sostenibilidad
Los servicios de alquiler de vehículos por minutos, una alternativa para aliviar el tráfico
A falta de un mejor transporte público, los coches compartidos han resultado ser una estrategia eficaz en el ámbito de la movilidad urbana
CTXT / Observatorio Social ‘la Caixa’ 30/11/2023
![<p>Una imagen de Madrid en enero de 2018. / <strong>Wikipedia</strong></p>](/images/cache/800x540/nocrop/images%7Ccms-image-000033672.jpg)
Una imagen de Madrid en enero de 2018. / Wikipedia
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El tráfico rodado se relaciona con varios tipos de externalidades negativas, como los accidentes de circulación, la congestión viaria y la contaminación local que provoca un aumento de la mortalidad. Además, en las ciudades, los automóviles particulares suelen permanecer estacionados el 96% del tiempo, lo que se traduce en un uso ineficiente del suelo. Por si eso no bastara, esta ineficiencia se ve agravada por el aumento de desplazamientos al trabajo en vehículos con un único ocupante.
En muchas ciudades españolas se están implementando diversas políticas con la intención de mitigar estas consecuencias, como la aplicación de tasas por congestión, la concesión de subvenciones y ayudas para la compra de automóviles eléctricos, y la creación de zonas de bajas emisiones. Para mejorar la eficacia de estas políticas, es preciso conocer con más detalle sus efectos en dos frentes: a) los beneficios y costes de las distintas opciones en materia de políticas, y b) sus consecuencias distributivas (es decir, si los beneficios/costes recaen en los individuos con las rentas más bajas o con las más altas).
Un reciente estudio de la Universidad Carlos III de Madrid analiza las características de los usuarios y las pautas de utilización de un servicio relativamente nuevo: el alquiler de coches compartidos sin estacionamiento fijo o FFCS por sus siglas en inglés. Los avances en las tecnologías de la comunicación y de seguimiento y localización, así como la adopción generalizada de smartphones, han propiciado la creación de empresas que ofrecen un servicio de alquiler de automóviles por minutos, con la ventaja añadida de que los usuarios pueden recogerlos y dejarlos en cualquier punto dentro de una zona determinada, dado que el estacionamiento de estos vehículos no está sujeto a una ubicación fija. Además, este servicio suele prestarse con automóviles eléctricos, lo que contribuye a reducir las emisiones urbanas.
El servicio de coche compartido sin estacionamiento fijo puede incidir positivamente en la congestión del tráfico y las externalidades ambientales. Ahora bien, según el modo de transporte al que sustituya, los efectos generados por este tipo de movilidad compartida también pueden ser negativos.
Por un lado, si el FFCS es capaz de aumentar el número de propietarios de automóviles que deciden venderlos o renunciar a ellos –y, por consiguiente, se produce una reducción en el número de automóviles particulares–, o logra que se efectúen menos viajes en vehículos contaminantes, esta modalidad de coche compartido puede contribuir a aliviar la congestión urbana.
Por otro lado, si este tipo de movilidad compartida se emplea como sustituto del transporte público o de los desplazamientos a pie o en bicicleta, es posible que se obtenga el efecto contrario: un aumento de la congestión.
Para determinar si el FFCS tiene unos efectos positivos o negativos en la congestión del tráfico y las externalidades ambientales, es preciso observar y analizar cómo evoluciona esta práctica y, en concreto, cuáles son sus pautas de uso y a qué modo de transporte sustituye.
Para llevar a cabo esta investigación, se empleó una base de datos de código cerrado y carácter exclusivo que contiene el universo de los desplazamientos realizados en Madrid, durante el año 2019, a través de una de las principales empresas que ofrecen este servicio en la capital de España. Esta información se combinó con datos a escala de barrio relativos a la población, la renta, los automóviles particulares y la red de transporte público con el fin de correlacionar las pautas de uso de este servicio con las características sociodemográficas.
Se constató que la modalidad estudiada de coche compartido atenuó el tráfico rodado y contribuyó a reducir la congestión general. La utilización del servicio de FFCS fue mayor durante los días laborables, en especial los viernes. No obstante, los clientes más habituales tendían a utilizarlo en mayor medida durante el fin de semana, con propósitos de ocio, y en menor medida para desplazarse al trabajo. Es importante señalar que los usuarios más habituales residían en barrios con menos opciones de transporte público, cuya escasez es aún más pronunciada durante los fines de semana. Con independencia de que estos usuarios puedan o estén dispuestos a pagar un servicio de este tipo para sus desplazamientos habituales, esta es una opción válida a falta de alternativas de transporte público.
Se debe tener en cuenta, sin embargo, que el servicio de coche de alquiler por minutos solo está disponible en barrios de renta alta y media, lo que significa que quienes residen en barrios de renta baja no pueden utilizarlo con tanta frecuencia. Los clientes que utilizaban el servicio de FFCS con más frecuencia, residían en barrios de renta media, que se caracterizan por unas tasas de motorización elevadas y menos opciones de transporte público.
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CTXT / Observatorio Social ‘la Caixa’
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