PROCESANDO EL PROCESO AL PROCÉS (XVI)
Esperando a Trapero
Aquí estamos, haciendo un juicio en el siglo XXI sobre la soberanía del XIX, que es la única que entienden, además, en Cat y Esp
Guillem Martínez Madrid , 13/03/2019
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FEDERALIST PAPERS. “La soberanía nacional es un lío. Sí, mola. O, al menos, moló en 1812. Diferenciaba la nación –la ciudadanía– de la monarquía, y afirmaba que la soberanía es de las personas. No coló. O no mucho tiempo. Los textos constitucionales posteriores situaban la soberanía de la misma forma, pero también en la figura del rey y del parlamento. La propuesta federal era repartir la soberanía entre el Estado Federal, el Estado Federado y el Municipio, para que esas tres entidades se dieran para el pelo, se controlaran. En el texto posterior, de 1876, la soberanía es nacional otra vez. Vamos, que la monarquía ha perdido el miedo a la palabra nación. Es más, la hace suya, se hace símbolo de la nación, que ya significa otra cosa, estatal e indivisible, que da canguelo. La Soberanía Nacional de 1876 es, pues, una reflexión contra el federalismo. Que llega intacta a la CE78. Se cuela, junto a la monarquía, sin debate, vía la Ley de Reforma Política. Explica que el pueblo español es soberano, si bien, emoticono carita llorando de risa, no ha vuelto a ejercer la soberanía. Explica, vamos, que esto, tras esta reforma, es ya irreformable. O, al menos, ¿quién diablos es el pueblo español?”. Creo que sale en el spot de Fairy, Pi. Son los de Villa-Arriba. O los de Villa-Abajo. El legislador no fue claro en ello en el 78. Pi prosigue: “Hoy la soberanía reside, de manera asimétrica, en la UE, en el Estado y, glups, en el IBEX. Queda poco de la soberanía del XIX, salvo su definición. Y aquí estamos, haciendo un juicio en el siglo XXI sobre la soberanía del XIX, que es la única que entienden, además, en Cat y Esp. ¿Qué puede salir mal?”. Rayos, Pi, que empieza la sesión en el TS e igual dura 20', como ayer. “Hay mañanas que yo tardo más en empezar a mear. La edad y la muerte es lo peor para la próstata, brrrrrr”.
MAL VERSAR ES HACER VERSOS MALOS. Ayer costaba apreciar la cosa malversación. Hoy, pues no tanto. Una de los dos estrellas que lo ha hecho posible ha sido Jaume Mestre, responsable de Difusió Institucional de la Gene, por el tercio ERC. Sinopsis: sí, se hizo concurso para una campaña publicitaria por lo del referéndum, cuantificada en 2 millones. Las empresas no se presentaron no-sea-que. Finalmente, la hizo el Govern, encargándola a CCMA/TV3, que emitió al respecto dos facturas, de 93.000 y 180.000 euros. Que no se cobraron, etc. Turull habló, en su día que no estaban sujetas de facturación, al entrar en un contrato marco. Lo que es una buena definición de TV3/el urdacismo, ese contrato-marco. Del testimonio, me dice un administrativista, se desprende que había voluntad de pago. Lo que puede llevar, en pocas casillas, al tema malversación. En otro orden de cosas, Mestre se hizo un tanto el sueco –sin llegar a los 412 “no-sé”, 82 “no-recuerdo”, 58 “lo-desconozco” y 7 “no-me-consta” de la infanta cuando su juicio–, por lo que fue amonestado por Marchena y, finalmente, fue reubicado en el juzgado de guardia por falso testimonio/6-12 meses de multa/suspensión de empleo o cargo público de 6 meses a 3 años. Importante: ayer Toni's Day, no se hizo nada al respecto con curritos de diversas empresas, de lo que se intuye que Marchena no va a hacer nada al respecto por personas que luchan por su pan haciéndose el sueco en el Gran Sur, sino por los que se lo ganan. Ya veremos.
DIPLOCAT. Turno de Albert Royo, Secretario General del Diplocat, antes del 155. “Rayos, Cat tiene poli y diplomacia, atributos de soberanía sin ser Estado; me temo que este juicio, sea lo que sea, también será el principio de la adaptación del concepto autonomía al texto constitucional; de 1876”; Pi, usted es la alegría de la huerta; “¿Qué quiere? El federalismo no engaña, y así nos luce el pelo”– La pregunta es: ¿qué es el Diplocat? Es una suerte de consorcio. Pasta pública –85-90%– y de empresas/amiguetes –“la soberanía del siglo XXI”; Pi, así no hay quien trabaje, parezco José Luis Moreno con un muñeco; “¿Significa eso que quiere meterme la mano en el culo, joven?”–. Es una fórmula común en Esp. Pero en Cat ya es arte. Permite a la administración solucionar problemas de contratación, como son los amiguitos/las recompensas, como es contratar y despedir a antojo. A la vez, permite estar alejado del Govern, cuando convenga, y en algún sector, como el sanitario, el reparto de la riqueza. Entre los ricos, si bien ya es un primer paso –sí, el procesismo, es neoliberal–. Para el procés, me temo, la labor del Diplocat ha consistido en organizar viajes. Del Govern –improductivos, propagandísticos; no hubo ni un sólo éxito diplomático, ni me temo, la voluntad de obtenerlo; sólo recibieron algo parecido a honores de Estado en, glups, Hungría–, del entorno procesista –recompensas, vamos–, y de científicos sociales del mundo-mundial, que podían acceder al conocimiento absoluto sobre Cat y a una paella en BCN frente a la mar salada.
La GC –que ya ha metido la gamba en alguna ocasión– acusa a Royo de haber pagado, con su Visa Diplocat Master Goold, a los observadores internacionales contratados por la Gene para el 1-O. Importante: el pago gubernamental de observadores ya es una rareza bananera, que quita, por un tubo, validez internacional a un referéndum. Vamos, que el Estado sabía que no lo era. Anyway. Royo: que lo que pasa es que se confunde Diplocat con Conselleria d'Afers Exteriors. Que sí, que se gastan una pasta en científicos sociales internacionales, pero que es la XXXX vida. Que los observadores no eran observadores. Que, además, no cobraron. La jefa de la delegación de no-observadores, en su día –2O-2017– habló a la prensa, como observadora, para evaluar el 1-O. No vio en el 1-O, un día de violencia policial, las condiciones de un referéndum, por cierto. Tenia que declarar hoy, pero la han aplazado. “Por deficiente organización de la testifical”, me dice una defensa. Por eso y por “el hecho de haber apurado mucho en las otras semanas”, me dice, otra. “Vamos al Corte Inglés, a ponernos Essential Energy como si no hubiera un mañana”, me dice Pi. Mañana, tachán-tachán, Trapero.
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Guillem Martínez
Es autor de 'CT o la cultura de la Transición. Crítica a 35 años de cultura española' (Debolsillo), de '57 días en Piolín' de la colección Contextos (CTXT/Lengua de Trapo), de 'Caja de brujas', de la misma colección y de 'Los Domingos', una selección de sus artículos dominicales (Anagrama). Su último libro es 'Como los griegos' (Escritos contextatarios).
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