1. Número 1 · Enero 2015

  2. Número 2 · Enero 2015

  3. Número 3 · Enero 2015

  4. Número 4 · Febrero 2015

  5. Número 5 · Febrero 2015

  6. Número 6 · Febrero 2015

  7. Número 7 · Febrero 2015

  8. Número 8 · Marzo 2015

  9. Número 9 · Marzo 2015

  10. Número 10 · Marzo 2015

  11. Número 11 · Marzo 2015

  12. Número 12 · Abril 2015

  13. Número 13 · Abril 2015

  14. Número 14 · Abril 2015

  15. Número 15 · Abril 2015

  16. Número 16 · Mayo 2015

  17. Número 17 · Mayo 2015

  18. Número 18 · Mayo 2015

  19. Número 19 · Mayo 2015

  20. Número 20 · Junio 2015

  21. Número 21 · Junio 2015

  22. Número 22 · Junio 2015

  23. Número 23 · Junio 2015

  24. Número 24 · Julio 2015

  25. Número 25 · Julio 2015

  26. Número 26 · Julio 2015

  27. Número 27 · Julio 2015

  28. Número 28 · Septiembre 2015

  29. Número 29 · Septiembre 2015

  30. Número 30 · Septiembre 2015

  31. Número 31 · Septiembre 2015

  32. Número 32 · Septiembre 2015

  33. Número 33 · Octubre 2015

  34. Número 34 · Octubre 2015

  35. Número 35 · Octubre 2015

  36. Número 36 · Octubre 2015

  37. Número 37 · Noviembre 2015

  38. Número 38 · Noviembre 2015

  39. Número 39 · Noviembre 2015

  40. Número 40 · Noviembre 2015

  41. Número 41 · Diciembre 2015

  42. Número 42 · Diciembre 2015

  43. Número 43 · Diciembre 2015

  44. Número 44 · Diciembre 2015

  45. Número 45 · Diciembre 2015

  46. Número 46 · Enero 2016

  47. Número 47 · Enero 2016

  48. Número 48 · Enero 2016

  49. Número 49 · Enero 2016

  50. Número 50 · Febrero 2016

  51. Número 51 · Febrero 2016

  52. Número 52 · Febrero 2016

  53. Número 53 · Febrero 2016

  54. Número 54 · Marzo 2016

  55. Número 55 · Marzo 2016

  56. Número 56 · Marzo 2016

  57. Número 57 · Marzo 2016

  58. Número 58 · Marzo 2016

  59. Número 59 · Abril 2016

  60. Número 60 · Abril 2016

  61. Número 61 · Abril 2016

  62. Número 62 · Abril 2016

  63. Número 63 · Mayo 2016

  64. Número 64 · Mayo 2016

  65. Número 65 · Mayo 2016

  66. Número 66 · Mayo 2016

  67. Número 67 · Junio 2016

  68. Número 68 · Junio 2016

  69. Número 69 · Junio 2016

  70. Número 70 · Junio 2016

  71. Número 71 · Junio 2016

  72. Número 72 · Julio 2016

  73. Número 73 · Julio 2016

  74. Número 74 · Julio 2016

  75. Número 75 · Julio 2016

  76. Número 76 · Agosto 2016

  77. Número 77 · Agosto 2016

  78. Número 78 · Agosto 2016

  79. Número 79 · Agosto 2016

  80. Número 80 · Agosto 2016

  81. Número 81 · Septiembre 2016

  82. Número 82 · Septiembre 2016

  83. Número 83 · Septiembre 2016

  84. Número 84 · Septiembre 2016

  85. Número 85 · Octubre 2016

  86. Número 86 · Octubre 2016

  87. Número 87 · Octubre 2016

  88. Número 88 · Octubre 2016

  89. Número 89 · Noviembre 2016

  90. Número 90 · Noviembre 2016

  91. Número 91 · Noviembre 2016

  92. Número 92 · Noviembre 2016

  93. Número 93 · Noviembre 2016

  94. Número 94 · Diciembre 2016

  95. Número 95 · Diciembre 2016

  96. Número 96 · Diciembre 2016

  97. Número 97 · Diciembre 2016

  98. Número 98 · Enero 2017

  99. Número 99 · Enero 2017

  100. Número 100 · Enero 2017

  101. Número 101 · Enero 2017

  102. Número 102 · Febrero 2017

  103. Número 103 · Febrero 2017

  104. Número 104 · Febrero 2017

  105. Número 105 · Febrero 2017

  106. Número 106 · Marzo 2017

  107. Número 107 · Marzo 2017

  108. Número 108 · Marzo 2017

  109. Número 109 · Marzo 2017

  110. Número 110 · Marzo 2017

  111. Número 111 · Abril 2017

  112. Número 112 · Abril 2017

  113. Número 113 · Abril 2017

  114. Número 114 · Abril 2017

  115. Número 115 · Mayo 2017

  116. Número 116 · Mayo 2017

  117. Número 117 · Mayo 2017

  118. Número 118 · Mayo 2017

  119. Número 119 · Mayo 2017

  120. Número 120 · Junio 2017

  121. Número 121 · Junio 2017

  122. Número 122 · Junio 2017

  123. Número 123 · Junio 2017

  124. Número 124 · Julio 2017

  125. Número 125 · Julio 2017

  126. Número 126 · Julio 2017

  127. Número 127 · Julio 2017

  128. Número 128 · Agosto 2017

  129. Número 129 · Agosto 2017

  130. Número 130 · Agosto 2017

  131. Número 131 · Agosto 2017

  132. Número 132 · Agosto 2017

  133. Número 133 · Septiembre 2017

  134. Número 134 · Septiembre 2017

  135. Número 135 · Septiembre 2017

  136. Número 136 · Septiembre 2017

  137. Número 137 · Octubre 2017

  138. Número 138 · Octubre 2017

  139. Número 139 · Octubre 2017

  140. Número 140 · Octubre 2017

  141. Número 141 · Noviembre 2017

  142. Número 142 · Noviembre 2017

  143. Número 143 · Noviembre 2017

  144. Número 144 · Noviembre 2017

  145. Número 145 · Noviembre 2017

  146. Número 146 · Diciembre 2017

  147. Número 147 · Diciembre 2017

  148. Número 148 · Diciembre 2017

  149. Número 149 · Diciembre 2017

  150. Número 150 · Enero 2018

  151. Número 151 · Enero 2018

  152. Número 152 · Enero 2018

  153. Número 153 · Enero 2018

  154. Número 154 · Enero 2018

  155. Número 155 · Febrero 2018

  156. Número 156 · Febrero 2018

  157. Número 157 · Febrero 2018

  158. Número 158 · Febrero 2018

  159. Número 159 · Marzo 2018

  160. Número 160 · Marzo 2018

  161. Número 161 · Marzo 2018

  162. Número 162 · Marzo 2018

  163. Número 163 · Abril 2018

  164. Número 164 · Abril 2018

  165. Número 165 · Abril 2018

  166. Número 166 · Abril 2018

  167. Número 167 · Mayo 2018

  168. Número 168 · Mayo 2018

  169. Número 169 · Mayo 2018

  170. Número 170 · Mayo 2018

  171. Número 171 · Mayo 2018

  172. Número 172 · Junio 2018

  173. Número 173 · Junio 2018

  174. Número 174 · Junio 2018

  175. Número 175 · Junio 2018

  176. Número 176 · Julio 2018

  177. Número 177 · Julio 2018

  178. Número 178 · Julio 2018

  179. Número 179 · Julio 2018

  180. Número 180 · Agosto 2018

  181. Número 181 · Agosto 2018

  182. Número 182 · Agosto 2018

  183. Número 183 · Agosto 2018

  184. Número 184 · Agosto 2018

  185. Número 185 · Septiembre 2018

  186. Número 186 · Septiembre 2018

  187. Número 187 · Septiembre 2018

  188. Número 188 · Septiembre 2018

  189. Número 189 · Octubre 2018

  190. Número 190 · Octubre 2018

  191. Número 191 · Octubre 2018

  192. Número 192 · Octubre 2018

  193. Número 193 · Octubre 2018

  194. Número 194 · Noviembre 2018

  195. Número 195 · Noviembre 2018

  196. Número 196 · Noviembre 2018

  197. Número 197 · Noviembre 2018

  198. Número 198 · Diciembre 2018

  199. Número 199 · Diciembre 2018

  200. Número 200 · Diciembre 2018

  201. Número 201 · Diciembre 2018

  202. Número 202 · Enero 2019

  203. Número 203 · Enero 2019

  204. Número 204 · Enero 2019

  205. Número 205 · Enero 2019

  206. Número 206 · Enero 2019

  207. Número 207 · Febrero 2019

  208. Número 208 · Febrero 2019

  209. Número 209 · Febrero 2019

  210. Número 210 · Febrero 2019

  211. Número 211 · Marzo 2019

  212. Número 212 · Marzo 2019

  213. Número 213 · Marzo 2019

  214. Número 214 · Marzo 2019

  215. Número 215 · Abril 2019

  216. Número 216 · Abril 2019

  217. Número 217 · Abril 2019

  218. Número 218 · Abril 2019

  219. Número 219 · Mayo 2019

  220. Número 220 · Mayo 2019

  221. Número 221 · Mayo 2019

  222. Número 222 · Mayo 2019

  223. Número 223 · Mayo 2019

  224. Número 224 · Junio 2019

  225. Número 225 · Junio 2019

  226. Número 226 · Junio 2019

  227. Número 227 · Junio 2019

  228. Número 228 · Julio 2019

  229. Número 229 · Julio 2019

  230. Número 230 · Julio 2019

  231. Número 231 · Julio 2019

  232. Número 232 · Julio 2019

  233. Número 233 · Agosto 2019

  234. Número 234 · Agosto 2019

  235. Número 235 · Agosto 2019

  236. Número 236 · Agosto 2019

  237. Número 237 · Septiembre 2019

  238. Número 238 · Septiembre 2019

  239. Número 239 · Septiembre 2019

  240. Número 240 · Septiembre 2019

  241. Número 241 · Octubre 2019

  242. Número 242 · Octubre 2019

  243. Número 243 · Octubre 2019

  244. Número 244 · Octubre 2019

  245. Número 245 · Octubre 2019

  246. Número 246 · Noviembre 2019

  247. Número 247 · Noviembre 2019

  248. Número 248 · Noviembre 2019

  249. Número 249 · Noviembre 2019

  250. Número 250 · Diciembre 2019

  251. Número 251 · Diciembre 2019

  252. Número 252 · Diciembre 2019

  253. Número 253 · Diciembre 2019

  254. Número 254 · Enero 2020

  255. Número 255 · Enero 2020

  256. Número 256 · Enero 2020

  257. Número 257 · Febrero 2020

  258. Número 258 · Marzo 2020

  259. Número 259 · Abril 2020

  260. Número 260 · Mayo 2020

  261. Número 261 · Junio 2020

  262. Número 262 · Julio 2020

  263. Número 263 · Agosto 2020

  264. Número 264 · Septiembre 2020

  265. Número 265 · Octubre 2020

  266. Número 266 · Noviembre 2020

  267. Número 267 · Diciembre 2020

  268. Número 268 · Enero 2021

  269. Número 269 · Febrero 2021

  270. Número 270 · Marzo 2021

  271. Número 271 · Abril 2021

  272. Número 272 · Mayo 2021

  273. Número 273 · Junio 2021

  274. Número 274 · Julio 2021

  275. Número 275 · Agosto 2021

  276. Número 276 · Septiembre 2021

  277. Número 277 · Octubre 2021

  278. Número 278 · Noviembre 2021

  279. Número 279 · Diciembre 2021

  280. Número 280 · Enero 2022

  281. Número 281 · Febrero 2022

  282. Número 282 · Marzo 2022

  283. Número 283 · Abril 2022

  284. Número 284 · Mayo 2022

  285. Número 285 · Junio 2022

  286. Número 286 · Julio 2022

  287. Número 287 · Agosto 2022

  288. Número 288 · Septiembre 2022

  289. Número 289 · Octubre 2022

  290. Número 290 · Noviembre 2022

  291. Número 291 · Diciembre 2022

  292. Número 292 · Enero 2023

  293. Número 293 · Febrero 2023

  294. Número 294 · Marzo 2023

  295. Número 295 · Abril 2023

  296. Número 296 · Mayo 2023

  297. Número 297 · Junio 2023

  298. Número 298 · Julio 2023

  299. Número 299 · Agosto 2023

  300. Número 300 · Septiembre 2023

  301. Número 301 · Octubre 2023

  302. Número 302 · Noviembre 2023

  303. Número 303 · Diciembre 2023

  304. Número 304 · Enero 2024

  305. Número 305 · Febrero 2024

  306. Número 306 · Marzo 2024

  307. Número 307 · Abril 2024

  308. Número 308 · Mayo 2024

  309. Número 309 · Junio 2024

  310. Número 310 · Julio 2024

  311. Número 311 · Agosto 2024

  312. Número 312 · Septiembre 2024

  313. Número 313 · Octubre 2024

  314. Número 314 · Noviembre 2024

Ayúdanos a perseguir a quienes persiguen a las minorías. Total Donantes 3.340 Conseguido 91% Faltan 16.270€

DISCRIMINACIÓN

¿Es suficiente el acto heroico de Josh Cavallo?

La decisión del futbolista australiano de confesar su homosexualidad, el único en activo que ha dado ese paso, debería venir acompañada de un compromiso público de otros deportistas y de las instituciones en contra de la homofobia

Ricardo Uribarri 12/11/2021

<p>El jugador del Adelaide United, Josh Cavallo.</p>

El jugador del Adelaide United, Josh Cavallo.

@ joshua.cavallo

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí

“No pasa nada por ser tú mismo y jugar al fútbol. No pasa nada por ser gay y jugar al fútbol. Quiero demostrárselo a toda la gente que lo pasa mal y está asustada”. Con esa motivación, el australiano Joshua Cavallo, jugador de 21 años del Adelaide United, anunció públicamente el pasado 27 de octubre su condición de homosexual, convirtiéndose en el único futbolista profesional en activo que ha dado este paso, sin duda importante para un colectivo que no tiene referentes en este ámbito. Tener el valor de contar su realidad, que él mismo confiesa que le ha costado seis años, le ha supuesto recibir muestras de apoyo de numerosos compañeros de profesión y clubes de todo el mundo pero, ¿hasta qué punto puede ser trascendente este gesto? ¿Servirá realmente para animar a otros a hacerlo y cambiar vidas, como cree una referente del colectivo, la jugadora Pernille Harder, o hace falta algo más?

En pleno siglo XXI, son escasos los espacios profesionales donde los homosexuales no tienen visibilidad. El fútbol masculino es uno de ellos. Hay pocos casos de jugadores que se hayan atrevido a salir del armario y la gran mayoría de ellos lo reconocieron cuando ya se habían retirado. Pero que no lo digan no significa que no los haya. El propio Cavallo afirma que “como futbolista gay, sé que hay otros jugadores que viven en silencio. Quiero ayudar a cambiar esto, para demostrar que todos son bienvenidos en el fútbol y merecen el derecho a ser auténticos”. ¿Por qué no se atreven a dar el paso? Principalmente, por miedo a que ese reconocimiento tenga un impacto negativo en su vida y también en su carrera, que se desarrolla durante un tiempo relativamente corto de tiempo.

Las personas referentes en el deporte tendrían que hacer un compromiso público contra la LGTBIfobia

Víctor Granado, presidente de la Agrupación Deportiva Ibérica LGTBI+ (ADI), que agrupa a la mayoría de los clubes deportivos de carácter LGTBI+ de España y Portugal, considera que el anuncio de Cavallo “ayuda sobre todo a que otras personas LGTBI+ no perciban el deporte y su ámbito como un espacio hostil y puede ser beneficioso para empoderarlas, animarlas a poder formar parte de estos espacios y a vivir de una manera libre su orientación o su identidad de género. Es un hecho aislado muy importante para esta persona y porque señala un déficit que hay, pero que debería venir acompañado de otro tipo de circunstancias”. Además, el presidente de ADI LGTBI+ añade que “siempre le pedimos a las personas LGTBI+ que se visibilicen y creo que primero habría que pedir a la ciudadanía en su conjunto y en concreto a las personas que son referentes en el mundo del deporte, es que hagan un compromiso público contra la LGTBIfobia como se hace contra el racismo y la xenofobia”. 

De ahí que Granado de mucha relevancia a que equipos como el Barcelona, Liverpool, Juventus y Arsenal, instituciones como la Premier League, entrenadores como Klopp, y futbolistas como Gerard Piqué, Griezmann, De Gea, Ibrahimovic, Rashford, Varane y Giroud, entre otros, hayan respaldado con mensajes públicos la confesión de Cavallo. “Eso tiene una enorme trascendencia, porque de alguna manera mandan el mensaje de que esto no es algo heroico que hace una persona sola y aislada, sino que hay un compromiso de la sociedad en general contra la LGTBIfobia”, dice, aunque considera que deberían ser más las personalidades que mandaran este tipo de mensajes. “Si eso sucede, aumenta y se hace constante, va a suponer un antes y un después en la situación. Si un montón de personas referentes del mundo del deporte, como por ejemplo, Sergio Ramos, Rafa Nadal, Carolina Marín o Mireia Belmonte, hicieran una campaña diciendo que no hay derecho a la LGTBIfobia en el deporte, ayudaría a que personas LGTBI+ pudieran visibilizarse en espacios que se perciben como peligrosos”, añade.

Se podría pensar que los valores éticos que normalmente se asocian al deporte y al olimpismo serían suficientes para contrarrestar la homofobia, pero el representante de ADI LGTBI+, cree que “no es suficiente” y que “las instituciones, las entidades, las federaciones, el gobierno estatal y los autonómicos, deberían adoptar una actitud de compromiso e impulsar campañas que visibilicen a las personas LGTBI+ y sus derechos en el mundo del deporte”. Actos como el de Joshua, recuerda Granado, “deberían venir acompañados de un cambio en lo que es el deporte, que es un espacio social importante. Es algo que por sí solo no va a suceder, porque hay intereses económicos, inercias, vergüenzas, problemas… y a lo mejor uno a nivel individual, aunque lo piense y esté de acuerdo, no decide dar el paso de denunciar esto. Es mucho más fácil si hay una estructura y un movimiento social que visibiliza que esto no es algo individual sino un compromiso colectivo por los derechos humanos de una parte de la sociedad”.

Desde que Joshua hiciera el anuncio, se han leído opiniones de gente que considera que no es necesario hacer este tipo de confesiones, porque la verdadera normalidad es que cada uno haga lo que quiera sin tener que decir si es una cosa u otra. Un planteamiento que Granado rebate de la siguiente manera. “La posición de la gente que dice eso es tan antigua como la tradicional que se mantenía sobre este asunto, por ejemplo, en el ejército estadounidense, con la política del ‘no lo cuentes, no preguntes’. Tiene que ver con una concepción de los espacios muy concreta, que es la de para que tengamos los mismos derechos y nos tratemos igual tienes que parecer idéntico a los demás y ocultar una parte de tu realidad y de tu vida. Siempre hay gente que dice ‘¿pero a quién le importa mi vida personal?’. Es importante porque hay una diferencia y es un tipo de discriminación a veces autoimpuesta cuando te prohíbes a ti mismo el hablar de tu vida personal y no actuar con la misma naturalidad que actúan otras personas”. 

Granado está convencido de que el verse obligado a esconder la realidad puede llegar a influir en los resultados de un deportista. “Las personas que dicen que esto no es relevante, no se están dando cuenta de su posición de privilegio y de hasta qué punto la discriminación y a veces la LGTBIfobia interiorizada tiene un impacto en el rendimiento deportivo. Si yo todo el rato tengo la impresión de que estoy a punto de ser descubierto, que soy algo así como un impostor, de que mi situación personal o profesional va a cambiar si alguien conoce mi realidad, igual esa presión sumada a la presión que comparto con las demás personas que compiten en el mismo deporte que yo, supone una merma en el rendimiento”, afirma el presidente del ADI, que defiende que “normalmente, quien dice eso no se da cuenta de la discriminación que hay en la base de no poder vivir con naturalidad y hablar de lo mismo que hablan los demás”.

Un aspecto común entre los deportistas que deciden contar que son homosexuales es el reconocimiento de que se han quitado un gran peso de encima, de sentirse mucho mejor de como estaban antes. El propio Cavallo confiesa que “ahora es como si jugase con 100 kilos menos a la espalda”, al mismo tiempo que confiesa algo que puede animar a aquellos que no se atreven a dar el paso. “Pensaba que la gente me vería de otra manera cuando se enterasen, que empezarían a tratarme de otra forma. Que empezarían a decir cosas malas de mí, pero no ha sido así. En todo caso, tienes más respeto de la gente”. Sin embargo, Granado no cree que las cosas sean así de positivas en todos los casos. “Muchas veces estos anuncios se hacen cuando los deportistas ya se han retirado de la competición y por eso el caso de Carvallo es relevante, porque es alguien que sigue en activo. Es verdad que contarlo es liberador, y yo me alegro muchísimo de que él haya tenido una visión feliz de esta manera de hacer pública su orientación sexual, pero no siempre es así o no en todos los sectores de la sociedad es así y por eso debería estar acompañado de normas y reglas claras que defiendan a las personas y a la diversidad social frente a la discriminación que pueda haber”.

Uno de los lamentos que ha dejado el jugador australiano en estos últimos días es el que hace referencia a que, si en una gran mayoría de ámbitos de la sociedad es totalmente normal la presencia de gays, por qué no puede ser igual en el fútbol. Al respecto, el representante de ADI LGTBI+ recuerda un episodio triste ocurrido hace años que, en su opinión, puede tener incidencia en la actualidad. Tiene que ver con el jugador inglés, Justin Fashanu, que en 1990 se convirtió en el primer futbolista de cierto renombre que confesó ser homosexual, lo que le costó ser tratado con hostilidad y recibir una acusación de agresión sexual por parte de un chico de 17 años que no llegó a nada por falta de pruebas, pero que provocó que Fashanu se suicidara meses después al considerar que ‘ya había sido declarado culpable por la sociedad’. 

Muchas veces el fútbol se ha asociado con una forma de entender la expresión de la violencia

“Lo que sucedió con Fashanu sentó un precedente negativo en la memoria de mucha gente cuando se piensa en dar el paso”, dice Granado. “Es verdad que es un espacio donde es difícil encontrar a muchas personas visibles del colectivo. ¿Por qué? Pues probablemente porque muchas veces el fútbol se ha asociado con una forma de entender la expresión de la violencia, sobre todo verbal, pero a veces no solo verbal, y ha estado legitimada y normalizada socialmente. En los estadios encontramos a personas que entienden como lo habitual y lo posible insultar a todo el mundo”, afirma. Sin embargo, el presidente de ADI LGTBI+ considera que “frente al racismo y la xenofobia se ha ido haciendo un trabajo que no se ha hecho en otros ámbitos”. 

Pese a los pasos que se están dando en ese sentido, Granado apunta que hay otras circunstancias que hacen que, para muchos futbolistas, sea complicado dar el paso que ha dado Cavallo. “Por ejemplo que haya equipos que son propiedad de estados árabes donde la homosexualidad se castiga con penas de prisión o de muerte y que se lleguen a acuerdos comerciales con empresas vinculadas con esos mismos territorios. Puede pasar que un futbolista que haya dado el paso de ser una persona LGTBI visible tenga que ir a países como Arabia Saudí a disputar la Supercopa de España o a Catar a jugar el Mundial. Al final, el fútbol espectáculo es un gran negocio en el que hay que tener en cuenta cómo va a afectar esto a mi imagen, cómo va a repercutir esto en el patrocinio o cómo va a responder la afición en las gradas. Este tipo de cosas también influyen y hacen que sea complicado”, afirma.

Joshua contó en una entrevista en el diario Marca que cree que “en tres o cuatro años la gente ya no va a necesitar hacer esto porque va a estar normalizado”. Víctor, sin embargo, no está tan seguro de cuándo puede hacerse realidad ese supuesto, pero sí tiene claro el camino para lograrlo. “No sé si va a ser en tres años, en menos o en más. Los colectivos que defendemos la inclusión en el deporte trabajamos para cambiar las cosas y para que mejoren. Creo que hay un proceso social que hay que defender porque no está garantizado y es el reconocimiento de los derechos humanos de todas las personas. Pasos como el de Cavallo y otros, de la mano de las instituciones, ayudan a que ese terreno ganado se mantenga y se consolide, pero hay que trabajar y mantener el esfuerzo para transformar de verdad la forma de ver la vida y la sociedad”, afirma el presidente de la ADI LGTBI+, que espera que “esto no sea flor de un día y que dentro de unos años no tengamos que lamentar insultos LGTBIfóbicos, como sucede hoy en categorías inferiores y en espacios deportivos de todo tipo. Ojalá que la gente pueda vivir el deporte de una forma mucho más positiva”. 

“No pasa nada por ser tú mismo y jugar al fútbol. No pasa nada por ser gay y jugar al fútbol. Quiero demostrárselo a toda la gente que lo pasa mal y está asustada”. Con esa motivación, el australiano Joshua Cavallo, jugador de 21 años del Adelaide United, anunció públicamente el pasado 27 de octubre su...

Este artículo es exclusivo para las personas suscritas a CTXT. Puedes iniciar sesión aquí o suscribirte aquí

Autor >

Ricardo Uribarri

Periodista. Empezó a cubrir la información del Atleti hace más de 20 años y ha pasado por medios como Claro, Radio 16, Época, Vía Digital, Marca y Bez. Actualmente colabora con XL Semanal y se quita el mono de micrófono en Onda Madrid.

Suscríbete a CTXT

Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias

Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí

Artículos relacionados >

Deja un comentario


Los comentarios solo están habilitados para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí