fútbol
No lo llamen sorteo
El calendario de la Liga ya no se elige por azar. La patronal y algunos clubes imponen sus intereses mediáticos, económicos y deportivos y hacen que las temporadas cada vez se parezcan más entre sí
Ricardo Uribarri 14/07/2023
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Les confieso que hasta hace unos años esperaba el día del sorteo del calendario de Liga con ilusión. Había algo mágico en que el azar definiera el camino de unos y otros equipos en los casi nueve meses de competición. Aquella emoción ha desaparecido de un tiempo para acá. La mía y la de miles y miles de aficionados que expresan ese sentimiento a través de las redes sociales. Justo desde que los dirigentes de nuestro fútbol decidieron pervertir el significado de la palabra sorteo, definida por la Real Academia de la Lengua como “someter a alguien o a algo al resultado de los medios fortuitos o casuales que se emplean para fiar a la suerte una resolución”. Lo que hacen ahora para dar a conocer el orden de los partidos de las 38 jornadas no tiene nada de fortuito ni de casual. Más bien de previsible y deliberado.
Llama la atención que la Liga y la Real Federación Española de Fútbol, que prácticamente no se ponen de acuerdo en nada, sí vayan de la mano en planificar un calendario donde se anteponen cientos de variantes e intereses al factor que debería ser el más importante en este caso: la suerte. La teoría oficial que nos venden desde los organismos futbolísticos responsables es que hay “100.000 calendarios posibles” que pueden salir elegidos a través de una aplicación. Si el sorteo fuera puro en su máxima expresión, con la fortuna como único elemento definitorio, sería imposible que ocurriera lo que está aconteciendo en las últimas temporadas. ¿Cómo puede ser que antes de celebrarse ya se pueda intuir, con muy poco margen de error, cuándo se van a jugar determinados partidos? ¿Cómo puede pasar que haya pautas que se repitan año tras año hasta el punto de generar suspicacias entre las aficiones? No hay más que repasar lo ocurrido en las pasadas campañas para descubrir determinados patrones.
Todo cambió con el sorteo de la temporada 2018-19, cuando se puso en marcha el llamado calendario “asimétrico”, que significa que los partidos de la segunda vuelta no siguen el mismo orden en las jornadas que los de la primera. Si bien es cierto que algunos años antes ya se colocaron ciertos partidos puntuales en fechas determinadas, es a partir de entonces cuando el calendario pasa a estar teledirigido para que se cumplan siempre ciertas premisas. ¿El objetivo? Buscar el interés mediático, conseguir un mayor beneficio económico y favorecer los intereses de ciertos equipos.
Todo cambió con el sorteo de la temporada 2018-19, cuando se puso en marcha el llamado calendario “asimétrico”
Veamos lo que pasa con el llamado “clásico”, el duelo entre el Real Madrid y el Barcelona. Justo desde esa campaña, la 18-19, el partido de la primera vuelta siempre se disputa en las mismas fechas, alrededor de la jornada 10: 28 de octubre en la 18-19, 26 de octubre en la 19-20, 24 de octubre en la 20-21, 24 de octubre en la 21-22, 16 de octubre en la 22-23 y 29 de octubre en la próxima, la 23-24. Los de la segunda vuelta se han celebrado habitualmente en marzo, aunque para la próxima edición lo han retrasado hasta el 21 de abril. Y un dato curioso: por alguna razón, en la Liga prefieren que se juegue en Barcelona el partido de la primera vuelta. En 13 de las 17 últimas temporadas pasó así. Todo muy aleatorio, como ven.
Vayamos ahora con los derbis, los duelos de una misma ciudad. El Atleti-Real Madrid, por ejemplo. Echando la vista atrás observamos que los partidos de la primera vuelta de las temporadas 20-21 y 21-22 se jugaron el mismo día, 12 de diciembre, en campo merengue. No les debió de convencer mucho la experiencia a los responsables de la Liga y ahora lo han adelantado. La pasada campaña se disputó en la jornada 6. ¿Cuándo se disputará en la próxima? En la jornada 6. ¿Qué ocurre en la segunda vuelta? La temporada anterior tuvo lugar en la jornada 23. ¿Y en la que viene? En la jornada 23.
Otro derbi importante de la Liga, el sevillano. Con la que viene, Betis y Sevilla van a llevar tres temporadas midiéndose en la primera vuelta en la misma jornada, la 13, entre el 6 y 12 de noviembre. Lo mismo ocurre con el duelo vasco. Athletic y Real Sociedad se enfrentaron el año pasado el 14 de enero. ¿Cuándo se verán esta próxima temporada? Sí, el 14 de enero. ¿De verdad que a esto se le puede llamar sorteo?
Con la que viene, Betis y Sevilla van a llevar tres temporadas midiéndose en la misma jornada, la 13, entre el 6 y 12 de noviembre
Les damos más ejemplos. Por alguna razón, que suponemos que será que les consideran rivales directos por las plazas de Champions y quieren dar más emoción a ese emparejamiento, al Atleti y a la Real Sociedad les está tocando medirse en los últimos años en las jornadas finales. Vean: jornada 38 en la 19-20, jornada 36 en la 20-21, jornada 38 en la 21-22, jornada 37 en la 22-23 y jornada 38 en la 23-24. Cinco temporadas seguidas. Pero no son los únicos. El Real Madrid ya sabe a qué dos rivales tiene más posibilidades de enfrentarse en la última o penúltima jornada. En seis de las siete últimas ligas le ha tocado el Betis o el Villarreal como contrincante en esas fechas.
Hay más cosas además de lo ya expuesto. A algunos equipos se les facilita un calendario más benévolo en ciertas fechas en aras de beneficiarles en su andadura europea. No en cuanto a los rivales, pero sí en evitar desplazamientos por España en momentos puntuales coincidentes con compromisos de Champions con el fin de ganar en descanso. Principalmente en el caso del Real Madrid, que en tres de las cuatro últimas ligas, incluyendo la próxima, no se ha tenido que mover de la capital coincidiendo con partidos de la eliminatoria de octavos de final de la máxima competición continental. En la 22-23 no se dio esa circunstancia al tener que jugar el Mundial de Clubes en febrero.
A algunos equipos se les facilita un calendario más benévolo en ciertas fechas en aras de beneficiarles en su andadura europea
Así, en la 20-21, entre el partido de ida con el Atalanta y el de vuelta, jugado 20 días después, el equipo merengue no se movió de su ciudad, disputando en ella tres partidos de Liga, dos en el Bernabéu y otro en el derbi con el Atlético en el Metropolitano. En la 21-22, jugó otros tres seguidos en Madrid antes de afrontar la vuelta de octavos. Y en la próxima, la 23-24, encadenará hasta cuatro partidos en la capital durante todo el mes de febrero, ante Atleti, Girona y Sevilla en casa, y Rayo fuera, mientras se celebra la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones. Y no solo eso. Tras jugar fuera las tres primeras jornadas por petición propia para avanzar en las obras del Bernabéu, tampoco saldrá de la ciudad en todo el próximo mes de septiembre, jugando tres encuentros como local y el derbi en el campo del Atleti, en unas semanas coincidentes con el inicio del torneo europeo.
También el Barcelona ha tenido algún año un calendario más propicio en Liga en momentos de coincidencia con otras competiciones, aunque no de forma tan repetida. En la 19-20 jugó dos partidos seguidos en el Camp Nou antes de afrontar el choque de ida de los octavos de final. Y el Atlético no salió de Madrid en el mes de marzo de la temporada 20-21, coincidiendo con su eliminatoria de octavos de final de Champions ante el Chelsea. Pero a muchos seguidores azulgranas y colchoneros, como de otros equipos que han jugado también la Champions en pasadas ediciones, entre ellos el Sevilla o el Villarreal, les queda la sensación de que en este aspecto no reciben el mismo trato. Las comparaciones, los agravios y las sospechas de beneficiar a unos por encima de otros son algunas de las consecuencias que tiene el dirigir de manera artificial un sorteo.
Es cierto que otras ligas europeas de fútbol ya utilizan esta fórmula de calendarios asimétricos o condicionados por diversos factores desde hace años. En ese aspecto no hacemos nada distinto. La rentabilidad económica que buscan los organizadores de las competiciones ha terminado por imponerse a cualquier debate. Les da igual que cada vez haya más aficionados desencantados con algunas cosas del fútbol moderno y, lo que es peor, desenganchados. Pero ya que copiamos lo que hacen fuera, no estaría mal que copien todo. Por lo menos para no tomar por tontos a los hinchas. En Inglaterra y en otros países al menos tienen la decencia de no llamar sorteo a lo que hacen. Dan el calendario directamente elaborado y se acabó. Que tomen nota.
Les confieso que hasta hace unos años esperaba el día del sorteo del calendario de Liga con ilusión. Había algo mágico en que el azar definiera el camino de unos y otros equipos en los casi nueve meses de competición. Aquella emoción ha desaparecido de un tiempo para acá. La mía y la de miles y miles de...
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Ricardo Uribarri
Periodista. Empezó a cubrir la información del Atleti hace más de 20 años y ha pasado por medios como Claro, Radio 16, Época, Vía Digital, Marca y Bez. Actualmente colabora con XL Semanal y se quita el mono de micrófono en Onda Madrid.
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