La cosa va de familias y de que por fin empezamos a parecernos al resto de países, los que se pirran por divorcios, hijos secretos y arrumacos de los políticos. Creo que estábamos mejor antes, pero ésa es otra historia.

Rodrigo Rato se nos ha casado porque alguna buena noticia tendría que haber en su vida con la racha que lleva. Bueno, y porque qué menos que hincar la rodilla por la que lo lleva aguantando en este vía crucis sin ir a por tabaco. Se han casado en una finca y hay que felicitarle, porque somos gente educada, pero no se pregunten de dónde ha salido el dinero para pagar el convite y los combinados. A no ser que se hayan puesto sándwiches y mediasnoches como en los cumpleaños de mi infancia, antes de la era terrible de los parques de bolas.

Rajoy, por supuesto, no acudió a la boda. Bastante tiene con la de su amigo Javier Maroto, que se casa después de 19 años de noviazgo. Pero es que, ay, se casa con otro señor, y eso genera una inquietud entre algunos de sus votantes y de sus colegas de partido muy propia de otro siglo, más o menos el mismo siglo al que se abrazan los amantes de las tradiciones como la salvajada del Toro de la Vega.

Pero volvamos al siglo XXI. El padre de Rita Maestre tenía un puesto con Gallardón que vuelve a recuperar cuando el partido del que forma parte su hija gobierna Madrid. No dudo de la capacidad del señor Maestre para desempeñar su cargo (aunque tener las bendiciones del exalcalde me ponga los pelos como escarpias), pero seamos claros: es un poco feo en una época en la que cada detalle cuenta y vamos todos, lupa en mano, detectando vigas ajenas. Y cobrando más. Debe ser, junto con los fichajes de El Español, los únicos a los que les han subido el sueldo recientemente.

Pero hay otro padre, esta vez simpatizante de Ciudadanos, también en solfa estos días. Manuel Conthe, que fue presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ese supervisor que parece que supervisaba lo justo, ha protestado en su blog del diario Expansión por un artículo publicado en elEconomista en el que se dudaba de la limpieza del proceso de selección de su hija para el FROB. Selección en la que también estaba un vástago de la actual presidenta de la CMNV, Elvira Rodríguez. Dios los cría y ellos se juntan... en las entrevistas de trabajo. Lean y saquen sus conclusiones. A ver si resulta que tener un hijo que se dedique a lo mismo que tú ahora va a ser un problema.

Y por un hijo que tuvo con Alicia Sánchez Camacho se mofan de Manuel Pimentel. Como si no fuera terrible que para uno que nos quedaba con cara de decente, con ese flequillo peinado de monaguillo, para uno que nos dimite y pasa a un segundo plano, nos lo imputan. Como si el resto hubiéramos engendrado con los Fassbender y las Bündchen de turno y un cerebro de la Ivy League. Como poco.