1. Número 1 · Enero 2015

  2. Número 2 · Enero 2015

  3. Número 3 · Enero 2015

  4. Número 4 · Febrero 2015

  5. Número 5 · Febrero 2015

  6. Número 6 · Febrero 2015

  7. Número 7 · Febrero 2015

  8. Número 8 · Marzo 2015

  9. Número 9 · Marzo 2015

  10. Número 10 · Marzo 2015

  11. Número 11 · Marzo 2015

  12. Número 12 · Abril 2015

  13. Número 13 · Abril 2015

  14. Número 14 · Abril 2015

  15. Número 15 · Abril 2015

  16. Número 16 · Mayo 2015

  17. Número 17 · Mayo 2015

  18. Número 18 · Mayo 2015

  19. Número 19 · Mayo 2015

  20. Número 20 · Junio 2015

  21. Número 21 · Junio 2015

  22. Número 22 · Junio 2015

  23. Número 23 · Junio 2015

  24. Número 24 · Julio 2015

  25. Número 25 · Julio 2015

  26. Número 26 · Julio 2015

  27. Número 27 · Julio 2015

  28. Número 28 · Septiembre 2015

  29. Número 29 · Septiembre 2015

  30. Número 30 · Septiembre 2015

  31. Número 31 · Septiembre 2015

  32. Número 32 · Septiembre 2015

  33. Número 33 · Octubre 2015

  34. Número 34 · Octubre 2015

  35. Número 35 · Octubre 2015

  36. Número 36 · Octubre 2015

  37. Número 37 · Noviembre 2015

  38. Número 38 · Noviembre 2015

  39. Número 39 · Noviembre 2015

  40. Número 40 · Noviembre 2015

  41. Número 41 · Diciembre 2015

  42. Número 42 · Diciembre 2015

  43. Número 43 · Diciembre 2015

  44. Número 44 · Diciembre 2015

  45. Número 45 · Diciembre 2015

  46. Número 46 · Enero 2016

  47. Número 47 · Enero 2016

  48. Número 48 · Enero 2016

  49. Número 49 · Enero 2016

  50. Número 50 · Febrero 2016

  51. Número 51 · Febrero 2016

  52. Número 52 · Febrero 2016

  53. Número 53 · Febrero 2016

  54. Número 54 · Marzo 2016

  55. Número 55 · Marzo 2016

  56. Número 56 · Marzo 2016

  57. Número 57 · Marzo 2016

  58. Número 58 · Marzo 2016

  59. Número 59 · Abril 2016

  60. Número 60 · Abril 2016

  61. Número 61 · Abril 2016

  62. Número 62 · Abril 2016

  63. Número 63 · Mayo 2016

  64. Número 64 · Mayo 2016

  65. Número 65 · Mayo 2016

  66. Número 66 · Mayo 2016

  67. Número 67 · Junio 2016

  68. Número 68 · Junio 2016

  69. Número 69 · Junio 2016

  70. Número 70 · Junio 2016

  71. Número 71 · Junio 2016

  72. Número 72 · Julio 2016

  73. Número 73 · Julio 2016

  74. Número 74 · Julio 2016

  75. Número 75 · Julio 2016

  76. Número 76 · Agosto 2016

  77. Número 77 · Agosto 2016

  78. Número 78 · Agosto 2016

  79. Número 79 · Agosto 2016

  80. Número 80 · Agosto 2016

  81. Número 81 · Septiembre 2016

  82. Número 82 · Septiembre 2016

  83. Número 83 · Septiembre 2016

  84. Número 84 · Septiembre 2016

  85. Número 85 · Octubre 2016

  86. Número 86 · Octubre 2016

  87. Número 87 · Octubre 2016

  88. Número 88 · Octubre 2016

  89. Número 89 · Noviembre 2016

  90. Número 90 · Noviembre 2016

  91. Número 91 · Noviembre 2016

  92. Número 92 · Noviembre 2016

  93. Número 93 · Noviembre 2016

  94. Número 94 · Diciembre 2016

  95. Número 95 · Diciembre 2016

  96. Número 96 · Diciembre 2016

  97. Número 97 · Diciembre 2016

  98. Número 98 · Enero 2017

  99. Número 99 · Enero 2017

  100. Número 100 · Enero 2017

  101. Número 101 · Enero 2017

  102. Número 102 · Febrero 2017

  103. Número 103 · Febrero 2017

  104. Número 104 · Febrero 2017

  105. Número 105 · Febrero 2017

  106. Número 106 · Marzo 2017

  107. Número 107 · Marzo 2017

  108. Número 108 · Marzo 2017

  109. Número 109 · Marzo 2017

  110. Número 110 · Marzo 2017

