
Bernie Sanders en Phoenix en 2015.
Gage SkidmoreEn CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
Gracias. Gracias… Gracias. Gracias a todos, muchas gracias a todos. Gracias… Gracias, muchas gracias.
Es un honor [gracias...muchas gracias] estar aquí esta noche [gracias, muchas gracias] y estar siguiendo los pasos de mi gran amiga Elizabeth Warren. Y estar aquí esta noche para agradecer a Michelle Obama por su increíble servicio a nuestro país. Ella ha hecho que todos nosotros estemos orgullosos.
Déjenme comenzar por agradecer a los cientos de miles de ciudadanos estadounidenses que participaron activamente en nuestra campaña como voluntarios. Déjenme agradecer a los dos millones y medio de ciudadanos estadounidenses que ayudaron a financiar nuestra campaña con ocho millones de contribuciones individuales. ¿Alguien sabe el promedio de esta contribución? Exacto, 27 dólares. Y déjenme agradecer a los 13 millones de estadounidenses que votaron por la revolución política, dándonos los 1.846 delegados que están aquí esta noche, el 46% del total. Y a los delegados: gracias por estar aquí y gracias por todo el trabajo que habéis hecho. Tengo expectativas y espero entusiasmado. Espero todos vuestros votos cuando pasemos lista mañana martes por la noche.
Y déjenme ofrecer un agradecimiento especial a los ciudadanos de mi Estado, de Vermont, que me han acompañado y apoyado como alcalde, diputado, senador y candidato presidencial. Y a mi familia --mi esposa Jane, mis cuatro hijos y siete nietos-- gracias, muchas gracias.
Entiendo que muchas personas aquí, en esta convención, en esta sala y en este país están desilusionadas con el resultado final del proceso de nominación. Creo que es justo decir que nadie está más desilusionado que yo. Pero a todos los que nos apoyaron --aquí y en todo el país-- espero que se sientan orgullosos del logro histórico que conseguimos.
Juntos, juntos amigos, empezamos una revolución política para transformar los Estados Unidos y esa Revolución --nuestra revolución-- continúa. Los días de elecciones vienen y van. Pero la lucha de los ciudadanos para crear un gobierno que representa a todos, y no solamente al 1% --un gobierno basado en el principio de justicia racial, económica--, esa lucha continúa. Y yo espero entusiasmado ser parte de esa lucha con vosotros.
Déjenme ser tan claro como puedo serlo. Esta elección no es, y nunca ha sido, sobre Hillary Clinton, o Donald Trump, o Bernie Sanders o cualquiera de los otros candidatos que buscaron ser presidentes. Esta elección no trata sobre chismes políticos. No trata de encuestas. No se trata de la recaudación de fondos. Ni de todas las cosas que los medios de comunicación se pasan tanto tiempo discutiendo.
Esta elección es --y debe ser-- sobre las necesidades de los estadounidenses y sobre el tipo de futuro que queremos crear para nuestros hijos y para nuestros nietos.
Esta elección debe tratar de terminar con el declive de cuarenta años de nuestra clase media. La realidad es que 47 millones de hombres, mujeres y niños viven en la pobreza. Se trata de entender que si no transformamos nuestra economía, nuestra generación más joven probablemente tendrá un nivel de vida más bajo que sus padres.
Esta elección es sobre terminar con el nivel grotesco de desigualdad de riqueza que existe en la América actual, lo peor que ha pasado desde 1928. No es moral, es inmoral, no es aceptable y es insostenible, que la décima parte del 1% de los más ricos tengan casi tanta riqueza como el 90% de la población. O que el 1% haya ganado este año el 85% de todos los ingresos. Eso es inaceptable. Eso debe cambiar.
Esta elección es sobre recordar dónde estábamos hace siete años y medio, cuando el presidente Obama asumió el cargo después de ocho años de economía de goteo republicanos.
Los republicanos quieren que nos olvidemos de que, como resultado de la avaricia, la imprudencia y la conducta ilegal en Wall Street, nuestra economía estaba en la peor crisis económica desde la Gran Depresión. Ahí es donde estábamos. Ahí es donde estábamos.
800.000 personas perdían su trabajo cada mes. 800.000 personas. Estábamos alcanzando un déficit terrible, de $1.4 trillones (1.400 billones por día), y el sistema financiero estaba al borde del colapso. Ahí es donde estábamos cuando el presidente Obama asumió el cargo.
Pues bien, hemos recorrido un largo camino en los últimos siete años y medio, que agradezco al presidente Obama y al vicepresidente Biden. Les doy las gracias por su liderazgo y por sacarnos de esa recesión terrible.
Sí, hemos logrado avances, pero creo que estamos todos de acuerdo en que debe hacerse mucho más.
Esta elección es sobre qué candidato entiende los problemas reales que tiene este país y ofrece soluciones reales --no solamente grandilocuencia, no alimentar el miedo, no insultar y dividir al pueblo.
Necesitamos un liderazgo en este país que mejore las vidas de las familias trabajadoras, de los niños, de la gente mayor, de los enfermos y de los pobres. Necesitamos un liderazgo que una a las personas y nos vuelva más fuertes --no un liderazgo que insulta a los latinos y a los mexicanos, que insulta a los musulmanes y a las mujeres, a los afroamericanos y los veteranos y busca dividirnos.
Con estas medidas, cualquier observador objetivo llegará a la conclusión de que --sobre la base de sus ideas y su liderazgo-- Hillary Clinton debe convertirse en la próxima presidenta de los Estados Unidos. Su elección no debería estar ni siquiera reñida.
Esta elección trata sobre una madre soltera de Nevada, quien con lágrimas en los ojos me dijo que estaba muerta de miedo por el futuro, porque ella y su joven hija no llegaban a fin de mes con los 10,45 dólares a la hora que ganaba. Trata de esa mujer y de los millones de trabajadores en este país que están luchando por sobrevivir con salarios totalmente inadecuados.
Hillary Clinton entiende que si alguien en este país trabaja 40 horas a la semana no debería vivir en la pobreza. Ella entiende que debemos incrementar el salario mínimo a un salario que permita vivir dignamente. Y está decidida a crear millones de nuevos puestos de trabajo mediante la mejora de nuestras infraestructuras ---nuestras carreteras, puentes, sistemas de agua y plantas de aguas residuales.
Pero su rival --Donald Trump-- tiene un punto de vista muy diferente. Él no apoya subir el salario mínimo de 7,25 dólares la hora, un salario de pasar hambre. Trump cree en enormes rebajas de impuestos para millonarios. Él cree que los Estados deberían tener derecho a reducir el salario mínimo por debajo de los 7,25 dólares la hora.¡ Qué ultraje!
Hermanos y hermanas, estas elecciones tratan sobre volver a mantener a los ciudadanos unidos. Citizens United es una de las peores decisiones de la Corte Suprema de nuestra nación. Esa decisión permite que los más ricos en los Estados Unidos, como los multimillonarios hermanos Koch, gasten cientos de millones de dólares comprando elecciones y, en el proceso, socavar la democracia.
Hillary Clinton designará a jueces de la Corte Suprema que están preparados para revocar a Citizens United y acabar con el movimiento hacia la oligarquía que estamos viendo en este país. Sus designaciones también defenderán los derechos de una mujer a elegir, los derechos de los trabajadores, de la comunidad gay, las necesidades de las minorías inmigrantes y la protección del medio ambiente.
Si ustedes no creen que esta elección es importante, que pueden quedarse a un lado, tómense un momento para pensar en los jueces de la Corte Suprema que Donald Trump nominaría, y qué significaría eso para los derechos civiles y el futuro de nuestro país.
En estas elecciones se trata de los miles de jóvenes que he conocido en el país. Los miles que conocí que dejaron la universidad con muchas deudas, y los muchos otros que trágicamente no pueden permitirse el lujo de ir a la universidad. Durante la campaña de las primarias, la secretaria Clinton y yo tratamos este asunto pero con un enfoque distinto. Recientemente, sin embargo, nos unimos en una propuesta que revolucionará la enseñanza superior en los EEUU. Se garantizará que los hijos de cualquier familia en este país con ingresos de 120.000 dólares al año o menos --el 83% de nuestra población-- podrán ir a una universidad pública y tener educación gratis. Esa propuesta también reducirá fuertemente la deuda estudiantil.
Esta elección es sobre el cambio climático, la mayor crisis ambiental que enfrenta nuestro planeta, y la necesidad de dejar este mundo de una manera saludable y habitable para nuestros niños y las generaciones futuras. Hillary Clinton está escuchando a los científicos que dicen que --a menos que actuemos con coraje para transformar nuestro sistema energético-- en el futuro próximo habrá más sequías, más inundaciones, acidificación de los océanos y aumento de su nivel. Ella entiende que podemos crear miles de puestos de trabajo con una transformación de nuestro sistema de energía. Empleos bien remunerados.
¿Donald Trump? Bueno, como la mayoría de los republicanos, opta por rechazar la ciencia. Cree que el cambio climático es mentira. Hillary Clinton entiende que el trabajo de un presidente es preocuparse de las generaciones futuras, no los beneficios a corto plazo de la industria de los combustibles fósiles.
Esta campaña es sobre una salud universal para todos y sobre reducir el número de personas que no tienen seguro. Hillary Clinton quiere que los ciudadanos tengan el derecho de elegir una opción pública en su cobertura de salud. Ella cree que cualquier persona que tenga más de 55 años debería poder elegir el Medicare y quiere ver a más millones de ciudadanos que tengan acceso a la salud primaria, la salud dental, a los tratamientos mentales y recetas más baratas gracias al aumento del número de centros de salud.
¿Y cuál es la posición de Donald Trump sobre el sistema de salud? Bueno, aquí no hay sorpresas. Lo de siempre, lo que siempre han dicho los republicanos para las familias trabajadoras. Él quiere abolir la ley de acceso a la salud, quitarle a 20 millones de personas el acceso a la salud y eliminar el Medicaid a los americanos con pocos ingresos.
Hillary Clinton también entiende que millones de personas mayores, veteranos con discapacidad y otros están luchando con los escandalosos precios de los medicamentos, y el hecho de que los estadounidenses paguen los medicamentos más caros del mundo. Ella entiende que se debe negociar los precios de los medicamentos con la industria farmacéutica y que las farmacéuticas no deberían ganar miles de millones cuando uno de cada cinco estadounidenses no puede pagarse los medicamentos. La codicia de las empresas farmacéuticas debe terminar.
Esta elección es sobre el liderazgo que necesitamos para aprobar una reforma migratoria integral y reparar un sistema de justicia criminal roto. Se trata de asegurarse de que los jóvenes de este país están en buenas escuelas y en buenos puestos de trabajo, no pudriéndose en las cárceles. Hillary Clinton entiende que tenemos que invertir en educación y en empleo para nuestra gente joven, no más cárceles o encarcelaciones.
En estos tiempos difíciles para nuestro país, esta elección debe servir para unir a nuestro pueblo, no para dividirlo. Mientras que Donald Trump está ocupado en insultar a un grupo tras otro, Hillary Clinton entiende que nuestra diversidad es una de nuestras mayores fortalezas. Sí. Nos volvemos más fuertes cuando blancos y negros, latinos, asiático-americanos, nativos americanos, cuando permanecemos juntos. Sí. Nos volvemos más fuertes cuando hombres y mujeres, jóvenes y mayores, gais y heteros, nacidos aquí o inmigrantes, luchan por crear el tipo de país que todos sabemos que podemos llegar a ser.
No es un secreto que Hillary Clinton y yo no estamos de acuerdo en una serie de asuntos. Sobre esto ha sido esta campaña. De eso se trata la democracia. Pero estoy feliz de poder decir que en el Comité de la Plataforma Demócrata se produjo un importante acercamiento entre las dos campañas y hemos creado, de lejos, la plataforma más progresista en la historia del Partido Demócrata. Entre muchísimas otras propuestas importantes, la plataforma pretende desarmar las grandes instituciones financieras en Wall Street y aprobar la ley Glass-Steagall de trasparencia financiera del siglo XXI. También busca una fuerte oposición a acuerdos destructores de empleo como el TPP, el Tratado Trans-Pacífico. Tenemos que asegurarnos de que el TPP no llega a la próxima sesión del Congreso.
Nuestro trabajo ahora es ver una plataforma demócrata fuerte, puesta en marcha por un Senado controlado por el Partido Demócrata, por una Casa de representantes Demócrata y la presidencia de Hillary Clinton --y yo voy a hacer todo lo que pueda para que eso ocurra.
Conozco a Hillary Clinton desde hace 25 años. La recuerdo, como ustedes, como una gran primera dama que rompió precedentes en cuanto al rol que debía tener una primera dama, y ayudó a liderar la lucha por la sanidad universal. Yo serví con ella en el Senado de los Estados Unidos y la conozco como una fuerte defensora de los derechos de los niños, las mujeres y los discapacitados.
Hillary Clinton hará una presidencia excepcional y yo estoy orgulloso de estar con ella aquí esta noche. Muchas gracias a todos.
Gracias. Gracias… Gracias. Gracias a todos, muchas gracias a todos. Gracias… Gracias, muchas gracias.
Es un honor [gracias...muchas gracias] estar aquí esta noche [gracias, muchas gracias] y estar siguiendo los pasos de mi gran amiga Elizabeth Warren. Y estar aquí esta noche para agradecer a Michelle...
Autor >
Bernie Sanders
Suscríbete a CTXT
Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias
Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí