Pactólogo de guardia
¿Qué ha pasado estos meses?
Ha fallado algo fundamental: la comunicación. El concepto "Gobierno del Cambio", emitido por PSOE y C's, ha evitado un "Gobierno de Izquierdas" y, por el mismo precio, un anunciado "Gobierno de Progreso". ¿Qué es eso? Ni idea. No hemos llegado a saberlo
Guillem Martínez 27/04/2016

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
Parece ser que, si no hay un golpe de genio --interior o exterior--, la cosa va a acabar/proseguir en elecciones. Llegados a este punto, es útil saber lo que ha pasado. Han pasado varias cosas. Sincrónicamente.
A-- Sobre las izquierdas. En estos meses ha pasado una sola cosa fundamental. Se ha evitado un Gobierno de izquierdas. Quizás esto es lo más importante y lo que ha requerido mayor esfuerzo y desgaste. El concepto "Gobierno del Cambio", emitido por PSOE y C's, ha evitado un improbable "Gobierno de Izquierdas" y, además y por el mismo precio, un anunciado "Gobierno de Progreso". ¿Que es un "Gobierno de Progreso"? Ni idea. No hemos llegado a saber lo que es eso. No hemos llegado a saber qué puntos en común tienen PSOE y Podemos/Confluencias. Porque el "Gobierno de Progreso" no era una opción, así como por exceso de teatro y ausencia de transparencia, ignoramos --algo importantísimo-- qué puntos se envainaría Podemos en el trance de Gobernar. Empieza a ser dramático, en ese sentido, tanto periodismo pamplinas que relaciona non-stop a Podemos con la amenaza judeo-marxista-masónica-bolivariana, en vez de describirlo. Este proceso de negociación con Podemos ha aportado, en fin, pocas descripciones sobre Podemos. Es decir, sobre sus élites. Aún, técnicamente, no sabemos si son unos políticos españoles más, dispuestos a caer de la mula ante la aparición de ese llenapistas histórico/hispánico denominado responsabilidad-de-Estado, que tanta hambre ha creado en el mundo. O lo son menos. Gracias al "Pacto del Prado", sabemos, no obstante, todo lo contrario. Es decir, cuáles son los irrenunciables para PSOE. En ese Pacto de 30 puntos, el PSOE admitió 27. Y rechazó 3. Los que entraban en conflicto con La Bicha/UE. El límite del PSOE es Europa. Es decir, todo.
B--Sobre el pack La Bicha. Los tres grandes partidos sin problemas éticos ante la regresión económica y democrática europea --es decir, los tres partidos que están de acuerdo en mayores tramos políticos-- no han podido formar Gobierno. Es importante saber --quizás es lo único importante que ha pasado en estos meses-- que los tres grandes partidos sensibles de grancoalicionarse encima no han podido acceder a la Gran Coalición, lo que sería la normalidad política en este país, porque ello supondría la muerte instantánea de uno de ellos. O, lo que es lo mismo, porque ha fallado algo fundamental para que el PSOE accediera a lo que le pide el cuerpo, su trayectoria y sus futuribles. La comunicación. El PSOE no ha podido hacer en este viraje lo que realizó sin grandes problemas en sus virajes anteriores --verbigracia: abandono del republicanismo, del voto individual en congresos, del marxismo, de la cosa anti-Otan, del Bienestar; defensa, promoción y ejecución, única en el Sur de Europa, de una reforma constitucional para garantizar la austeridad--. Es decir, por primera vez no ha existido una protección cultural que garantizara, explicara, suavizara y volviera lógico, razonado y fatal ese viraje. La Comunicación --un palabro fino, que esconde detrás la bestialidad, única en Europa, de una industria de la opinión y la información, que vela por la estabilidad en la dirección en la que le dicen-- no ha podido o no ha sabido hacerlo. Y, ojo, tampoco ha podido dar vidilla a la casilla anterior, el "Gobierno del Cambio", un póquer matemáticamente improbable que sólo podía haber tenido algo de éxito si, vía comunicación, hubiera dejado de oler a rayos. Los medios españoles desarrollaron, desde finales de los 70's, un rol sin paralelo europeo. El de "intelectual colectivo" --si bien sería más acertado denominarlo "ciudadano colectivo"--, un emisor y receptor de un mismo punto de vista que, más que fijar ideas, fijaba el sentido común de la sociedad, lo que era normal y lo que era friki. Pues bien, desde los Pactos de la Moncloa, es la primera vez que eso falla. Cuidadín. La crisis cultural española, la decadencia de una cultura que hasta ahora fue infalible y hegemónica, está más avanzada que su crisis política. Un intelectual --"colectivo"; es decir, un tertuliano, un canal, un articulista, un diario-- tiene menos crédito que el vino de la casa de un restaurante chino. La política española tiene poco crédito, sí. La prueba del algodón ha sido su incapacidad para hablar en voz alta de lo que desea, y de realizarlo. Pero aún tiene miles de kilos de crédito más que su subordinado, el intelectual español ad hoc, cuya función era reírle las gracias/los virajes.
C--Sobre la derecha. El gran éxito de todos estos meses corresponde al PP. Desde el 20D, no ha variado de posicionamiento, por lo que llega a las elecciones más hierático y vistoso. Pero razonemos su éxito. ¿A qué se debe? A nada. Literalmente. No ha hecho nada. Algo que podría ser curioso si no fuera porque esa conducta, consistente en no hacer nada, no es un hecho aislado y genial, sino que es la sinopsis de su legislatura anterior. Ante la mayor crisis democrática, política, social y económica de la historia, ante la corrupción sistémica que afecta a todas las instituciones --pero es que a todas; esto es un compiyoguicorrupción estructurada--, y ante el caso catalán, el PP no ha hecho nada. Y, lo que es peor, ha estado acertado. Lo que indica que el Régimen no puede hacer nada efectivo ante ninguno de esos temas sin dejar de serlo, sin cambiar absolutamente sus mecanismos, su cultura política y, tal vez, glups, su forma. Lamentablemente, esa inacción, acompañada del descrédito y la aludida crisis de comunicación, no puede dar mucho de sí sin ahondar en lo que pretende evitar. Que no es otra cosa que su fin. A diferencia de Catalunya --un biotopo que solucionó esta fase gracias a un anillo que los une a todos en una Gran Coalición--, el Estado carece de un adhesivo sexy que haya posibilitado un Gobierno. Es posible que, en breve, ese adhesivo sea el miedo, o la represión. Hay indicios.
D--Sobre lo que viene. La cosa queda, en fin y si no hay Momento CUP, aplazada al Momento CUP de después de las próximas elecciones. En las que, todo apunta a ello, el debate electoral consistirá en valorar estos meses, antes que los últimos años. Toda una victoria para el pack no-meneallo/no-hagamos-nada, que gana oxígeno. Lo necesita. Esta crisis de Régimen, que pinta de largo recorrido, se va intensificando y ahondando, sin prisas, pero sin pausas. Ahora le toca intensificar esa crisis a una Institución que ya estaba seriamente tocada. Los medios de comunicación. La Comunicación, vamos, ese pilar del Régimen, que ahora es, de manera más o menos nítida, un zombi. Pero que, como los zombis, muerde. En esta última entrega de la crisis española ha conseguido que el tema UE, y el tema someter a democracia la Unidad Nacional, ese invento de la Restauración 1.0, aún estén fuera del sentido común, de lo posible. Toma muerdo.
Parece ser que, si no hay un golpe de genio --interior o exterior--, la cosa va a acabar/proseguir en elecciones. Llegados a este punto, es útil saber lo que ha pasado. Han pasado varias cosas. Sincrónicamente.
A-- Sobre las izquierdas. En estos meses ha pasado una sola cosa...
Autor >
Guillem Martínez
Es autor de 'CT o la cultura de la Transición. Crítica a 35 años de cultura española' (Debolsillo), de '57 días en Piolín' de la colección Contextos (CTXT/Lengua de Trapo), de 'Caja de brujas', de la misma colección y de 'Los Domingos', una selección de sus artículos dominicales (Anagrama). Su último libro es 'Como los griegos' (Escritos contextatarios).
Suscríbete a CTXT
Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias
Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí