TECETIPOS
La extrema derecha, el musical
Mientras el presidente explicaba cómo enfrentaremos la crisis energética, los 52 diputados ultras interrumpieron el pleno accediendo tres minutos tarde para así empatar la afrenta sufrida por el rey en el desfile
Gerardo Tecé 13/10/2022
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Mientras en Italia el neofascismo ha logrado el éxito rotundo de dirigir el gobierno del país, en España tenemos a Vox. Hay que saber valorar y agradecer lo que tenemos porque el nivel de inoperancia de nuestros fascistas es un lujo tal y como está el patio. Quienes llegaron hace cuatro años a las instituciones montados a caballo y dispuestos a salvarnos –oootra vez– de las garras del comunismo, de los inmigrantes que querían robarnos el trabajo, los homosexuales empeñados en amariconar a nuestros hijos y las feministas que nos querían blandengues y cargando bolsas del supermercado como bien definió aquel faro llamado El Fary, han ido reconvirtiendo el negocio ultraderechista de sillones y sueldos en un show de lo más entretenido e inocuo. De lo menos político. Ya lo dijo Franco: no se metan. Con la única perspectiva de éxito futuro de ser posible comparsa de lo que llamaban derechita cobarde –algún ministerio sin funciones a lo Castilla y León le serviría a Abascal–, en Vox lo han apostado todo a la fórmula del entretenimiento como vía única para mantenerse en el recuerdo de esos votantes que, según todas las encuestas, los están abandonando. Estos últimos días han derrochado un despliegue de medios maravillosos para ello.
Si el pasado fin de semana nos hicieron disfrutar del espectáculo de variedades consistente en trajes de torero, caballeros medievales, princesas, doncellas y los OBK Fachas –Gabriel RufiánTM muy a mi pesar– cantando que vamos a volver al 36, con un nivel artístico que recordaba que cultura y ultraderechismo casan fatal, estos días de desfiles militares y conmemoración del 12 de octubre no podían ser menos. De punta en blanco, y aplaudidos por los transversales asistentes al desfile militar, Santiago Abascal e Iván Espinosa de los Monteros y De Simón, hijo del marqués de Valtierra y español de a pie como usted y como yo, llegaron al palco de autoridades dispuestos a disfrutar del desfile militar a su manera. Es decir, aplaudiendo más que nadie, gritando los vivas mejor que nadie, porque ¿qué es ser un buen patriota si no eso? Se vivieron momentos en los que Abascal aplaudió tanto, con tal solemnidad, que hubo quien pensó que al patriotismo que se le supone se le sumaba también cierta nostalgia de sus tiempos en la mili –perdón–. Satisfecho por su actuación en el palco, Abascal se permitió el lujo de relajarse y mostrarse entusiasmado en el intercambio de palabras de quien aspira a ser su jefe, Nuñez Feijóo, con quien se fotografió en española actitud festiva y a carcajada limpia. Si uno es español de bien, puede permitirse ciertas licencias y actitudes que en ese mismo palco serían severamente denunciadas de haberse dado en los enemigos de la patria.
Hablando de enemigos de la patria, la noticia del desfile, de la semana, del mes tal vez, fue que el presidente del Gobierno Pedro Sánchez hizo esperar a su Majestad Felipe VI durante al menos 50 segundos. Hecho impresentable el de que un líder elegido por el pueblo haga esperar a un líder elegido por el peroné de Franco que ha desatado no sólo la indignación del partido de ultraderecha, sino la creatividad artística para una nueva performance de Vox. Mientras el presidente del Gobierno explicaba cómo enfrentaremos la crisis energética que se nos viene encima –minucias–, los 52 diputados de Vox interrumpieron heroicamente el pleno accediendo tres minutos tarde para así empatar la afrenta sufrida por el rey en el desfile. Demostrando así orgullo nacional. Demostrando así que la España Viva está más viva que nunca. Dejando claro que nadie debe darlos por muertos porque saben lo que quieren y lucharán por conseguirlo: un musical en la Gran Vía.
Mientras en Italia el neofascismo ha logrado el éxito rotundo de dirigir el gobierno del país, en España tenemos a Vox. Hay que saber valorar y agradecer lo que tenemos porque el nivel de inoperancia de nuestros fascistas es un lujo tal y como está el patio. Quienes llegaron hace cuatro años a las instituciones...
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Gerardo Tecé
Soy Gerardo Tecé. Modelo y actriz. Escribo cosas en sitios desde que tengo uso de Internet. Ahora en CTXT, observando eso que llaman actualidad e intentando dibujarle un contexto. Es autor de 'España, óleo sobre lienzo'(Escritos Contextatarios).
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