los domingos
Sobre el peso
El compromiso, esa palabra tan sencilla, no deja de ser el peso de millones de cuerpos
Guillem Martínez 3/09/2023
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En el peso total de una persona adulta, una cantidad que va entre dos y tres kilos corresponden a microorganismos. Viven, fundamentalmente, en nuestro sistema digestivo, y desarrollan funciones fundamentales para nuestra existencia, al punto de que, sin esos seres vivos en nuestro interior, no habría vida, no seríamos, no existiríamos. Lo que indica que esos seres no son ajenos a nosotros. Puede que no solo sean parte de nosotros, sino que sean, incluso, algo mucho más profundo: son tan íntimos y apegados a nosotros que son nosotros, que forman la palabra nosotros. Lo que implica algo fabuloso. Nosotros, tú, yo, somos individuos, innegablemente. Pero estamos formados por millones y millones de seres, con los que tenemos una relación tan estrecha, tan próxima, tan interna, que no dudamos en integrarlos en nuestro peso. Cuando alguien nos pregunta por nuestro peso, no descontamos esos dos o tres kilos, sino que, sencillamente, integramos todo ese peso en el nuestro, con suma naturalidad, sin planteárnoslo. Esa facilidad extrema con la que asumimos, sin pensarlo, esos dos o tres kilos, nos lleva a otra gran pregunta, aún más intensa. Si hemos asumido el peso de millones de seres, que nunca veremos, como parte de nosotros, ¿qué más, a quién más hemos asumido en nuestro peso e interior? Cuando caminamos transportando esos dos-tres kilos ya asumidos, ¿cuántos kilos más transportamos, también sin percibirlo? ¿Decenas de kilos? ¿Cientos? ¿Miles? ¿Millones? Piénsalo. Yo lo pienso. Transporto palabras que escuché en la niñez, por lo que, de alguna manera, transporto a las personas que las pronunciaron. Ahora mismo, al escribir esto, mis dedos sobre el teclado soportan el peso de un anciano, y de las palabras que dijo a otra persona, pero que yo escuché, en mi infancia, y que me demostraron que todos somos absolutamente iguales. Absolutamente iguales, repitió, como yo lo hago ahora, agregando el peso de su cuerpo sobre mí, lo que lo hace más difícil. Transporto coches repletos de nosotros, en los que vi y oí. Transporto a mi madre mientras ella me transporta por las calles, agarrado a su mano, mientras contemplamos personas pidiendo limosna y ella me habla de la vida y de la pobreza, esa cosa que nunca acabará, me dice, pero que nos pone a prueba cada día.
Ella me habla de la vida y de la pobreza, esa cosa que nunca acabará, me dice, pero que nos pone a prueba cada día
Transporto una máquina con la que me destrozaba la mano. Una profesora, a quien transporto, y a quien le interesó mi mano herida, me preguntaba por mis heridas, y yo le decía que no eran nada. Transporto noches en las que, de pronto, se produjo la epifanía y entendí el mundo. La transporto a ella, a sus piernas de mármol y, sin embargo, ingrávidas, de las bailarinas, así como el peso inaudito y descomunal, casi imposible de transportar, de su aroma. El compromiso, esa palabra tan sencilla, no deja de ser el peso de millones de cuerpos. Cada decisión no es más que incorporar los cuerpos de las personas que, en el tiempo, las tomaron. Todas esas personas, mayormente desconocidas, son tan íntimas y apegadas a nosotros que son nosotros, que forman la palabra nosotros. Lo que implica algo fabuloso. Nosotros, tú, yo, somos individuos, innegablemente. Pero estamos formados por millones y millones de seres, con los que tenemos una relación tan estrecha, tan próxima, tan interna, que no dudamos en integrarlos en nuestro peso. Cuando alguien nos pregunta por nuestro peso, no descontamos todo ese peso.
En el peso total de una persona adulta, una cantidad que va entre dos y tres kilos corresponden a microorganismos. Viven, fundamentalmente, en nuestro sistema digestivo, y desarrollan funciones fundamentales para nuestra existencia, al punto de que, sin esos seres vivos en nuestro interior, no habría...
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Guillem Martínez
Es autor de 'CT o la cultura de la Transición. Crítica a 35 años de cultura española' (Debolsillo), de '57 días en Piolín' de la colección Contextos (CTXT/Lengua de Trapo), de 'Caja de brujas', de la misma colección y de 'Los Domingos', una selección de sus artículos dominicales (Anagrama). Su último libro es 'Como los griegos' (Escritos contextatarios).
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