El documental sobre Billy el Niño por fin ha salido a la luz. El título final Billy. Torturas, impunidad, silencio explica a la perfección en pocas palabras lo que pueden encontrar quienes tengan a bien asomarse a esta historia: años de torturas narradas en primera persona por algunas de las víctimas –la mayoría aún vivas– de las atrocidades de Antonio González Pacheco (Billy el Niño), fallecido hace solo unos meses con las medallas aún puestas. Su historia la ha escrito y dirigido Max Lemcke, y ha sido coproducida por Brutos Films y por CTXT.

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CTXT hizo una llamada en enero pasado en la plataforma Goteo para intentar recaudar 55.000 euros destinados a terminar el rodaje y el montaje de este documental que, por lo que sea, las ayudas públicas no quisieron impulsar. Con la rápida e inestimable ayuda de los 1.585 mecenas que lo hicieron posible, la película se presentó hace unos días con gran éxito en el Festival de Cine de Sevilla.

Algunos medios ya se han hecho eco del documental. En El País escriben sobre “el demoledor silencio que rodeó las torturas de Billy el Niño” y califican a la película como “un documental de urgencia”; en La Voz del Sur cuentan que “Billy va más allá, y también habla sin tapujos de la violencia que continuó una vez muerto el dictador”. También en El Periódico dicen que este es “un documental sobre el cruel policía que cuestiona el relato oficial de que la Transición fue modélica”. La lista es muy larga: La Vanguardia, Infolibre o La Marea, entre otros, han hablado sobre el estreno de una historia que, a pesar del paso del tiempo, sigue estando en boca de tod@s.

Los comentarios tanto de los medios de comunicación como de las personas que han visto ya el documental (si no lo habéis hecho, podéis verlo ya en este enlace y aquí con descuento especial para suscriptores de CTXT) nos emocionan, sobre todo, porque auguran el éxito de una historia que no tendría que ser tan difícil de contar a estas alturas: la de las personas que sufrieron y sobrevivieron a un torturador infame, que fue protegido tanto por el franquismo como por la transición y la democracia posterior.

-         Muchas gracias a vosotros. Juntos conseguiremos que la verdad, la justicia y la reparación terminen imponiéndose.

-         Sois una maravilla. Gracias por apoyar la cultura, por iniciar proyectos como este y por el periodismo reposado que hacéis. Me devolvéis las ganas que a veces se me van de seguir en este mundillo.

-         Una película que bucea en los crímenes del torturador franquista Antonio González Pacheco y las razones de su inexplicable impunidad.

-         Después de ver el documental ‘Billy’, de Max Lemcke, PP y PSOE tendrían que explicar cómo pudieron avalar las cuatro medallas (1972, 1977, 1982, 2012) a un prominente torturador del "tardofranquismo", Billy el Niño.

-         Documental sobre la figura del torturador Billy el Niño, donde sus víctimas relatan sus experiencias. Te revuelve el estómago, pero lo considero realmente necesario puesto que en el instituto solo nos cuentan lo chupiguay que fue la Transición.

-         100% recomendable.

-         Gracias por coproducir el documental ‘Billy. Torturas, impunidad, silencio’ sobre el torturador Antonio González Pacheco, Billy el Niño. Gracias a todos los que lucharon contra el fascismo y siguen haciéndolo. #JusticiaYreparación

-         Momentazo para, entre otras cosas, recordar a nuestro Chato Galante.

-         Muy buen trabajo. Una pena que el asesino falleciera antes de recibir la condena pública. Una alegría el documental realizado; un pequeño homenaje a Chato Galante... “a todos los que lucharon por un país más alegre”.

El nombre de Chato Galante, tristemente fallecido poco antes que su torturador, se repite varias veces en los comentarios. Chato participó en el documental y se le ha hecho un homenaje en el mismo para agradecerle todo lo que ha hecho por la reparación de la memoria histórica ya que, tal y como cuenta Max Lemcke, “fue la persona que nos abrió las puertas a intentar comprender qué era lo que había pasado y nos puso en contacto con mucha gente”. Quedó otra entrevista pendiente con él que, por desgracia, nunca llegó a realizarse.

Junto a Chato, este documental recoge las historias de una veintena de demócratas valientes, entre ell@s Lidia Falcón, José Luis Úriz, Josefa Rodríguez “Asturias” o Francisco Rodríguez Veloso. Conocer sus vivencias es también homenajear a toda una generación cuyas luchas, como recuerda el director, “consiguieron que hoy vivamos en una democracia, aunque sea imperfecta”.

Se repite también en los comentarios la palabra ‘impunidad’ con la que se hace referencia a cómo González Pacheco destrozó vidas y se fue, no solo sin pagar por sus crímenes, sino con reconocimientos por parte de los diferentes gobiernos que han pasado por la historia de este país. Una película documental que seguramente resultará incómoda para much@s, pero que es, tal y como lo define uno de los testimonios del mismo, José Luis Úriz Iglesias, “la voz de los sin voz”. Cuenta Úriz que, en ocasiones, Billy les decía con sorna: “Cuando el franquismo pase yo seguiré aquí, porque siempre harán falta policías”. Desgraciadamente, tenía razón. Ahora solo queda sacar a la luz la verdad para que, al menos en la memoria, Billy el Niño y quienes le apoyaron no queden impunes.

La covid-19 ha dificultado el rodaje, así como su presentación y proyección en algunas salas. Por eso es necesario que recomendemos esta película en un momento en el que la nueva Ley de memoria democrática amaga con dar pasos adelante en la reparación y el reconocimiento de unos hechos que siguen siendo silenciados. Una película, que, además, ha sido financiada muy rápido por muchas personas que no están dispuestas a que la historia se quede como está y que se niegan a mirar con los brazos cruzados. Gracias a Víctor, Julia, Álvaro, Jesús… y 1.581 gracias más. El mérito es vuestro.

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