127.100 españoles se han hecho millonarios durante la crisis
El número de “nuevos superricos” se duplica en ocho años en nuestro país mientras que la desigualdad también se dobla
Carlos H. de Frutos 10/09/2017
En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
Espacio realizado con la colaboración del |
Cada vez son más los millonarios en España. El volumen de población considerada HNWI (High-net-work individual), es decir, aquellas personas cuyos activos invertibles exceden una cierta cantidad --habitualmente cifrada en 1 millón de dólares americanos-- alcanzó en nuestro país a principios de 2016 193.000 personas, tras experimentar un crecimiento del 8,4% con respecto al año anterior. Estos datos del Informe Mundial de la Riqueza 2016 que elabora Capgemini suponen un aumento anual de población HNWI que ronda los 15.000 individuos, situándonos como el país europeo que más crece en este sentido, seguido de Países Bajos (7,9%), Francia (5,9%) y Alemania (5,6%). De esta forma, España se coloca a la cabeza europea en el cuanto al aumento de la concentración de capital, un aumento que se sitúa en torno al 50% desde el inicio de la crisis en 2008, hasta alcanzar 127.100 nuevos millonarios desde el comienzo de este período.
Como es evidente, paralelamente a este incremento de la concentración de la riqueza durante un período de recesión económica, España ha experimentado a lo largo de estos años un extraordinario aumento de los niveles de desigualdad. Según el último Barómetro Social de España, elaborado por el Colectivo Ioé a partir de los datos publicados por el Banco de España, la desigualdad económica en nuestro país se ha incrementado a un ritmo similar al del número de millonarios, ya que se ha visto duplicada a lo largo de los últimos 12 años. Otra de las conclusiones más relevantes que muestra este estudio tiene que ver con la desigual distribución de renta y riqueza, destacando esta última como principal factor de desigualdad en España. Así, el 25% de los hogares más ricos concentra un 74% de la riqueza y un 42% de la renta anual, mientras que el 25% más pobre –cuyo patrimonio medio es negativo- obtiene el 16% de la renta del conjunto de los hogares. Estos datos dibujan un escenario que muestra cómo durante los años más duros de la crisis España ha alcanzado los mayores índices de polarización de la riqueza, generando una situación que aboca a la insolvencia a una cuarta parte de la población mientras se acrecienta el patrimonio de los más ricos.
la desigualdad económica en nuestro país se ha incrementado a un ritmo similar al del número de millonarios, ya que se ha visto duplicada a lo largo de los últimos 12 años
A nivel global la situación no resulta ser muy diferente a la de nuestro país. Durante el año 2015 la población HNWI a nivel mundial creció un 4,9% hasta alcanzar los 15,4 millones de individuos, rozando un volumen total de 59 billones de dólares en manos de este sector poblacional. Estos datos reflejan la culminación de un proceso de crecimiento global de la riqueza de los grandes patrimonios que en los últimos 20 años se han multiplicado por cuatro, y que se prevé que alcancen los 100 billones en 2025. De nuevo conviene situar estos datos en el contexto adecuado. El último informe sobre desigualdad presentado por la organización Oxfam Intermón con el título Una economía para el 99% refleja datos estremecedores en este sentido. Desde el año 2015, el 1% más rico de la población mundial posee más riqueza que el resto del planeta, y tan sólo 8 personas (8 hombres realmente) de ese 1% tienen ya el mismo patrimonio que la mitad más pobre del planeta (3.600 millones de personas). Y la desigualdad sigue en aumento, ya que entre los años 1988 y 2011 los ingresos del 10% más rico crecieron 182 veces más que el de 10% más pobre, que lo hizo en apenas 3 dólares al año.
En cuanto a la distribución geográfica de este crecimiento de la población rica, encontramos asimetrías muy relevantes a la hora de tratar de comprender qué variantes geopolíticas intervienen en este proceso. A lo largo de los últimos 10 años, el área Asia-Pacífico ha doblado sus índices de riqueza HNWI, con un aumento en 2015 de un 10% ampliamente superior al registrado en Norteamérica durante dicho año (2%), así como a la media mundial (4%). En caso de que la tendencia iniciada a lo largo de la última década se mantuviera durante los próximos diez años, la región llegaría a representar dos quintos de la riqueza mundial de las grandes fortunas –por encima del volumen que representa Europa, Latinoamérica, Oriente Medio y África juntos--. En cuanto al porcentaje de población HNWI, Asia-Pacífico también experimentó un ascenso notable durante el período de referencia del estudio (2015), con un incremento del 9% que contrasta con el 5% de Europa, el 2% de Norteamérica, o las cifras negativas de Latinoamérica (-8%), penalizada por el bajo rendimiento de Brasil. De esta forma, el mercado de Asia-Pacífico se sitúa por primera vez por delante de Norteamérica tanto en volumen de riqueza HNWI como en individuos en los que se concentra --5,1 millones frente a 4,8 en este último apartado--. Un fenómeno que se da incluso a pesar de que la concentración de la riqueza sigue creciendo en el gran motor económico de Norteamérica, Estados Unidos, con un aumento de los ingresos del 300% en el 1% más rico y una congelación de los recursos del 50% más pobre durante los últimos 30 años. Por lo que hemos de buscar el factor diferencial de este cambio de tornas en el papel de Japón y China, principales resortes del crecimiento económico del área Asia-Pacífico, que aglutinaron cerca del 60% del crecimiento de la población HNWI a nivel mundial durante 2015.
-----------------
Espacio de información realizado con la colaboración del Observatorio Social de “la Caixa”.