  111. Número 111 · Abril 2017

  112. Número 112 · Abril 2017

  113. Número 113 · Abril 2017

  114. Número 114 · Abril 2017

  115. Número 115 · Mayo 2017

  116. Número 116 · Mayo 2017

  117. Número 117 · Mayo 2017

  118. Número 118 · Mayo 2017

  119. Número 119 · Mayo 2017

  120. Número 120 · Junio 2017

  121. Número 121 · Junio 2017

  122. Número 122 · Junio 2017

  123. Número 123 · Junio 2017

  124. Número 124 · Julio 2017

  125. Número 125 · Julio 2017

  126. Número 126 · Julio 2017

  127. Número 127 · Julio 2017

  128. Número 128 · Agosto 2017

  129. Número 129 · Agosto 2017

  130. Número 130 · Agosto 2017

  131. Número 131 · Agosto 2017

  132. Número 132 · Agosto 2017

  133. Número 133 · Septiembre 2017

  134. Número 134 · Septiembre 2017

  135. Número 135 · Septiembre 2017

  136. Número 136 · Septiembre 2017

  137. Número 137 · Octubre 2017

  138. Número 138 · Octubre 2017

  139. Número 139 · Octubre 2017

  140. Número 140 · Octubre 2017

  141. Número 141 · Noviembre 2017

  142. Número 142 · Noviembre 2017

  143. Número 143 · Noviembre 2017

  144. Número 144 · Noviembre 2017

  145. Número 145 · Noviembre 2017

  146. Número 146 · Diciembre 2017

  147. Número 147 · Diciembre 2017

  148. Número 148 · Diciembre 2017

  149. Número 149 · Diciembre 2017

  150. Número 150 · Enero 2018

  151. Número 151 · Enero 2018

  152. Número 152 · Enero 2018

  153. Número 153 · Enero 2018

  154. Número 154 · Enero 2018

  155. Número 155 · Febrero 2018

  156. Número 156 · Febrero 2018

  157. Número 157 · Febrero 2018

  158. Número 158 · Febrero 2018

  159. Número 159 · Marzo 2018

  160. Número 160 · Marzo 2018

  161. Número 161 · Marzo 2018

  162. Número 162 · Marzo 2018

  163. Número 163 · Abril 2018

  164. Número 164 · Abril 2018

  165. Número 165 · Abril 2018

  166. Número 166 · Abril 2018

  167. Número 167 · Mayo 2018

  168. Número 168 · Mayo 2018

  169. Número 169 · Mayo 2018

  170. Número 170 · Mayo 2018

  171. Número 171 · Mayo 2018

  172. Número 172 · Junio 2018

  173. Número 173 · Junio 2018

  174. Número 174 · Junio 2018

  175. Número 175 · Junio 2018

  176. Número 176 · Julio 2018

  177. Número 177 · Julio 2018

  178. Número 178 · Julio 2018

  179. Número 179 · Julio 2018

  180. Número 180 · Agosto 2018

  181. Número 181 · Agosto 2018

  182. Número 182 · Agosto 2018

  183. Número 183 · Agosto 2018

  184. Número 184 · Agosto 2018

  185. Número 185 · Septiembre 2018

  186. Número 186 · Septiembre 2018

  187. Número 187 · Septiembre 2018

  188. Número 188 · Septiembre 2018

  189. Número 189 · Octubre 2018

  190. Número 190 · Octubre 2018

  191. Número 191 · Octubre 2018

  192. Número 192 · Octubre 2018

  193. Número 193 · Octubre 2018

  194. Número 194 · Noviembre 2018

  195. Número 195 · Noviembre 2018

  196. Número 196 · Noviembre 2018

  197. Número 197 · Noviembre 2018

  198. Número 198 · Diciembre 2018

  199. Número 199 · Diciembre 2018

  200. Número 200 · Diciembre 2018

  201. Número 201 · Diciembre 2018

  202. Número 202 · Enero 2019

  203. Número 203 · Enero 2019

  204. Número 204 · Enero 2019

  205. Número 205 · Enero 2019

  206. Número 206 · Enero 2019

  207. Número 207 · Febrero 2019

  208. Número 208 · Febrero 2019

  209. Número 209 · Febrero 2019

  210. Número 210 · Febrero 2019

  211. Número 211 · Marzo 2019

  212. Número 212 · Marzo 2019

  213. Número 213 · Marzo 2019

  214. Número 214 · Marzo 2019

  215. Número 215 · Abril 2019

  216. Número 216 · Abril 2019

  217. Número 217 · Abril 2019

  218. Número 218 · Abril 2019

  219. Número 219 · Mayo 2019

  220. Número 220 · Mayo 2019

  221. Número 221 · Mayo 2019

  222. Número 222 · Mayo 2019

  223. Número 223 · Mayo 2019

  224. Número 224 · Junio 2019

  225. Número 225 · Junio 2019

  226. Número 226 · Junio 2019

  227. Número 227 · Junio 2019

  228. Número 228 · Julio 2019

  229. Número 229 · Julio 2019

  230. Número 230 · Julio 2019

  231. Número 231 · Julio 2019

  232. Número 232 · Julio 2019

  233. Número 233 · Agosto 2019

  234. Número 234 · Agosto 2019

  235. Número 235 · Agosto 2019

  236. Número 236 · Agosto 2019

  237. Número 237 · Septiembre 2019

  238. Número 238 · Septiembre 2019

  239. Número 239 · Septiembre 2019

  240. Número 240 · Septiembre 2019

  241. Número 241 · Octubre 2019

  242. Número 242 · Octubre 2019

  243. Número 243 · Octubre 2019

  244. Número 244 · Octubre 2019

  245. Número 245 · Octubre 2019

  246. Número 246 · Noviembre 2019

  247. Número 247 · Noviembre 2019

  248. Número 248 · Noviembre 2019

  249. Número 249 · Noviembre 2019

  250. Número 250 · Diciembre 2019

  251. Número 251 · Diciembre 2019

  252. Número 252 · Diciembre 2019

  253. Número 253 · Diciembre 2019

  254. Número 254 · Enero 2020

  255. Número 255 · Enero 2020

  256. Número 256 · Enero 2020

  257. Número 257 · Febrero 2020

  258. Número 258 · Marzo 2020

  259. Número 259 · Abril 2020

  260. Número 260 · Mayo 2020

  261. Número 261 · Junio 2020

  262. Número 262 · Julio 2020

  263. Número 263 · Agosto 2020

  264. Número 264 · Septiembre 2020

  265. Número 265 · Octubre 2020

  266. Número 266 · Noviembre 2020

  267. Número 267 · Diciembre 2020

  268. Número 268 · Enero 2021

  269. Número 269 · Febrero 2021

  270. Número 270 · Marzo 2021

  271. Número 271 · Abril 2021

  272. Número 272 · Mayo 2021

  273. Número 273 · Junio 2021

  274. Número 274 · Julio 2021

  275. Número 275 · Agosto 2021

  276. Número 276 · Septiembre 2021

  277. Número 277 · Octubre 2021

  278. Número 278 · Noviembre 2021

  279. Número 279 · Diciembre 2021

  280. Número 280 · Enero 2022

  281. Número 281 · Febrero 2022

  282. Número 282 · Marzo 2022

  283. Número 283 · Abril 2022

  284. Número 284 · Mayo 2022

  285. Número 285 · Junio 2022

  286. Número 286 · Julio 2022

  287. Número 287 · Agosto 2022

  288. Número 288 · Septiembre 2022

  289. Número 289 · Octubre 2022

  290. Número 290 · Noviembre 2022

  291. Número 291 · Diciembre 2022

  292. Número 292 · Enero 2023

  293. Número 293 · Febrero 2023

  294. Número 294 · Marzo 2023

  295. Número 295 · Abril 2023

  296. Número 296 · Mayo 2023

  297. Número 297 · Junio 2023

  298. Número 298 · Julio 2023

  299. Número 299 · Agosto 2023

  300. Número 300 · Septiembre 2023

  301. Número 301 · Octubre 2023

  302. Número 302 · Noviembre 2023

  303. Número 303 · Diciembre 2023

  304. Número 304 · Enero 2024

  305. Número 305 · Febrero 2024

  306. Número 306 · Marzo 2024

  307. Número 307 · Abril 2024

  308. Número 308 · Mayo 2024

  309. Número 309 · Junio 2024

  310. Número 310 · Julio 2024

  311. Número 311 · Agosto 2024

  312. Número 312 · Septiembre 2024

  313. Número 313 · Octubre 2024

  314. Número 314 · Noviembre 2024

  315. Número 315 · Diciembre 2024

Ayúdanos a perseguir a quienes persiguen a las minorías. Total Donantes 3.675 Conseguido 99% Faltan 01.054€

Marco Romero Silva / Miembro de la Comisión para la Paz en Colombia

“La gente percibe que el Gobierno de Duque está acabando con un acuerdo que les prometía un futuro”

Andrea Ana Gálvez 19/11/2020

<p>Marco Romero Silva, en una imagen reciente.</p>

Marco Romero Silva, en una imagen reciente.

Martín Sánchez / Cedida por el entrevistado

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí

El 26 de septiembre se celebró el cuarto aniversario de la primera firma del Acuerdo de Paz más importante de la historia colombiana reciente, cuyo fin era acabar con el conflicto armado que lleva golpeando el país por más de cincuenta años. Representantes del equipo negociador del expresidente Santos y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP), líderes sociales, Naciones Unidas, estuvieron presentes en la 1ª Conferencia Internacional “El Mundo exige Paz” para hacer un balance de la implementación del Acuerdo con las FARC-EP.

La pandemia ha golpeado duro a CTXT. Si puedes, haz una donación aquí o suscríbete aquí 

CTXT conversó con Marco Romero, director de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento y Facilitador de Paz desde el Centro de Pensamiento y Seguimiento del Diálogo de Paz de la Universidad Nacional de Colombia y parte de la Comisión Facilitadora de Paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Se cumplen 4 años de la firma del Acuerdo de Paz con las FARC-EP, un marco inédito para encarar el conflicto armado colombiano. Sin embargo, la violencia persiste. ¿Qué otros grupos armados siguen activos en el país?

En los años noventa se desmovilizaron la mayoría de los grupos armados, quedó FARC-EP, ELN y una disidencia del Ejército Popular de Liberación (EPL). Después del acuerdo con las FARC, no se logró encadenar la negociación con ELN y otros grupos que era la expectativa que teníamos en el movimiento de paz. El ELN es una guerrilla mucho más pequeña que las FARC, pero que también cuenta con una historia de 50 años y se presenta como el único proyecto armado que queda en el país por lo que no es fácil de desactivar. La terminación del conflicto requiere resolver otros problemas que no dependen de la negociación con las FARC o con el ELN. Esto no quiere decir que las negociaciones sean irrelevantes.

¿Qué papel tiene el crimen organizado y el narcotráfico en la violencia actual de Colombia?

Las bandas criminales, que hay muchas, están creciendo y se están desarrollando en el país. Hay cada vez más bandas pragmáticas (cazadoras de rentas) no ligadas a guerras, aunque en Colombia es difícil establecer fronteras. Han entrado carteles de México, bandas de narcotráfico  que vienen amenazando gente por varios puntos del territorio. Todo eso existe, pero cada cosa hay que analizarla en su justa dimensión. Para el gobierno todo es narcotráfico porque eso le da réditos políticos. Si se resuelve la guerra se limita el campo de acción de los grupos ilegales porque el Estado cobra más legitimidad y tiene nuevos socios que antes estaban en la guerra, como ha ocurrido con las FARC.

Para enfrentar este tema, uno de los puntos fundamentales que recogió el Acuerdo es la reforma rural integral. ¿Cómo está este proceso?

El gobierno se decanta por las fumigaciones en los campos y los bombardeos, una solución que ya probó que no sirve porque no resuelve el problema, deja muchos muertos y mucha conflictividad

La idea fue darle al campesinado la oportunidad de tener una economía legal, sacarlos de las economías ligadas al narcotráfico. El narcotráfico son grupos armados y mafias globales, pero en Colombia hay un agregado: una crisis social-rural que tiene el campesinado sin alternativas. En el marco del Acuerdo se contempla un plan de acceso a tierras, la formalización para quien no tiene título de propiedad, un plan de salud y de educación rural, infraestructura en los campos, ayudas y estímulos económicos. Casi nada de eso se está implementando. El gobierno se decanta por las fumigaciones en los campos y los bombardeos, una solución que ya probó que no sirve porque no resuelve el problema, deja muchos muertos y mucha conflictividad. Si la gente no tiene una fuente económica alternativa va a depender de esas economías y se va a apoyar en cualquier grupo armado que exista en los territorios para defender su supervivencia. 

Las cifras de ACNUR muestran que en 2017 la violencia disminuyó y después se incrementó considerablemente en 2018; en 2019 se mantuvo intensa y el 2020 apunta a un mayor incremento de la violencia respecto al año anterior. ¿Cómo se explica esto?

La negociación con las FARC se hizo sin cese del fuego. El Estado consideraba que tenía que mantener presión militar para que la guerrilla no se levantara de la mesa y la guerrilla consideraba que tenía que tomar acciones fuertes para una mejor correlación de fuerzas en la mesa. Vimos muchos bombardeos, la propia muerte del dirigente de las FARC ocurrió en el marco de la negociación. 

Durante el diálogo hubo un fuerte incremento de la violencia y una crisis humanitaria grave. Cuando se cerró la negociación y se entregaron las armas, entramos en una etapa de “entusiasmo por la paz”, hubo una disminución de la violencia porque había mucha expectativa e intentos de negociación con otros grupos. Ahora subió otra vez porque existen disputas por territorios, hay un fortalecimiento de todos estas bandas y porque ya está claro que las negociaciones de paz con ellos no están tan cerca. Estamos en un momento de “desesperanza de la paz”.

¿Hay un patrón en el asesinato a liderazgos sociales?

La importancia política y social del asesinato de un líder o lideresa, no es la misma que el asesinato de un ciudadano corriente, la explicación es distinta. Hay sistematicidades en el asesinato de líderes sociales, el desafío ético es que el gobierno sea capaz de reconocer las distintas causas. Porque también hay asesinatos por agentes de Estado, por ejemplo, las zonas más militarizadas son las zonas en las que más muertes hay, o son incompetentes o forman parte del problema. Hay obviamente responsabilidades de guerrillas, de disidencias de las FARC, del ELN, y del EPL y hay situaciones de conflicto entre ellas sobre todo en la frontera con Venezuela. Hay también bandas paramilitares y narcotraficantes. Necesitamos discutir todo esto, hay que mirar todas las sistematicidades para reconocer la complejidad. En la medida que el gobierno es indiferente propicia la repetición de los fenómenos.

El presidente Iván Duque llegó al poder con un Acuerdo de Paz, ¿cómo está gestionando el conflicto?

El presidente Duque llegó al poder en representación del partido político que lideró una férrea oposición al proceso de paz durante la negociación y especialmente durante el referéndum popular que ganó el NO por un estrecho margen. Pero aun así, Duque recibe un Acuerdo de Paz firmado por el anterior jefe de Estado. Duque tuvo la gran oportunidad de implementar este acuerdo y crear un círculo virtuoso que propiciara otros procesos de diálogo de paz y pasar a la historia como el presidente que consolidó la paz. 

Pero está haciendo lo contrario y seguramente pasará a la historia como el único presidente que puso en riesgo un acuerdo de paz ya firmado. Su política es de implementación minimalista y el retorno a la política de seguridad de la era Uribe, que privilegia la lógica de la confrontación a la búsqueda de la paz. Insiste en estímulos a la Fuerza Pública, similares a los que, en el pasado, propiciaron los “falsos positivos”, al espionaje ilegal de la prensa, de los partidos de oposición y los defensores de derechos humanos y acciones militares como el bombardeo a campamentos donde las propias fuerzas armadas habían denunciado la presencia de menores de edad. 

Antes de la pandemia, Colombia venía de una fuerte expresión social en las calles. Recientemente volvimos a ver estas manifestaciones masivas. ¿Por qué la gente está reaccionando?

Duque pasará a la historia como el único presidente que puso en riesgo un acuerdo de paz ya firmado

La pandemia frenó las movilizaciones sociales en un primer momento, después se volvió a los términos anteriores. Parte de la movilización es por la paz. La gente percibe que el gobierno está acabando con un acuerdo que les prometía un futuro. 

Durante el conflicto, el gobierno decía que el líder social asesinado tenía vínculos con las FARC o con otros grupos armados. Entonces los liderazgos sociales eran asesinados con total impunidad y con la complacencia de la sociedad, que aceptaba la teoría de criminalizar a la víctima. En cambio, la paz, ha traído una ruptura de esa cultura. Se ha generalizado la idea de que asesinar líderes sociales es matar la defensa por los derechos, es matar a los defensores del agua y del medioambiente y a la democracia. 

¿Cuál es el papel de los jóvenes en la reacción social ante la violencia en Colombia?

Las nuevas generaciones llegaron a la vida pública dentro de la disputa y la discusión en torno  al Acuerdo de Paz, mientras que la generación anterior había llegado con el entusiasmo de la guerra de Uribe como forma de solucionar el conflicto. Esto explica las manifestaciones y las movilizaciones que estamos teniendo y esto es muy importante porque nos trae otras posibilidades. 

Uno de los puntos claves del Acuerdo fue el reconocimiento y compensación de las ocho millones de víctimas desplazadas de sus casas a causa del conflicto. ¿Está siendo efectivo el acceso a los derechos que les corresponden?

La propia Corte Constitucional de Colombia en 2004 llegó a la conclusión de que la gente desplazada tenía una ley pero que no se cumplía por parte de los gobiernos; la Corte la declaró “inconstitucional”. La sentencia de la Corte ordenó atender los mínimos vitales de los desplazados: salud, educación, vivienda.

¿Se está haciendo?

No. Hace 16 años la Corte dio la orden y aún no se ha cumplido para los desplazados. Te da una idea de lo raquítico que es el Estado colombiano para garantizar el mínimo vital, ya no digamos los derechos culturales y sociales. La Corte dice que cerca del 90% de los desplazados viven en la pobreza. Aunque se ha logrado mucho en materia de ayuda humanitaria –la salud, la educación, así sean de mala calidad–, están pendientes soluciones duraderas.

El Acuerdo contempla compensaciones a las víctimas, ¿el sistema de reparación está siendo efectivo? 

Colombia se ha comprometido a una indemnización a las víctimas que puede ser hasta de 10.000 dólares, esto es muy poco respecto de lo que la víctima perdió pero es una indemnización que ayuda a la gente. Hasta ahora se han entregado cerca de un millón de indemnizaciones. Esto quiere decir que faltan nueve millones de personas por indemnizar, no llegaron ni al 10%. En cuanto a la reparación colectiva, hay 750 sujetos que solicitaron la reparación colectiva (pueblos originarios, sindicatos, etc), y solo se han cerrado menos de 20. 

A miles de trabajadores rurales se les arrebató su tierra en el marco del conflicto armado. ¿Cómo evalúa la política de restitución de tierras que lleva a cabo Colombia?

La restitución de tierras está pensada para unas seis o siete millones de hectáreas de tierras despojadas o abandonadas en el marco del conflicto. De esa cifra, se han restituido 365.000 hectáreas. Es un sistema que se ha ido consolidando pero con unos tiempos muy lentos. 

¿Cómo evalúa las instituciones que se crearon en el marco del Acuerdo de Paz?

En el marco de verdad, justicia y reparación que ha creado el Acuerdo de Paz, digamos que las instituciones creadas como la JEP y la Comisión de la Verdad ya están consolidándose. Están funcionando, aunque lo hacen en medio del conflicto, esto establece unas limitaciones grandes. Por ejemplo, no pueden hacer una audiencia con las víctimas en cierto lugar porque toca hacerla en un recinto cerrado, toca proteger que no haya inteligencia criminal detrás de la reunión, toca evitar que maten a la gente cuando salga. Un ambiente de guerra es malísimo para la Comisión de la Verdad y para la tarea de la JEP, porque reproduce el miedo y es el miedo el que impide que la gente concurra a los escenarios.

La pandemia ha golpeado duro a CTXT. Si puedes, haz una donación aquí o suscríbete aquí 

El 26 de septiembre se celebró el cuarto aniversario de la primera firma del Acuerdo de Paz más importante de la historia colombiana reciente, cuyo fin era acabar con el conflicto armado que lleva golpeando el país por más de cincuenta años. Representantes del equipo negociador del expresidente Santos y de las...

Este artículo es exclusivo para las personas suscritas a CTXT. Puedes iniciar sesión aquí o suscribirte aquí

Autor >

Suscríbete a CTXT

Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias

Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí

Artículos relacionados >

Deja un comentario


Los comentarios solo están habilitados para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí