución de los lectores interesados.

Pero estamos en la línea de salida, y sólo el tiempo dirá si somos capaces de progresar, con la colaboración de amigos y de desconocidos, en la dirección que tan borrosamente nos hemos trazado. Por intentarlo, nada se pierde, y algún aprendizaje sacaremos, sin duda.

Agradecidos por vuestra atención, y ojalá por vuestra compañía, os saludan muy cordialmente

Ignacio Echevarría y Gonzalo Torné

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