1. Número 1 · Enero 2015

  2. Número 2 · Enero 2015

  3. Número 3 · Enero 2015

  4. Número 4 · Febrero 2015

  5. Número 5 · Febrero 2015

  6. Número 6 · Febrero 2015

  7. Número 7 · Febrero 2015

  8. Número 8 · Marzo 2015

  9. Número 9 · Marzo 2015

  10. Número 10 · Marzo 2015

  11. Número 11 · Marzo 2015

  12. Número 12 · Abril 2015

  13. Número 13 · Abril 2015

  14. Número 14 · Abril 2015

  15. Número 15 · Abril 2015

  16. Número 16 · Mayo 2015

  17. Número 17 · Mayo 2015

  18. Número 18 · Mayo 2015

  19. Número 19 · Mayo 2015

  20. Número 20 · Junio 2015

  21. Número 21 · Junio 2015

  22. Número 22 · Junio 2015

  23. Número 23 · Junio 2015

  24. Número 24 · Julio 2015

  25. Número 25 · Julio 2015

  26. Número 26 · Julio 2015

  27. Número 27 · Julio 2015

  28. Número 28 · Septiembre 2015

  29. Número 29 · Septiembre 2015

  30. Número 30 · Septiembre 2015

  31. Número 31 · Septiembre 2015

  32. Número 32 · Septiembre 2015

  33. Número 33 · Octubre 2015

  34. Número 34 · Octubre 2015

  35. Número 35 · Octubre 2015

  36. Número 36 · Octubre 2015

  37. Número 37 · Noviembre 2015

  38. Número 38 · Noviembre 2015

  39. Número 39 · Noviembre 2015

  40. Número 40 · Noviembre 2015

  41. Número 41 · Diciembre 2015

  42. Número 42 · Diciembre 2015

  43. Número 43 · Diciembre 2015

  44. Número 44 · Diciembre 2015

  45. Número 45 · Diciembre 2015

  46. Número 46 · Enero 2016

  47. Número 47 · Enero 2016

  48. Número 48 · Enero 2016

  49. Número 49 · Enero 2016

  50. Número 50 · Febrero 2016

  51. Número 51 · Febrero 2016

  52. Número 52 · Febrero 2016

  53. Número 53 · Febrero 2016

  54. Número 54 · Marzo 2016

  55. Número 55 · Marzo 2016

  56. Número 56 · Marzo 2016

  57. Número 57 · Marzo 2016

  58. Número 58 · Marzo 2016

  59. Número 59 · Abril 2016

  60. Número 60 · Abril 2016

  61. Número 61 · Abril 2016

  62. Número 62 · Abril 2016

  63. Número 63 · Mayo 2016

  64. Número 64 · Mayo 2016

  65. Número 65 · Mayo 2016

  66. Número 66 · Mayo 2016

  67. Número 67 · Junio 2016

  68. Número 68 · Junio 2016

  69. Número 69 · Junio 2016

  70. Número 70 · Junio 2016

  71. Número 71 · Junio 2016

  72. Número 72 · Julio 2016

  73. Número 73 · Julio 2016

  74. Número 74 · Julio 2016

  75. Número 75 · Julio 2016

  76. Número 76 · Agosto 2016

  77. Número 77 · Agosto 2016

  78. Número 78 · Agosto 2016

  79. Número 79 · Agosto 2016

  80. Número 80 · Agosto 2016

  81. Número 81 · Septiembre 2016

  82. Número 82 · Septiembre 2016

  83. Número 83 · Septiembre 2016

  84. Número 84 · Septiembre 2016

  85. Número 85 · Octubre 2016

  86. Número 86 · Octubre 2016

  87. Número 87 · Octubre 2016

  88. Número 88 · Octubre 2016

  89. Número 89 · Noviembre 2016

  90. Número 90 · Noviembre 2016

  91. Número 91 · Noviembre 2016

  92. Número 92 · Noviembre 2016

  93. Número 93 · Noviembre 2016

  94. Número 94 · Diciembre 2016

  95. Número 95 · Diciembre 2016

  96. Número 96 · Diciembre 2016

  97. Número 97 · Diciembre 2016

  98. Número 98 · Enero 2017

  99. Número 99 · Enero 2017

  100. Número 100 · Enero 2017

  101. Número 101 · Enero 2017

  102. Número 102 · Febrero 2017

  103. Número 103 · Febrero 2017

  104. Número 104 · Febrero 2017

  105. Número 105 · Febrero 2017

  106. Número 106 · Marzo 2017

  107. Número 107 · Marzo 2017

  108. Número 108 · Marzo 2017

  109. Número 109 · Marzo 2017

  110. Número 110 · Marzo 2017

  111. Número 111 · Abril 2017

  112. Número 112 · Abril 2017

  113. Número 113 · Abril 2017

  114. Número 114 · Abril 2017

  115. Número 115 · Mayo 2017

  116. Número 116 · Mayo 2017

  117. Número 117 · Mayo 2017

  118. Número 118 · Mayo 2017

  119. Número 119 · Mayo 2017

  120. Número 120 · Junio 2017

  121. Número 121 · Junio 2017

  122. Número 122 · Junio 2017

  123. Número 123 · Junio 2017

  124. Número 124 · Julio 2017

  125. Número 125 · Julio 2017

  126. Número 126 · Julio 2017

  127. Número 127 · Julio 2017

  128. Número 128 · Agosto 2017

  129. Número 129 · Agosto 2017

  130. Número 130 · Agosto 2017

  131. Número 131 · Agosto 2017

  132. Número 132 · Agosto 2017

  133. Número 133 · Septiembre 2017

  134. Número 134 · Septiembre 2017

  135. Número 135 · Septiembre 2017

  136. Número 136 · Septiembre 2017

  137. Número 137 · Octubre 2017

  138. Número 138 · Octubre 2017

  139. Número 139 · Octubre 2017

  140. Número 140 · Octubre 2017

  141. Número 141 · Noviembre 2017

  142. Número 142 · Noviembre 2017

  143. Número 143 · Noviembre 2017

  144. Número 144 · Noviembre 2017

  145. Número 145 · Noviembre 2017

  146. Número 146 · Diciembre 2017

  147. Número 147 · Diciembre 2017

  148. Número 148 · Diciembre 2017

  149. Número 149 · Diciembre 2017

  150. Número 150 · Enero 2018

  151. Número 151 · Enero 2018

  152. Número 152 · Enero 2018

  153. Número 153 · Enero 2018

  154. Número 154 · Enero 2018

  155. Número 155 · Febrero 2018

  156. Número 156 · Febrero 2018

  157. Número 157 · Febrero 2018

  158. Número 158 · Febrero 2018

  159. Número 159 · Marzo 2018

  160. Número 160 · Marzo 2018

  161. Número 161 · Marzo 2018

  162. Número 162 · Marzo 2018

  163. Número 163 · Abril 2018

  164. Número 164 · Abril 2018

  165. Número 165 · Abril 2018

  166. Número 166 · Abril 2018

  167. Número 167 · Mayo 2018

  168. Número 168 · Mayo 2018

  169. Número 169 · Mayo 2018

  170. Número 170 · Mayo 2018

  171. Número 171 · Mayo 2018

  172. Número 172 · Junio 2018

  173. Número 173 · Junio 2018

  174. Número 174 · Junio 2018

  175. Número 175 · Junio 2018

  176. Número 176 · Julio 2018

  177. Número 177 · Julio 2018

  178. Número 178 · Julio 2018

  179. Número 179 · Julio 2018

  180. Número 180 · Agosto 2018

  181. Número 181 · Agosto 2018

  182. Número 182 · Agosto 2018

  183. Número 183 · Agosto 2018

  184. Número 184 · Agosto 2018

  185. Número 185 · Septiembre 2018

  186. Número 186 · Septiembre 2018

  187. Número 187 · Septiembre 2018

  188. Número 188 · Septiembre 2018

  189. Número 189 · Octubre 2018

  190. Número 190 · Octubre 2018

  191. Número 191 · Octubre 2018

  192. Número 192 · Octubre 2018

  193. Número 193 · Octubre 2018

  194. Número 194 · Noviembre 2018

  195. Número 195 · Noviembre 2018

  196. Número 196 · Noviembre 2018

  197. Número 197 · Noviembre 2018

  198. Número 198 · Diciembre 2018

  199. Número 199 · Diciembre 2018

  200. Número 200 · Diciembre 2018

  201. Número 201 · Diciembre 2018

  202. Número 202 · Enero 2019

  203. Número 203 · Enero 2019

  204. Número 204 · Enero 2019

  205. Número 205 · Enero 2019

  206. Número 206 · Enero 2019

  207. Número 207 · Febrero 2019

  208. Número 208 · Febrero 2019

  209. Número 209 · Febrero 2019

  210. Número 210 · Febrero 2019

  211. Número 211 · Marzo 2019

  212. Número 212 · Marzo 2019

  213. Número 213 · Marzo 2019

  214. Número 214 · Marzo 2019

  215. Número 215 · Abril 2019

  216. Número 216 · Abril 2019

  217. Número 217 · Abril 2019

  218. Número 218 · Abril 2019

  219. Número 219 · Mayo 2019

  220. Número 220 · Mayo 2019

  221. Número 221 · Mayo 2019

  222. Número 222 · Mayo 2019

  223. Número 223 · Mayo 2019

  224. Número 224 · Junio 2019

  225. Número 225 · Junio 2019

  226. Número 226 · Junio 2019

  227. Número 227 · Junio 2019

  228. Número 228 · Julio 2019

  229. Número 229 · Julio 2019

  230. Número 230 · Julio 2019

  231. Número 231 · Julio 2019

  232. Número 232 · Julio 2019

  233. Número 233 · Agosto 2019

  234. Número 234 · Agosto 2019

  235. Número 235 · Agosto 2019

  236. Número 236 · Agosto 2019

  237. Número 237 · Septiembre 2019

  238. Número 238 · Septiembre 2019

  239. Número 239 · Septiembre 2019

  240. Número 240 · Septiembre 2019

  241. Número 241 · Octubre 2019

  242. Número 242 · Octubre 2019

  243. Número 243 · Octubre 2019

  244. Número 244 · Octubre 2019

  245. Número 245 · Octubre 2019

  246. Número 246 · Noviembre 2019

  247. Número 247 · Noviembre 2019

  248. Número 248 · Noviembre 2019

  249. Número 249 · Noviembre 2019

  250. Número 250 · Diciembre 2019

  251. Número 251 · Diciembre 2019

  252. Número 252 · Diciembre 2019

  253. Número 253 · Diciembre 2019

  254. Número 254 · Enero 2020

  255. Número 255 · Enero 2020

  256. Número 256 · Enero 2020

  257. Número 257 · Febrero 2020

  258. Número 258 · Marzo 2020

  259. Número 259 · Abril 2020

  260. Número 260 · Mayo 2020

  261. Número 261 · Junio 2020

  262. Número 262 · Julio 2020

  263. Número 263 · Agosto 2020

  264. Número 264 · Septiembre 2020

  265. Número 265 · Octubre 2020

  266. Número 266 · Noviembre 2020

  267. Número 267 · Diciembre 2020

  268. Número 268 · Enero 2021

  269. Número 269 · Febrero 2021

  270. Número 270 · Marzo 2021

  271. Número 271 · Abril 2021

  272. Número 272 · Mayo 2021

  273. Número 273 · Junio 2021

  274. Número 274 · Julio 2021

  275. Número 275 · Agosto 2021

  276. Número 276 · Septiembre 2021

  277. Número 277 · Octubre 2021

  278. Número 278 · Noviembre 2021

  279. Número 279 · Diciembre 2021

  280. Número 280 · Enero 2022

  281. Número 281 · Febrero 2022

  282. Número 282 · Marzo 2022

  283. Número 283 · Abril 2022

  284. Número 284 · Mayo 2022

  285. Número 285 · Junio 2022

  286. Número 286 · Julio 2022

  287. Número 287 · Agosto 2022

  288. Número 288 · Septiembre 2022

  289. Número 289 · Octubre 2022

  290. Número 290 · Noviembre 2022

  291. Número 291 · Diciembre 2022

  292. Número 292 · Enero 2023

  293. Número 293 · Febrero 2023

  294. Número 294 · Marzo 2023

  295. Número 295 · Abril 2023

  296. Número 296 · Mayo 2023

  297. Número 297 · Junio 2023

  298. Número 298 · Julio 2023

  299. Número 299 · Agosto 2023

  300. Número 300 · Septiembre 2023

  301. Número 301 · Octubre 2023

  302. Número 302 · Noviembre 2023

  303. Número 303 · Diciembre 2023

  304. Número 304 · Enero 2024

  305. Número 305 · Febrero 2024

  306. Número 306 · Marzo 2024

  307. Número 307 · Abril 2024

  308. Número 308 · Mayo 2024

  309. Número 309 · Junio 2024

  310. Número 310 · Julio 2024

  311. Número 311 · Agosto 2024

  312. Número 312 · Septiembre 2024

  313. Número 313 · Octubre 2024

  314. Número 314 · Noviembre 2024

Ayúdanos a perseguir a quienes persiguen a las minorías. Total Donantes 3.347 Conseguido 91% Faltan 15.800€

Tribuna

Chamartín: planificando en la oscuridad

La justificación del Centro de Negocios se sustenta sobre bases endebles

Francisco López Groh (Club de Debates Urbanos) 29/12/2018

<p>Vista parcial del distrito de Chamartín de Madrid, España.</p>

Vista parcial del distrito de Chamartín de Madrid, España.

Emedeme

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí

CTXT es un medio pequeño pero sus luchas son grandes. Necesitamos tu ayuda para seguir avanzando. Puedes suscribirte en agora.ctxt.es o hacer una donación aquí:

Uno de los desafíos conceptuales de la planificación, incluida la urbanística, ha sido cómo manejar la incertidumbre derivada de procesos en gran medida indeterminados. Pero una cosa es intentar integrar dicha incertidumbre en los procesos de planificación y otra planificar en la oscuridad. 

Desde los primeros esbozos de la última versión de la Operación Chamartín, aprobada inicialmente en septiembre de 2008,  diversas voces, de la Plataforma Zona Norte  al Club de Debates Urbanos plantearon la necesidad de realizar un análisis del sector de oficinas en la ciudad en una actitud a la vez preventiva, (prudencial) y de necesario conocimiento de la situación y evolución de este sector en relación con su papel en la economía y  la ordenación urbanas, en vista de lo que se consideraba una desproporcionada concentración de edificabilidad terciaria,  reclamando una visión más integral, relativa al conjunto de la ciudad y una valoración de los efectos que el Centro de Negocios podría tener en el funcionamiento y justicia de la ciudad.

Así las cosas, en la última Mesa Social de Chamartín en la que participaron las entidades ciudadanas (antes de abandonarla por las deficiencias del modelo de participación) el concejal de Desarrollo Sostenible, José Manuel Calvo, presentó algunos datos sintéticos de un estudio del Ayuntamiento relativo al terciario de oficinas en la ciudad, para solventar, según sus palabras, las dudas que se planteaban sobre la viabilidad y oportunidad de la propuesta (El documento, de 2 de abril de 2018, de la DG de Economía y Sector Público del Ayuntamiento de Madrid, no fue distribuido ni publicado hasta cuatro meses más tarde, y forma parte de la documentación del expediente de la operación). 

En la presentación, Calvo insistió en dos particularidades del estudio: su carácter científico –un recurso habitual contra la crítica– y el hecho de que se trataba de un informe realizado por la propia corporación y no por agentes de parte.

Insuficiencias del análisis municipal

Sin embargo, contra de lo sostenido por José Manuel Calvo, el estudio municipal maneja exclusivamente datos sintéticos de informes publicados por consultoras de inversión inmobiliaria, en particular de PNB-Paribas, información sesgada por la función de estas empresas, cuyos análisis se orientan a las tasas de rentabilidad del capital invertido (yield) y no al estudio de las necesidades de los sectores que demandan oficinas. Estos informes están orientados exclusivamente a los flujos de inversión global especulativa y sus oportunidades. 

Más allá del citado sesgo, la línea fundamental de justificación de la enorme edificabilidad se basa en la correlación grosera entre crecimiento (PIB) y demanda de oficinas, y la extrapolación a partir de aquí de la necesidad de espacio de oficinas –y en particular del caracterizado como prime– en el Centro de Negocios de Chamartín.  

Las proyecciones del estudio se sustentan sobre la base trivial de que el sector servicios (y el de oficinas) crece a medida que crece la economía y que, por lo tanto, analizar la correlación entre el crecimiento del VAB y el parque de oficinas grosso modo permite estimar la demanda futura en función de hipótesis de crecimiento del PIB.

Además de la servidumbre que implica dar por ciertos, a efectos de planificación, los datos de las consultoras de inversión –esquemáticos y sesgados– esta añadida simplificación y manejo de datos brutos (que acumula márgenes de error en cada operación) hacen inconsistentes los resultados obtenidos. 

Las proyecciones de variables macroeconómicas como el VAB son insuficientes para llegar a pronósticos acerca de la demanda de oficinas, máxime si se utilizan en cascada una serie de imprecisiones como utilizar datos que no son coherentes, p. ej. relacionar el VAB con el empleo de la seguridad social en vez de los de la propia contabilidad regional, o asumir que la relación entre VAB y empleo es constante en el tiempo, como si no variase la productividad. 

El hecho es que si bien la oferta de espacio es sencilla de analizar (basta un buen trabajo de campo, aunque el Ayuntamiento no ha realizado siquiera esta tarea) la demanda es mucho más complicada, dado que en ella influyen un amplio número de factores.  Por ello habitualmente la estimación de la demanda de oficinas se hace en base a complejos modelos basados en el uso de una batería de variables: la estimación del empleo en sectores que demandan espacio de oficinas, el PIB, variables financieras, etc.

Aún más arriesgada es la idea adoptada de agrupar ciclos –no bien definidos– de boom&bust para realizar medias de las tendencias analizadas. Las oscilaciones catastróficas del sector se dejan aparte, como si fueran ciclos menores de ajuste del mercado, cuando hablamos de un subsector inmobiliario propenso a las burbujas cuyo efecto sobre las ciudades es devastador: De vez en cuando, estos mercados de oficinas experimentan crisis: la sobre-construcción crea un exceso de oferta de espacio, aumentan las tasas de espacio vacante, las rentas y el valor del capital caen, las empresas inmobiliarias quiebran…”(Lizieri)

Oferta, demanda, localización…

El parque de oficinas madrileño se estima en unos 13 millones de m2 según los agentes especializados, de los cuales se estiman libres entre un 10 y un 12%. A esta oferta había que añadir, según el propio ayuntamiento – sin contar el Centro de Negocios de Chamartín– siete millones más de m2, en fase de edificación/gestión/urbanización, lo que supone que hay en marcha espacio de oficinas para casi 600.000 empleos, es decir que sería necesario un incremento del empleo del 76% de los sectores susceptibles de ocupar oficinas para “llenar” todo este espacio. Pero estos sectores agregados crecieron un 2,9 % según la contabilidad regional en el periodo 2010-15, y el empleo en servicios financieros y seguros cayó en un 7%.

En cuanto a las oficinas prime –de nuevo según los agentes de inversión– hay un parque de unos tres millones de m2, situados en el CBD madrileño (eje Castellana de Méndez Álvaro a las 4 Torres y barrios de su entorno) de los cuales se estima una tasa vacante de un 8% aproximadamente. Esta oferta se verá incrementada por aquella parte de los 7.000.000 m2 en desarrollo que sea adecuada para oficinas prime, aunque los datos municipales impiden estimar este desglose. En todo caso, poner en desarrollo 1.400.000 de m2 en el nuevo Centro de Negocios de Chamartín, se debe considerar una sobreoferta innecesaria.

El estudio elude entre otros aspectos las razones por las que se plantea esta operación. Como en otros textos se ha sostenido –Club de Debates Urbanos– el actual mercado inversor de espacio de oficinas prime está impulsado por factores distintos a la demanda real de oficinas (lo que no quiere decir que ésta no tenga peso). Estas operaciones de acumulación en Torres del Capital se desarrollan como depósitos de valor, como cajas fuertes del capital sometidas al flujo de capitales entre las ciudades globales, hasta el punto de que permanecen vacías en muchos casos (Saskia SassenFernández…). 

Los riesgos de estas grandes operaciones de oferta inmobiliaria de espacio para la inversión global son considerables. La reciente crisis financiero-inmobiliaria ha mostrado que los impactos de las crisis financiero/inmobiliarias no repercuten en exclusiva sobre las empresas afectadas, sus accionistas y prestamistas, sino que contagian la economía real y redistribuyen las pérdidas al conjunto de la población. 

A los críticos de la operación nos preocupa, además de los riesgos citados, dos cuestiones clave:

  1. La temeridad añadida de concentrar en manos de un único promotor (BBVA – DCN) una enorme oferta de espacio de oficinas a medio y largo plazo, incrementando los riesgos ante las dinámicas cíclicas del sector. 
  2. El hecho de que  dicha concentración tendría previsiblemente un impacto negativo sobre la desigualdad espacial al concentrar, de nuevo en el norte, un paquete sustancial de funciones especializadas. 

Conclusiones provisionales

1- El objetivo del informe municipal no ha sido estimar la situación y posible evolución del sector de oficinas en sus diferentes tipologías y localizaciones, la evolución del empleo susceptible de ocuparlas o los patrones de los flujos de inversión, sino intentar proporcionar frágiles muletas a las concesiones municipales al BBVA_DCN, pasando de los 400.000 m2  propuestos por la actual corporación en 2016 a los 1.400.000 m2 de la propuesta actual (otorgándole más edificabilidad terciaria incluso que la Propuesta del PP de 2015) 

2- Dado el grado de generalidad y agregación del estudio, éste no puede constituir el soporte de la justificación del techo de oficinas proyectado en Chamartín. Utiliza datos sesgados, no fiables, y proyecciones arriesgadamente especulativas, y en consecuencia no constituye una base consistente de estimación de escenarios. 

3- El Centro de Negocios madrileño (eje Castellana y entorno) dispone de una importante capacidad para la modernización de edificios existentes. Saville estima un incremento de 280.000m2 en el plazo de un año entre inmuebles nuevos y reacondicionados, un 65% de ellos en el interior de la M-30 (las 4 Torres suman una edificabilidad de 220.000 m2) y existen siete millones de m2 de terciario de oficinas en desarrollo.Añadir una edificabilidad 6 veces superior a las 4 Torres parece un despropósito ante el acotado crecimiento estimado del empleo de oficinas.

Colin Lizieri advertía acerca de la actitud de los administradores urbanos que fomentan el desarrollo de centros financieros: “Al hacerlo, atan la fortuna de sus ciudades al flujo y reflujo de los mercados mundiales de capital” defendiendo que  “las estrategias que enfatizan la diversidad de la estructura del empleo, que alientan los clúster no financieros como un contrapeso, pueden ayudar a proteger a las ciudades de las crisis periódicas que parecen afectar a las ciudades financieras globales.” 

Todavía estamos a tiempo.

CTXT es un medio pequeño pero sus luchas son grandes. Necesitamos tu ayuda para seguir avanzando. Puedes suscribirte en agora.ctxt.es o hacer una donación...

Este artículo es exclusivo para las personas suscritas a CTXT. Puedes iniciar sesión aquí o suscribirte aquí

Autor >

Francisco López Groh (Club de Debates Urbanos)

Suscríbete a CTXT

Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias

Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí

Artículos relacionados >

1 comentario(s)

¿Quieres decir algo? + Déjanos un comentario

  1. Roberto

    Cada vez, más de mis amigos (nacidos en Madrid y que llevan viviendo toda la vida aquí) se quieren ir de Madrid porque es insoportable vivir aquí. Los precios son imposibles, los salarios mediocres, y todo, todo, en esta ciudad gira en torno al beneficio empresarial (Todo el espacio urbano está supeditado al ladrillazo y a la especulación inmobiliaria, y por tanto, los precios. Por otro lado, las grandes empresas que apenas pagan electricidad, impuestos, ni siquiera los terrenos ocupados en algunas ocasiones). Les tenemos que subvencionar la electricidad, y los impuestos municipales y societarios de los que están exentos. Cada vez se hace más difícil moverse a cualquier parte en transporte público porque todo gira en torno a favorecer la movilidad y la renovación reiterada del transporte privado. Y lo último que se han sacado de la manga, precarizar aún más el ya de por sí corrompido transporte público externalizado con fines políticos para hacer presión a los partidos no afines. En cuanto a la "Operación Chamartín", que tantas veces ha cambiado de nombre para impedir que se pueda seguir su rastro, no es más que una nueva muestra de tratar de convertir el fin en un medio. Ésto es, tratar de convencer de que el fin no es el ladrillazo, si no la "supuesta necesidad de progreso que la ciudad tiene, y que esta operación de especulazión urbanística trae consigo", y hacernos creer que el fin último no es el ladrillazo inmobiliario al que tanto nos tienen acostumbrados, si no la "potencial capacidad rentabilizadora" que esta operación trae. Sí, rentable es un rato, para los promotores, financieros, constructores y allegados. Para los demás simples mortales inferiores.... "come ladrillo, come..." Como siempre, los liberados son ellos.

    Hace 5 años 10 meses

Deja un comentario


Los comentarios solo están habilitados para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí