Solo una de cada cuatro personas con discapacidad tiene empleo
El mercado laboral español no incluye de forma proporcional a un colectivo vulnerable con altas tasas de inactividad
Arturo Tena 1/05/2018
En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
Espacio realizado con la colaboración del |
Las personas con discapacidad en España tienen grandes dificultades para acceder al mercado laboral. Esto El último Informe Olivenza, elaborado por el Observatorio Estatal de la Discapacidad (OED), sobre la situación de la discapacidad estatal revela las enormes diferencias entre las tasas de empleo de estas personas y el resto de ciudadanos: solo una de cada cuatro tiene un empleo (el 76,6% están desocupadas frente al 40% general), y dos de cada tres están inactivos laboralmente si se tiene en consideración la tasa de actividad (33,9%, un porcentaje más de dos veces menor que el del conjunto total, 78,1%). En cuanto al índice de paro, el dato es de un 31%.
España se coloca ligeramente mejor que la media europea tanto en tasa de empleo (22,7%) como en la de actividad (32,4%) de personas discapacitadas, según Eurostat. Los 27 países de la Unión Europea, sin embargo, presentan un desempleo un punto más bajo (30,1%).
Uno de las aspectos más graves que recoge el informe tiene que ver con los jóvenes con discapacidad; un 63,5 % de los mismos están en el paro. El estudio señala las dificultades que tienen las capas más jóvenes, que representan el 4,8% de la fuerza de trabajo española, a la hora de encontrar un oficio. El estudio recalca el decisivo valor de la educación como instrumento para contrarrestar esta desigualdad laboral. De esta forma, a más nivel de formación, mejores datos de inserción laboral demuestra un colectivo poco integrado en los escalones educativos más altos (solo el 15,1% de las personas con discapacidad dispone de estudios superiores). Los ciudadanos con diversidad funcional que tienen estudios post-secundarios presentan una tasa de paro del 17,3%, 13,7 puntos menos que la media (31%). Y los números en actividad y empleo también son muy inferiores: 18,9% en la tasa de actividad –frente al 52,8% del total de la población– y 20,2% en la de empleo –frente al 43,6% de la media general–.
En términos de calidad del empleo, el OED sostiene que “la precariedad se hace manifiesta” cuando se analiza el tipo de contratación: los contratos temporales significan el 90% del total. Los contratos indefinidos, por su parte, han disminuido, pasando del 13,9% en 2009 al 9% actual. Si bien el número de contratos ha aumentado de forma exponencial en los últimos años (de 151.401 en 2010 a 268.160, según datos de SEPE), también lo ha hecho de forma similar el índice de rotación. Es decir, no es que se esté contratando a más personas con discapacidad, sino que las mismas personas son contratadas en varias ocasiones.
Por último, en lo relativo a la situación de las mujeres con discapacidades en el mundo del trabajo el estudio del OED subraya la doble discriminación que supone ser mujer y tener una discapacidad: ellas cobran 3.057,3 euros menos que los hombres al año. Además, la contratación de mujeres representó únicamente el 38,9% del total de empleo creado para estas personas en 2016.
-------------------------
Espacio de información realizado con la colaboración del Observatorio Social de “la Caixa”.