Las mujeres de la UE ganan un 16% menos que los hombres
La brecha de género también se reproduce en indicadores como el ratio de empleo, la tasa de paro, la conciliación familiar o el salario en función del nivel educativo, con peores valores para ellas en todos los casos
Carlos H. de Frutos 27/10/2017
En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
Espacio realizado con la colaboración del |
Las diferencias entre hombres y mujeres a nivel social y económico siguen siendo notables dentro de la Unión Europea. Esta desigualdad en función del género se manifiesta en casi todos los aspectos de la vida de la población: en el mercado laboral, en la educación, en sus hábitos de consumo, ocio o nutrición. Todos presentan relevantes variaciones -y también similitudes- en función de si los protagonistas son hombres o mujeres, según recoge el estudio La vida de los hombres y mujeres en Europa, un retrato estadístico llevado a cabo por Eurostat en colaboración con los diferentes Institutos Nacionales de Estadística de la región.
Entre los aspectos que analiza el estudio, la brecha de género en el mercado laboral –percibida en variables como el salario medio– es de los más significativas. Según datos de 2015 sobre el salario medio bruto por hora de mujeres y hombres dentro de la UE, las primeras ganaron un 16,3% menos que ellos. Una brecha salarial que se reproduce en todos los países de la Unión, y que sin embargo presenta diferencias entre los estados de la región. Así, países como Estonia (26,9%), Alemania (22%), Austria (21,7%) y Reino Unido (20,8%) presentan niveles de desigualdad notablemente superiores a la media. Otros como Luxemburgo e Italia (ambos con un 5,5 %), Rumanía (5,8%), Bélgica (6,5%) o Polonia (7,7%) ofrecen datos que muestran diferencias más reducidas en este aspecto.
las retribuciones para las mismas ocupaciones siguen siendo de media menores para las mujeres en todos los sectores. Las mayores diferencias en este sentido se dan en los puestos directivos, aquellos con los salarios más elevados
Eurostat también analiza diferentes aspectos concretos de esta brecha de género laboral, relacionados con las características individuales de los ocupados (experiencia y educación), el sector al que pertenecen y los niveles de ocupación según sexos. El estudio señala, por ejemplo, que los sectores con mayores ganancias de media suelen estar ocupados por varones de forma mayoritaria. Además, las retribuciones para las mismas ocupaciones siguen siendo de media menores para las mujeres en todos los sectores. Llama la atención que las mayores diferencias en este sentido se den en los puestos directivos, y por tanto con salarios más elevados –un 23% de media más bajos para las mujeres, frente a un 8% de diferencia en el caso de ocupaciones de menor remuneración–.
Los datos relacionados con el empleo también presentan desigualdades de género significativas. La participación en el mercado laboral, por ejemplo, arroja una brecha de 11 puntos, con una media comunitaria del 72% para hombres frente al 61% de las mujeres durante el pasado año. La tasa de paro, por su parte, también es más alta para ellas, aunque con valores más cercanos: 8,7% para las mujeres y 8,4% en el caso de los hombres según los datos recogidos por Eurostat.
Existen otros factores circunstanciales que intervienen en la composición de los ratios de empleo. De esta forma, a medida que aumenta el número de hijos, las diferencias en la tasa de empleo entre hombres y mujeres también se incrementan significativamente. Una correspondencia que se hace particularmente explícita en el caso de aquellas personas con tres o más hijos, para las cuales la tasa de empleo se reduce hasta el 55% entre las mujeres, mientras que la de los hombres se mantiene en un 84%. Los datos sobre el empleo a tiempo parcial suponen también un claro indicador de desigualdad de género en términos de conciliación laboral y familiar. Durante el año 2016, el 32% de las mujeres de la UE ocupadas lo estuvieron a tiempo parcial, en comparación con el 9% de los hombres.
Un panorama que se completa con el papel evidentemente secundario de las mujeres en los puestos de dirección de las empresas. Tan solo un 33% de los puestos directivos de la UE durante el año pasado estaban ocupados por mujeres. Un porcentaje que, a pesar de las variaciones según países, en ninguno de los Estados miembro alcanzaba el 50%
Estas situaciones de desigualdad en función del género llaman aún más la atención si se analizan paralelamente con los datos de formación de hombres y mujeres dentro de la UE. A pesar de que en los niveles educativos inferiores apenas se perciben diferencias, en los más altos se observan notables variaciones dependiendo del sexo. En el caso de la educación superior, el 33% de las mujeres europeas han alcanzado este nivel de formación de media, en comparación con el 29% de los hombres. Una tendencia que se mantiene en prácticamente todos los países de la Unión, con las diferencias más notables en los países bálticos, así como en Finlandia, Suecia y Eslovenia.
En España, el porcentaje de hombres y mujeres con educación superior se encuentra bastante por encima de la media comunitaria, pero que también arroja datos en los que las mujeres tienen y mayor nivel educativo: un 38,4% de ellas tiene educción superior, frente al 33% de los hombres.
-----------------
Espacio de información realizado con la colaboración del Observatorio Social de “la Caixa”.