
Un mural en San Francisco reclama aumentar los impuestos a los ricos. / Romain Koenig
En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
La ONG Oxfam Intermón, una de las más activas en lo referente a cuestiones relacionadas con la desigualdad como problema a escala mundial, ha publicado un nuevo informe a este respecto, utilizando datos de UBS y en el marco de las sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El documento, titulado Multilateralismo en una era de oligarquía global, ofrece un dato que podría ser más que suficiente para tomar conciencia de la gravedad de la situación: el 1% más rico acumula una cantidad de riqueza mayor que la del 95% de la población mundial en su conjunto.
Este escandaloso desequilibrio responde, además, a unas lógicas concretas que desvían más y más recursos siempre hacia los mismos lugares del mundo. Estas “relaciones neocoloniales”, afirma el informe, “moldean las políticas de tal forma que se incrementa aún más la riqueza de los individuos ultrarricos, principalmente en el Norte Global, a expensas del Sur Global”. Así, el resultado es un panorama internacional en el que ese Sur Global, que conforma el 79% de la población mundial, dispone únicamente del 31% de la riqueza.
Uno de los instrumentos principales a la hora de perpetrar y mantener este expolio tiene que ver con la deuda. Según las cifras facilitadas por Oxfam, casi el 40% del presupuesto anual de los países de renta baja –cuyo conjunto conocemos como Sur Global– queda forzosamente destinado a lo que el informe denomina “servicio de la deuda”. Dicha cantidad supera en un 60% a las partidas presupuestarias que sostienen, en conjunto, los sistemas de educación, sanidad o protección social en estos países menos ricos.
Más de la mitad de la deuda que ahoga a las naciones de renta media y baja fue adquirida de manos de organizaciones privadas
Por si todo esto fuera poco, más de la mitad de esa deuda que ahoga a las naciones de renta media y baja fue adquirida de manos de organizaciones privadas, ya sean bancos o fondos de inversión. Esta segunda categoría incluye a los tristemente archiconocidos fondos buitre, cuya actividad consiste en especular con activos de todo tipo, comprando barato durante crisis o momentos de inestabilidad para enriquecerse después con operaciones que hacen mucho daño a las economías de aquellos Estados en los que actúan.
Más datos preocupantes. Algo menos de la mitad (43%) de la totalidad de los activos financieros a nivel mundial son propiedad del 1% más rico; el 40% del mercado internacional de semillas pertenece a tan solo dos multinacionales; y los tres grandes fondos de inversión de EEUU (BlackRock, State Street y Vanguard) gestionan casi un 20% de todos los activos de inversión del mundo.
Las consecuencias de todo ello son prácticamente inabarcables, pero el informe pone especial atención en lo que esta desigualdad galopante supone en lo referente a la crisis climática. Los y las autoras aseguran que “la influencia indebida de los ultrarricos y las empresas puede impedir soluciones multilaterales a problemas mundiales críticos”. Más concretamente, si una parte importante de los beneficios de este 1% absurdamente rico proceden de actividades con un gran impacto negativo en el planeta, su capacidad de influencia en la política internacional no hará otra cosa que obstaculizar la aprobación de medidas efectivas a la hora de combatir la urgencia ecológica.
Autor >
ctxt
Suscríbete a CTXT
Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias
Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí