Los cuidados realizados por profesionales en el hogar, la opción elegida para la dependencia
Hasta el 85% de la población sigue siendo cuidada por familiares. Las preferencias, sin embargo, han cambiado en los últimos años: ahora se opta más por profesionales como responsables de las tareas
CTXT / Observatorio Social La Caixa 16/04/2019
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Mujer mayor.
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Una población cada vez más mayor y una tasa de reemplazo que no alcanza para equilibrar la balanza demográfica. El debate sobre los cuidados y la dependencia lleva tiempo cristalizando en los países europeos. Pero también aquel que concierne a la propia configuración del Estado de bienestar, que va desde el sistema de pensiones a las medidas para asegurar una vejez saludable y de calidad. En este sentido, las diferencias en el continente son acusadas: en los modelos nórdicos, el sector público ordena el sistema, mientras que en el sur del continente la familia ha sido la principal red de protección. Sin embargo, en lugares como España las preferencias de la población sobre esta cuestión están cambiando, tal y como recoge el estudio ¿Qué espacios de vida y cuidados preferimos para afrontar la dependencia?, de la investigadora de la UNED Celia Fernández Carro.
De esta forma, si bien el hogar propio sigue siendo el espacio favorito para residir en caso de encontrarnos en situaciones de dependencia, la familia ha quedado relegada a un segundo plano como principal figura de cuidado. Ahora, la población se decanta por los cuidados profesionales remunerados para afrontar estas tareas.
Y se trata, además, de una percepción común a prácticamente todas las edades e independientemente de que sean hombres y mujeres. Para el 36% de la población, residir en el hogar propio junto con un cuidador profesional –privado o público– es la situación de cuidados más deseable; hacerlo con familiares, y que se ocupen de estas tareas, es la opción elegida por el 33%; la residencia o el centro de cuidado es la mejor situación para el 31%.
Solo entre las personas de entre 50 y 74 años cambia el patrón en la escala de preferencias, situando a la familia como la última opción más deseable. Para Celia Fernández, esto ocurre porque “se trata de un grupo especialmente consciente de los costes personales del cuidado”.
Pero no solo la edad y el sexo determinan las inclinaciones a la hora de elegir una modalidad de cuidados u otra. Para las personas de bajos ingresos, por ejemplo, la familia sigue representando el principal resguardo ante las situaciones de dependencia. También lo es para las personas que residen en zonas rurales o, incluso, que tienen una fuerte creencia religiosa. Por el lado contrario, las residencias se convierten en una opción apetecible para personas con buenos ingresos y pertenecientes a zonas urbanas.
A esto habría que añadir las propias experiencias personales y el contexto social y familiar en el que suceden, y que por ejemplo determinan los cambios en las preferencias del grupo de población de entre 50 y 75 años.
Pese a todo ello, los deseos y preferencias no siempre coinciden con las percepciones que tiene la población sobre las modalidades que consideran realmente más beneficiosas para su situación. De esta forma, cerca del 58% de personas que eligen vivir en el hogar propio con un cuidador profesional también aseguran que, para su entorno, lo mejor sería vivir con familiares. Es decir, aún perciben grandes diferencias entre el tipo ideal y la situación actual.
Los familiares son, además, los que más confianza despiertan, seguidos por amigos. El resto de figuras que se salen de esta red cercana obtienen puntuaciones bastante más bajas, incluidos los servicios públicos y privados. Su demanda, eso sí, cada vez es más alta, y está trasladando a la familia a un plano secundario o complementario en los cuidados.
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Este artículo ha sido elaborado a partir de lo expuesto en el texto ¿Qué espacios de vida y cuidados preferimos para afrontar la dependencia?, de Celia Fernández Carro, del Departamento de Sociología III de la Universidad Nacional de Educación a Distancia, publicado en el Observatorio Social de “la Caixa”.