1. Número 1 · Enero 2015

  2. Número 2 · Enero 2015

  3. Número 3 · Enero 2015

  4. Número 4 · Febrero 2015

  5. Número 5 · Febrero 2015

  6. Número 6 · Febrero 2015

  7. Número 7 · Febrero 2015

  8. Número 8 · Marzo 2015

  9. Número 9 · Marzo 2015

  10. Número 10 · Marzo 2015

  11. Número 11 · Marzo 2015

  12. Número 12 · Abril 2015

  13. Número 13 · Abril 2015

  14. Número 14 · Abril 2015

  15. Número 15 · Abril 2015

  16. Número 16 · Mayo 2015

  17. Número 17 · Mayo 2015

  18. Número 18 · Mayo 2015

  19. Número 19 · Mayo 2015

  20. Número 20 · Junio 2015

  21. Número 21 · Junio 2015

  22. Número 22 · Junio 2015

  23. Número 23 · Junio 2015

  24. Número 24 · Julio 2015

  25. Número 25 · Julio 2015

  26. Número 26 · Julio 2015

  27. Número 27 · Julio 2015

  28. Número 28 · Septiembre 2015

  29. Número 29 · Septiembre 2015

  30. Número 30 · Septiembre 2015

  31. Número 31 · Septiembre 2015

  32. Número 32 · Septiembre 2015

  33. Número 33 · Octubre 2015

  34. Número 34 · Octubre 2015

  35. Número 35 · Octubre 2015

  36. Número 36 · Octubre 2015

  37. Número 37 · Noviembre 2015

  38. Número 38 · Noviembre 2015

  39. Número 39 · Noviembre 2015

  40. Número 40 · Noviembre 2015

  41. Número 41 · Diciembre 2015

  42. Número 42 · Diciembre 2015

  43. Número 43 · Diciembre 2015

  44. Número 44 · Diciembre 2015

  45. Número 45 · Diciembre 2015

  46. Número 46 · Enero 2016

  47. Número 47 · Enero 2016

  48. Número 48 · Enero 2016

  49. Número 49 · Enero 2016

  50. Número 50 · Febrero 2016

  51. Número 51 · Febrero 2016

  52. Número 52 · Febrero 2016

  53. Número 53 · Febrero 2016

  54. Número 54 · Marzo 2016

  55. Número 55 · Marzo 2016

  56. Número 56 · Marzo 2016

  57. Número 57 · Marzo 2016

  58. Número 58 · Marzo 2016

  59. Número 59 · Abril 2016

  60. Número 60 · Abril 2016

  61. Número 61 · Abril 2016

  62. Número 62 · Abril 2016

  63. Número 63 · Mayo 2016

  64. Número 64 · Mayo 2016

  65. Número 65 · Mayo 2016

  66. Número 66 · Mayo 2016

  67. Número 67 · Junio 2016

  68. Número 68 · Junio 2016

  69. Número 69 · Junio 2016

  70. Número 70 · Junio 2016

  71. Número 71 · Junio 2016

  72. Número 72 · Julio 2016

  73. Número 73 · Julio 2016

  74. Número 74 · Julio 2016

  75. Número 75 · Julio 2016

  76. Número 76 · Agosto 2016

  77. Número 77 · Agosto 2016

  78. Número 78 · Agosto 2016

  79. Número 79 · Agosto 2016

  80. Número 80 · Agosto 2016

  81. Número 81 · Septiembre 2016

  82. Número 82 · Septiembre 2016

  83. Número 83 · Septiembre 2016

  84. Número 84 · Septiembre 2016

  85. Número 85 · Octubre 2016

  86. Número 86 · Octubre 2016

  87. Número 87 · Octubre 2016

  88. Número 88 · Octubre 2016

  89. Número 89 · Noviembre 2016

  90. Número 90 · Noviembre 2016

  91. Número 91 · Noviembre 2016

  92. Número 92 · Noviembre 2016

  93. Número 93 · Noviembre 2016

  94. Número 94 · Diciembre 2016

  95. Número 95 · Diciembre 2016

  96. Número 96 · Diciembre 2016

  97. Número 97 · Diciembre 2016

  98. Número 98 · Enero 2017

  99. Número 99 · Enero 2017

  100. Número 100 · Enero 2017

  101. Número 101 · Enero 2017

  102. Número 102 · Febrero 2017

  103. Número 103 · Febrero 2017

  104. Número 104 · Febrero 2017

  105. Número 105 · Febrero 2017

  106. Número 106 · Marzo 2017

  107. Número 107 · Marzo 2017

  108. Número 108 · Marzo 2017

  109. Número 109 · Marzo 2017

  110. Número 110 · Marzo 2017

  111. Número 111 · Abril 2017

  112. Número 112 · Abril 2017

  113. Número 113 · Abril 2017

  114. Número 114 · Abril 2017

  115. Número 115 · Mayo 2017

  116. Número 116 · Mayo 2017

  117. Número 117 · Mayo 2017

  118. Número 118 · Mayo 2017

  119. Número 119 · Mayo 2017

  120. Número 120 · Junio 2017

  121. Número 121 · Junio 2017

  122. Número 122 · Junio 2017

  123. Número 123 · Junio 2017

  124. Número 124 · Julio 2017

  125. Número 125 · Julio 2017

  126. Número 126 · Julio 2017

  127. Número 127 · Julio 2017

  128. Número 128 · Agosto 2017

  129. Número 129 · Agosto 2017

  130. Número 130 · Agosto 2017

  131. Número 131 · Agosto 2017

  132. Número 132 · Agosto 2017

  133. Número 133 · Septiembre 2017

  134. Número 134 · Septiembre 2017

  135. Número 135 · Septiembre 2017

  136. Número 136 · Septiembre 2017

  137. Número 137 · Octubre 2017

  138. Número 138 · Octubre 2017

  139. Número 139 · Octubre 2017

  140. Número 140 · Octubre 2017

  141. Número 141 · Noviembre 2017

  142. Número 142 · Noviembre 2017

  143. Número 143 · Noviembre 2017

  144. Número 144 · Noviembre 2017

  145. Número 145 · Noviembre 2017

  146. Número 146 · Diciembre 2017

  147. Número 147 · Diciembre 2017

  148. Número 148 · Diciembre 2017

  149. Número 149 · Diciembre 2017

  150. Número 150 · Enero 2018

  151. Número 151 · Enero 2018

  152. Número 152 · Enero 2018

  153. Número 153 · Enero 2018

  154. Número 154 · Enero 2018

  155. Número 155 · Febrero 2018

  156. Número 156 · Febrero 2018

  157. Número 157 · Febrero 2018

  158. Número 158 · Febrero 2018

  159. Número 159 · Marzo 2018

  160. Número 160 · Marzo 2018

  161. Número 161 · Marzo 2018

  162. Número 162 · Marzo 2018

  163. Número 163 · Abril 2018

  164. Número 164 · Abril 2018

  165. Número 165 · Abril 2018

  166. Número 166 · Abril 2018

  167. Número 167 · Mayo 2018

  168. Número 168 · Mayo 2018

  169. Número 169 · Mayo 2018

  170. Número 170 · Mayo 2018

  171. Número 171 · Mayo 2018

  172. Número 172 · Junio 2018

  173. Número 173 · Junio 2018

  174. Número 174 · Junio 2018

  175. Número 175 · Junio 2018

  176. Número 176 · Julio 2018

  177. Número 177 · Julio 2018

  178. Número 178 · Julio 2018

  179. Número 179 · Julio 2018

  180. Número 180 · Agosto 2018

  181. Número 181 · Agosto 2018

  182. Número 182 · Agosto 2018

  183. Número 183 · Agosto 2018

  184. Número 184 · Agosto 2018

  185. Número 185 · Septiembre 2018

  186. Número 186 · Septiembre 2018

  187. Número 187 · Septiembre 2018

  188. Número 188 · Septiembre 2018

  189. Número 189 · Octubre 2018

  190. Número 190 · Octubre 2018

  191. Número 191 · Octubre 2018

  192. Número 192 · Octubre 2018

  193. Número 193 · Octubre 2018

  194. Número 194 · Noviembre 2018

  195. Número 195 · Noviembre 2018

  196. Número 196 · Noviembre 2018

  197. Número 197 · Noviembre 2018

  198. Número 198 · Diciembre 2018

  199. Número 199 · Diciembre 2018

  200. Número 200 · Diciembre 2018

  201. Número 201 · Diciembre 2018

  202. Número 202 · Enero 2019

  203. Número 203 · Enero 2019

  204. Número 204 · Enero 2019

  205. Número 205 · Enero 2019

  206. Número 206 · Enero 2019

  207. Número 207 · Febrero 2019

  208. Número 208 · Febrero 2019

  209. Número 209 · Febrero 2019

  210. Número 210 · Febrero 2019

  211. Número 211 · Marzo 2019

  212. Número 212 · Marzo 2019

  213. Número 213 · Marzo 2019

  214. Número 214 · Marzo 2019

