En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
Hay una opinión bastante generalizada en el mundo del fútbol y es que a pocos les gusta que su equipo reciba homenajes antes de un partido. Ya sea porque distrae, porque te saca del foco de lo realmente importante o, simplemente, porque suele ser un poco gafe. Seguro que el Athletic y sus aficionados dijeron aquello de “ya lo sabía yo” cuando acabó el duelo en el Metropolitano, ante un Atleti que tuvo el bonito detalle de permitir que el equipo visitante jugara con la camiseta rojiblanca en homenaje al 125 aniversario del club vasco, donde están las raíces del nacimiento de la entidad madrileña. El conjunto de Simeone hizo de perfecto anfitrión. Pero después de la fiesta se quedó con lo más importante, con una victoria que se sustentó fundamentalmente en el aporte de dos hombres: Reinildo y Griezmann.
Tuvo mérito el triunfo colchonero madrileño. Primero por jugar, una vez más, en un ambiente que no le ayuda a pesar de hacerlo como local. No parece que la división en la grada por la falta de animación del fondo sur a cuenta del escudo vaya a tener solución a corto plazo, por mucho que el técnico y los jugadores lo pidan, así que me temo que el equipo va a tener que acostumbrarse a esta situación. Y segundo porque tuvo enfrente a un equipo que no se lo puso nada fácil, especialmente en los primeros 45 minutos. Practicando una de sus cualidades, la presión en campo contrario, los bilbaínos entorpecieron mucho la salida de juego local, a la que le faltó ligazón en las combinaciones durante varios tramos de ese periodo inicial.
En las veces que lograban superar la primera línea defensiva, aparecía siempre Reinildo
El Athletic tenía las ideas claras. Con la movilidad de sus jugadores y con buenos apoyos conseguía manejar el balón con criterio, aunque sus intentos morían cerca del área de Oblak, bien por falta de precisión o bien porque, en las veces que lograban superar la primera línea defensiva, aparecía siempre Reinildo atento al quite echando mano de su velocidad para evitar males mayores. No es fácil ganar pugnas a jugadores tan rápidos como los hermanos Williams, pero él lo consiguió varias veces en situaciones que tenían visos de peligro. Si ya en el duelo de San Mamés en la primera vuelta secó tanto a Iñaki como a Nico, el mozambiqueño repitió faena. Tan brillante fue su actuación que la grada coreó su nombre varias veces durante el choque. Vaya fichaje que hizo el Atleti la pasada temporada.
A pesar de ello, el conjunto de Valverde tuvo en esa primera parte dos buenas ocasiones. En la primera, Dani García mandó el balón alto estando solo en el área; y en la segunda, Sancet, el mejor de los visitantes, cabeceó a las manos de Oblak en una acción en la que quizá pudo dirigir mejor el balón. A destacar el catálogo de jugadas ensayadas a balón parado del equipo vasco. Todos los saques de esquina los lanzó en corto de manera distinta y no estuvieron mal ejecutados, aunque la defensa local logró desbaratar las acciones en el último momento.
Al Atleti le costó encontrar el camino hacia el área de Agirregabiria, que era la novedad en la portería vizcaína. Pese a faltarle continuidad, sí tuvo algunas llegadas esporádicas que culminó mal. Un buen pase de Koke para la internada de Nahuel en el área que el argentino culminó con un disparo desviado; un centro de éste último que Griezmann cabeceó desviado; un disparo de Llorente desde la frontal que salió centrado a las manos del portero; y, la mejor de todas, un mano a mano de Carrasco tras dejada de Correa, que el belga no pudo aprovechar al rechazar el arquero con el pie su remate raso. Llorente estaba solo a su derecha pero el belga no le vio o quiso culminar él la jugada. Las cosas podían haber cambiado si en el minuto 33, el árbitro, Martínez Munuera, hubiera sacado tarjeta roja a Dani García por una entrada muy dura a Nahuel. Se quedó en amarilla, pero rozó la expulsión.
El Atleti empezó la segunda parte con nuevos bríos, poniendo más intensidad, con más velocidad de pelota y con algunos retoques tácticos. Atacó con un 3-5-2 y con Llorente un poco más centrado y Correa más a la derecha, empezó a hacerse con el centro del campo. El Athletic ya llegaba tarde a la presión y reculó unos metros. Faltaba la siguiente parte del plan. Encontrar la claridad y la contundencia en los metros finales para llevar al marcador la mejoría en el juego. La tuvo Carrasco, pero su remate raso cruzado dentro del área lo sacó Agirregabiria a córner con una buena parada. Aún tuvo un chispazo el Athletic en ataque, con una internada de Nico Williams cuyo disparo sacó Oblak a córner metiendo una buena mano cerca del poste. Ahí se acabó el cuadro de Bilbao en ataque. Era el minuto 54.
Barrios jugó algo más adelantado que en otras ocasiones y tuvo una actuación destacada
Poco después movió el banquillo Simeone, dando entrada a Barrios y Morata por De Paul, que tenía amarilla, y Correa. El centrocampista canterano jugó algo más adelantado que en otras ocasiones y tuvo una actuación destacada, pidiendo siempre el balón, jugando con aplomo y personalidad. Un ejemplo de la mayor presencia del Atleti en el área contraria en la segunda parte es que acumuló seis saques de esquina, mientras que en el periodo inicial no había tenido ninguno. Sin embargo, no logró rematar ninguno de ellos. Como tampoco llegó a la portería una falta lanzada por Griezmann cerca de la frontal al rechazar el balón la barrera.
Valverde quiso dar aire nuevo a su equipo introduciendo en el partido a Zárraga y Guruzeta por un Dani García al que se le estaba acabando el fuelle y por un desaparecido Muniain. Pero el partido siguió volcado hacia la meta visitante. Simeone metió a Memphis por Carrasco y apenas un minuto después, en el 73, Griezmann hizo una pared con el neerlandés cerca del centro del campo, avanzó unos metros y, tras entrar en el área, soltó un disparo raso cruzado con la zurda que mandó el balón a la red tras tocar en el palo. Lo celebró con rabia el francés, al que se le está negando el gol, pero al que no se le puede reprochar nada. Trabaja, defiende, crea, asiste y también hace goles tan importantes como este. En el Athletic le temen más que a nadie. Y no es para menos. Les ha hecho 14 goles en 30 partidos.
El Athletic buscó la reacción, su técnico hizo un triple cambio a la desesperada metiendo a Berenguer, Raúl García y Paredes, pero estuvo incluso más cerca el 2-0 que el empate. Morata tuvo una muy parecida a la acción del gol, pero en esta ocasión su disparo salió rozando el palo. Y hubo algunas contras en superioridad que no supieron culminar bien los que en esta ocasión vistieron de naranja. Simeone, que se pasó los últimos minutos pidiendo el apoyo de la grada, retiró del campo a Griezmann justo antes de que acabara el choque para que recibiera una gran ovación por su aportación al equipo.
Los colchoneros toman oxígeno para afrontar los meses finales del campeonato con buenas posibilidades de lograr la clasificación para la Champions, estando incluso la tercera posición a tiro de dos puntos. Parece confirmarse la mejoría del equipo tras el Mundial, algo que resaltó el Cholo tras el partido con una frase para la reflexión: “Lo repito y lo contra repito, que algo mejoró y se siente lo que mejoró. Y el que lo quiera entender, bien”. ¿Centrarse sólo en el Atleti sin distracciones? En unos días afrontan un buen examen para comprobar esa mejoría. Llega el derbi.
Hay una opinión bastante generalizada en el mundo del fútbol y es que a pocos les gusta que su equipo reciba homenajes antes de un partido. Ya sea porque distrae, porque te saca del foco de lo realmente importante o, simplemente, porque suele ser un poco gafe. Seguro que el Athletic y sus aficionados...
Autor >
Ricardo Uribarri
Periodista. Empezó a cubrir la información del Atleti hace más de 20 años y ha pasado por medios como Claro, Radio 16, Época, Vía Digital, Marca y Bez. Actualmente colabora con XL Semanal y se quita el mono de micrófono en Onda Madrid.
Suscríbete a CTXT
Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias
Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí