Los votantes más a la derecha de la derecha han encontrado el provocador de orgasmos perfectos.

“La bandera más grande de España, de 1.000 metros cuadrados, desplegada en una playa de Santander”. Orgasmo.

“Propuesta para la construcción de un muro infranqueable en Ceuta y Melilla para evitar la invasión migratoria”. Orgasmo.

“Pedimos la legalización de las armas en los domicilios para ser empleadas en defensa propia”. Orgasmo.

“Amenaza con ilegalizar al PNV”. Orgasmo.

Llega el “Satisfacher”, un auténtico generador de orgasmos explosivos; la respuesta, muy masculina, al tan celebrado últimamente estimulador de clítoris femenino.

Esta opción de moda está arrasando sobre todo entre los hombres de clase media de pequeñas ciudades, de 35 a 44 años, tradicionales y muy poco promiscuos. La mayoría salen de una relación larga, que antes era popular, pero que últimamente les deja insatisfechos; y también triunfa entre ciudadanos amantes de las novedades y las emociones fuertes.

Orgasmos múltiples y mucho más intensos gracias a una ultra estimulación con ondas expansivas y titulares muy excitantes para obtener un mayor placer en sus usuarios.

En España su introducción es relativamente reciente, pero este fascinante producto ya ha demostrado su eficacia en los países en los que se ha probado con anterioridad: en América ya ha triunfado en Estados Unidos o en Brasil, y en Europa ha entrado con fuerza en Polonia, Hungría, Italia y ahora en Finlandia.

En algunas comunidades autónomas de nuestro país como Madrid o Andalucía lleva instalado desde hace unos meses de forma sorpresiva, donde funciona curiosamente sobre todo cuando se utiliza en tríos. 

Su penetración en otras comunidades históricas como Cataluña o País Vasco está siendo muy baja, algunos lo achacan a que en estos territorios tienen alternativas propias diferenciadas.

Sus primeros usuarios eran reacios a compartir su experiencia y les costaba admitir su fascinación por algo que durante muchos años en este país ha sido un tema tabú, tenían algún miedo a contar su experiencia, pero todos estos remilgos en las últimas semanas han salido, literalmente, volando por los aires.

Está arrasando desde hace unos meses, ayudado por una repercusión brutal en la mayoría de los medios de comunicación que no paran de hablar de este fenómeno, y por el boca a boca de los que ya lo han probado.

Los que lo han comprado, repiten. Y no solo repiten, además lo aconsejan en redes sociales. Es más, se convierten en unos auténticos fanáticos.

Sus comentarios, casi siempre apoyados en sus avatares con un desinhibido y clarificador “sin complejos”, inundan todos los rincones de Twitter; también en Facebook donde sus fans hacen campañas muy agresivas entre sus conocidos y familiares; pero sobre todo es en Whatsapp donde se nota más su incidencia, sus fieles se organizan y lo alaban constantemente de una forma entusiasta, sobre todo en los chats de grupo. 

La mayoría de las veces exagerando y mintiendo, pero lo que sea por ganar nuevos adeptos a la causa a la que ya están entregados.

Valgan como ejemplo algunos testimonios de sus usuarios:

“Nosotros no vamos contra los gais, pero quizá que se llame de otra forma…”

“Son los únicos que se enfrentan sin ambages a este neofeminismo que tanto daño ha hecho”.

“Lo primero que me llamó la atención de ellos es el discurso de que todas las personas tienen los mismos derechos, independientemente del sexo”.

“Estoy hasta los cojones de que mis impuestos se lo lleven unos señores que meramente vienen aquí a tocarse los cojones”.

Pero ¿Qué opinan los expertos? Hemos hablado con una de las personas pioneras en la venta de este producto en nuestro país:

“Antes era muy complicado venderlo, pero ahora es totalmente diferente, es al contrario, muchos se animan y vienen a buscarlo. Es ideal para hombres con poca sensibilidad y sin habilidades sociales a los que les cuesta relacionarse o encontrar una pareja y misóginos en general”. 

¿Es imparable su éxito? En estos últimos cuatro años de constantes coitus interruptus electorales y de decepción con las opciones actuales, incapaces de ponerse de acuerdo para frenar este auténtico fenómeno, esta nueva modalidad para provocar orgasmos ha sufrido un espectacular boom de ventas. 

Parece que este producto ha llegado para quedarse y se puede alzar como una firme alternativa a la siempre aburrida pareja tradicional y bipartidista.

No sabemos si a partir de este domingo, 10 de noviembre, el resto de opciones serán capaces de excitarnos lo suficiente para frenar su imparable ascenso, o los partidarios del “Satisfacher” tendrán el más salvaje de los orgasmos.

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@tortondo