  215. Número 215 · Abril 2019

  216. Número 216 · Abril 2019

  217. Número 217 · Abril 2019

  218. Número 218 · Abril 2019

  219. Número 219 · Mayo 2019

  220. Número 220 · Mayo 2019

  221. Número 221 · Mayo 2019

  222. Número 222 · Mayo 2019

  223. Número 223 · Mayo 2019

  224. Número 224 · Junio 2019

  225. Número 225 · Junio 2019

  226. Número 226 · Junio 2019

  227. Número 227 · Junio 2019

  228. Número 228 · Julio 2019

  229. Número 229 · Julio 2019

  230. Número 230 · Julio 2019

  231. Número 231 · Julio 2019

  232. Número 232 · Julio 2019

  233. Número 233 · Agosto 2019

  234. Número 234 · Agosto 2019

  235. Número 235 · Agosto 2019

  236. Número 236 · Agosto 2019

  237. Número 237 · Septiembre 2019

  238. Número 238 · Septiembre 2019

  239. Número 239 · Septiembre 2019

  240. Número 240 · Septiembre 2019

  241. Número 241 · Octubre 2019

  242. Número 242 · Octubre 2019

  243. Número 243 · Octubre 2019

  244. Número 244 · Octubre 2019

  245. Número 245 · Octubre 2019

  246. Número 246 · Noviembre 2019

  247. Número 247 · Noviembre 2019

  248. Número 248 · Noviembre 2019

  249. Número 249 · Noviembre 2019

  250. Número 250 · Diciembre 2019

  251. Número 251 · Diciembre 2019

  252. Número 252 · Diciembre 2019

  253. Número 253 · Diciembre 2019

  254. Número 254 · Enero 2020

  255. Número 255 · Enero 2020

  256. Número 256 · Enero 2020

  257. Número 257 · Febrero 2020

  258. Número 258 · Marzo 2020

  259. Número 259 · Abril 2020

  260. Número 260 · Mayo 2020

  261. Número 261 · Junio 2020

  262. Número 262 · Julio 2020

  263. Número 263 · Agosto 2020

  264. Número 264 · Septiembre 2020

  265. Número 265 · Octubre 2020

  266. Número 266 · Noviembre 2020

  267. Número 267 · Diciembre 2020

  268. Número 268 · Enero 2021

  269. Número 269 · Febrero 2021

  270. Número 270 · Marzo 2021

  271. Número 271 · Abril 2021

  272. Número 272 · Mayo 2021

  273. Número 273 · Junio 2021

  274. Número 274 · Julio 2021

  275. Número 275 · Agosto 2021

  276. Número 276 · Septiembre 2021

  277. Número 277 · Octubre 2021

  278. Número 278 · Noviembre 2021

  279. Número 279 · Diciembre 2021

  280. Número 280 · Enero 2022

  281. Número 281 · Febrero 2022

  282. Número 282 · Marzo 2022

  283. Número 283 · Abril 2022

  284. Número 284 · Mayo 2022

  285. Número 285 · Junio 2022

  286. Número 286 · Julio 2022

  287. Número 287 · Agosto 2022

  288. Número 288 · Septiembre 2022

  289. Número 289 · Octubre 2022

  290. Número 290 · Noviembre 2022

  291. Número 291 · Diciembre 2022

  292. Número 292 · Enero 2023

  293. Número 293 · Febrero 2023

  294. Número 294 · Marzo 2023

  295. Número 295 · Abril 2023

  296. Número 296 · Mayo 2023

  297. Número 297 · Junio 2023

  298. Número 298 · Julio 2023

  299. Número 299 · Agosto 2023

  300. Número 300 · Septiembre 2023

  301. Número 301 · Octubre 2023

  302. Número 302 · Noviembre 2023

  303. Número 303 · Diciembre 2023

  304. Número 304 · Enero 2024

  305. Número 305 · Febrero 2024

  306. Número 306 · Marzo 2024

  307. Número 307 · Abril 2024

  308. Número 308 · Mayo 2024

  309. Número 309 · Junio 2024

  310. Número 310 · Julio 2024

  311. Número 311 · Agosto 2024

  312. Número 312 · Septiembre 2024

  313. Número 313 · Octubre 2024

  314. Número 314 · Noviembre 2024

Ayúdanos a perseguir a quienes persiguen a las minorías. Total Donantes 3.340 Conseguido 91% Faltan 16.270€

PROPAGANDA

El barco fantasma Nord Stream

“La CIA ha proporcionado historias falsas para mantener al mundo centrado en cualquier posible sospechoso menos el más lógico: Biden”

Seymour Hersh 8/04/2023

<p>Imagen de la fuga de gas del Nord Stream 2 en el Mar Báltico, el 28 de septiembre de 2022. <strong>/ Guardia costera sueca</strong></p>

Imagen de la fuga de gas del Nord Stream 2 en el Mar Báltico, el 28 de septiembre de 2022. / Guardia costera sueca

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí

La Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos lleva a cabo constantemente operaciones encubiertas en todo el mundo, y todas necesitan una tapadera por si las cosas salen mal, como sucede con frecuencia. Es igualmente importante ofrecer una explicación cuando las cosas salen bien, como ocurrió en el Mar Báltico el pasado otoño. A las pocas semanas de que se publicara mi artículo en el que explicaba que Joe Biden había ordenado la destrucción de los gasoductos Nord Stream, la agencia elaboró una historia que interesó al New York Times y a dos importantes publicaciones alemanas.

Al crear una historia de buzos de aguas profundas y una tripulación que no existía, la agencia estaba siguiendo el protocolo, y la historia habría entrado a formar parte de los primeros días de la planificación secreta para destruir los oleoductos. El elemento esencial era un yate mítico irónicamente llamado Andrómeda por la bella hija de un rey mítico que fue encadenada desnuda a una roca. La tapadera fue compartida y apoyada por el BND, el servicio federal de inteligencia alemán.

Mi reportaje inicial recibió cobertura en todo el mundo, pero fue ignorado por los principales periódicos y cadenas de televisión de Estados Unidos. Puesto que la historia ganaba fuerza en Europa y en otros países, el 7 de marzo, el New York Times publicó un artículo en el que citaba a funcionarios estadounidenses que afirmaban que los servicios de inteligencia estadounidenses habían reunido una cantidad notable de información que sugería que un grupo proucraniano había saboteado los oleoductos. El artículo afirmaba que los funcionarios que habían “revisado” la nueva información la consideraban “un paso hacia la determinación de la autoría” del sabotaje de los oleoductos. El artículo del New York Times atrajo la atención mundial, pero desde entonces el periódico no ha vuelto a pronunciarse sobre el asunto. En una entrevista para un podcast del New York Times, uno de los tres autores del artículo explicó, sin darse cuenta, por qué la historia era insostenible desde el principio. Se le preguntó por la implicación del supuesto grupo proucraniano: “¿Qué le hace pensar que eso es lo que ocurrió?”. Respondió: “Debo dejar muy claro que realmente sabemos muy poco. ¿Verdad?”.

El 3 de abril, el Washington Post informó de que, en ese momento, algunos investigadores europeos dudaban de que el Andrómeda pudiera haber saboteado los oleoductos sin la ayuda de un segundo buque. Algunos en Europa se preguntaban si el papel del Andrómeda era “una distracción o solo una parte del asunto”. El artículo no sugería que la Administración Biden estuviera implicada en la destrucción del oleoducto, pero sí citaba a un diplomático europeo anónimo que decía que todo el mundo ve que hay un cadáver allí tirado, pero todos fingen que no pasa nada. “Es mejor no saber”, dijo el diplomático. El Washington Post no citó a ningún funcionario estadounidense, ni siquiera anónimo. El gobierno de Biden se ha convertido en una zona carente de información sobre Nord Stream.

Un triunfo para los diversos funcionarios de la CIA que han estado proporcionando historias falsas a los medios de comunicación, aquí y en el extranjero, en lo que ha sido un esfuerzo exitoso para mantener al mundo centrado en cualquier posible sospechoso excepto el que se ha manifestado como el más lógico: el presidente de Estados Unidos.

La CIA ha proporcionado historias falsas para mantener al mundo centrado en cualquier posible sospechoso menos el más lógico: Biden

El New York Times también publicó que un legislador europeo que recibe información de las agencias de inteligencia de su país afirmó que los servicios de inteligencia estaban recopilando información sobre unos cuarenta y cinco barcos cuyos transpondedores no funcionaban cuando pasaron por la zona donde explotaron los oleoductos. Uno de los denominados “barcos fantasma” podría haber colocado las minas y posteriormente accionar el detonador.

Tras la aparición del reportaje del New York Times en internet, Die Zeit, el periódico más importante de Alemania, se apresuró a publicar un artículo sobre una investigación del atentado contra Nord Stream que llevaba meses indagando sobre el tema en colaboración con una cadena de televisión pública. El semanario aportaba una novedad: identificaba un yate que, según informaba, había sido “alquilado a una empresa en Polonia que al parecer era propiedad de dos ucranianos”. Se decía que el grupo que alquiló el yate y llevó a cabo la destrucción del oleoducto estaba formado por un capitán, dos buzos, dos ayudantes de buceo y un médico. Die Zeit describía al grupo como unos “asesinos”, cuyos nombres no se publicaron ni se conocen, que utilizaron pasaportes falsos y habían transportado los explosivos necesarios al escenario del crimen. El yate habría navegado cerca de la isla danesa de Bornholm, próxima al lugar del sabotaje del oleoducto.

El periódico informó de que el yate había sido devuelto a la empresa que lo alquilaba –el alquiler de este tipo de yates cuesta dos mil dólares o más por semana– “sin limpiar”, lo cual permitió a los investigadores alemanes encontrar restos de un explosivo en una mesa del camarote. Relatos posteriores afirmaban que los investigadores también habían encontrado dos pasaportes ucranianos falsos abandonados en el yate. Un artículo posterior publicado en Der Spiegel, el semanario alemán, decía que el yate en cuestión se llamaba Andrómeda.

Posteriormente publiqué un artículo en el que sugería que la información facilitada por la policía federal alemana tanto a Die Zeit como a Der Spiegel había tenido su origen en los servicios de inteligencia estadounidense. El autor del reportaje de Die Zeit, Holger Stark, un experimentado periodista al que conozco desde que trabaja en Washington hace aproximadamente una década, se puso en contacto conmigo para quejarse de dicha afirmación. Stark me dijo que tenía excelentes fuentes en la policía federal alemana y que se enteró por esos enlaces, y no por ninguna agencia de inteligencia, alemana o estadounidense. Le creí y corregí inmediatamente la historia.

Reconozco que es difícil para cualquier periodista escribir sobre un colega, especialmente uno bueno. Pero este caso implica la aceptación de hechos que deberían haber sido cuestionados. Por ejemplo, no le pregunté a Stark si se había preguntado por qué un periódico estadounidense situado a casi seis mil kilómetros de distancia publicaba la misma acusación sobre un grupo de ucranianos anónimos, que no estaban vinculados a los dirigentes de Kiev, a los que las autoridades alemanas decían haber estado persiguiendo. Discutimos un hecho que él mencionó: que las autoridades de Alemania, Suecia y Dinamarca habían decidido, poco después de los atentados del oleoducto, enviar equipos al lugar para recuperar la única mina que no había estallado. Dijo que habían llegado demasiado tarde; un barco estadounidense había acudido al lugar en uno o dos días y había recuperado la mina y otros materiales. Le pregunté por qué creía que los estadounidenses habían llegado tan rápido al lugar y me contestó, con un gesto de la mano: “Ya sabes cómo son los estadounidenses. Siempre quieren ser los primeros”. Había otra explicación muy obvia.

El truco de una buena operación de propaganda es proporcionar a los objetivos –en este caso los medios de comunicación occidentales– lo que quieren oír. Un experto en inteligencia me lo explicó más sucintamente: “Cuando se lleva a cabo una operación como la de los oleoductos es necesario planificar una contraoperación, una pista falsa que tenga un tufillo a realidad. Y debe ser lo más detallada posible para que sea creíble”.

El truco de una buena operación de propaganda es proporcionar a los objetivos lo que quieren oír

“Hoy en día la gente ha olvidado que existe la parodia”, dijo el experto. “La ópera HMS Pinafore de Gilbert y Sullivan no trata de la Royal Navy del siglo XIX. Es una parodia”. El objetivo de la CIA en el caso del oleoducto era elaborar una parodia tan buena que la prensa se la creyera. ¿Pero por dónde empezar? No se pueden destruir los oleoductos con una bomba desde un avión o con marineros en un bote de goma.

“¿Pero por qué no un velero? Cualquier estudioso serio del suceso sabría que no se puede anclar un velero en aguas de 80 metros de profundidad” –la profundidad a la que fueron destruidos los cuatro oleoductos– “pero la historia no iba dirigida a un estudioso serio, sino a una prensa que no reconocería una parodia cuando se la presentaran”.

El experto en inteligencia enumeró todos los elementos necesarios para que cualquier individuo o grupo pudiera fletar un yate caro. “No puedes salir a la calle con un pasaporte falso y alquilar un barco. Tienes que contratar a un capitán que te haya proporcionado la agencia de alquiler o el propietario del yate, o a uno que venga con un certificado de competencias como exige la legislación marítima. Cualquiera que haya alquilado un yate lo sabe”. Asimismo, los buceadores y el médico requerirían una prueba similar de pericia y competencia para el buceo en aguas profundas que incluya el uso de Nitrox, una mezcla especial de oxígeno y nitrógeno.

El experto tenía más preguntas sobre el supuesto yate. “¿Cómo puede un velero de 15 metros encontrar los oleoductos en el Mar Báltico? Los oleoductos no son tan grandes y no figuran en las cartas náuticas que se entregan con el contrato de arrendamiento. Quizá la idea era meter a los dos buzos en el agua –algo nada fácil de hacer desde un yate pequeño– y dejar que los buzos los buscaran”. ¿Cuánto tiempo puede permanecer sumergido un buzo con el traje puesto? Quizá quince minutos. Lo que significa que el buzo tardaría cuatro años en buscar en una milla cuadrada.

“Los medios no se plantean ninguna de estas preguntas. Así que hay seis personas en el yate: dos buceadores, dos ayudantes, un médico y un capitán. Falta una cosa: ¿quién va a tripular el yate? o ¿y el cocinero?, ¿y el cuaderno de bitácora que la empresa arrendataria debe llevar por razones legales?”.

“No ha sucedido nada de eso", me dice el experto. “Deja de intentar vincularlo con la realidad. Es una parodia”.

Las historias publicadas en el New York Times y en la prensa europea no han dado indicios de que ningún periodista subiera a bordo y examinara físicamente el yate en cuestión. Tampoco explican por qué los pasajeros de un yate dejarían sus pasaportes, falsos o no, a bordo después de un alquiler. Se han publicado fotografías de un velero en dique seco llamado Andrómeda.

Nada de esto puede sostener una mala tapadera, me dijo el experto de inteligencia. “El esfuerzo por convertir la ficción en realidad continuará eternamente. Ahora es una foto de un velero que aparece después de la investigación y que no se puede rastrear: sin número de licencia donde legalmente debería estar. El Andrómeda ha sustituido al hombre de Piltdown en la prensa”.

El experto hizo una última reflexión: “En el mundo de los analistas y técnicos profesionales todos deducirían de tu historia, universal y acertadamente, que la diabólica CIA urdió una contraoperación a primera vista tan ridícula e infantil que su verdadero propósito sería reafirmar la verdad”.

-------------------
Este artículo se publicó originalmente en inglés en Substack el 5 de abril. Dos días después, el New York Times publicó un artículo en el que afirma que “las filtraciones de inteligencia en torno al sabotaje de los oleoductos han proporcionado más preguntas que respuestas”. Y concluye: “Puede que a nadie le interese revelar más”.

Traducción: Paloma Farré. 

La Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos lleva a cabo constantemente operaciones encubiertas en todo el mundo, y todas necesitan una tapadera por si las cosas salen mal, como sucede con frecuencia. Es igualmente importante ofrecer una explicación cuando las...

Este artículo es exclusivo para las personas suscritas a CTXT. Puedes iniciar sesión aquí o suscribirte aquí

Autor >

Seymour Hersh

S.H. (Chicago, 1937) es un periodista estadounidense de investigación que en 1970 ganó el Premio Pulitzer por su cobertura de la masacre de My Lai en la guerra de Vietnam. Sus reportajes han salido publicados en el New York Times, el New Yorker y la London Review of Books, entre otros medios. Su libro de memorias, Reportero, salió con Península en 2019.

Suscríbete a CTXT

Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias

Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí

Artículos relacionados >

1 comentario(s)

¿Quieres decir algo? + Déjanos un comentario

  1. Fernando

    Gracias a Seymour Hersh, a CTXT, a Substack y al medio independiente alemán Nachdenkseiten por informarnos sobre la realidad geopolítica que no aparece en los telediarios. https://www.nachdenkseiten.de/?p=96012

    Hace 1 año 7 meses

Deja un comentario


Los comentarios solo están habilitados para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí