Privatización
El fútbol argentino se rebela contra Milei
Más de cien equipos defienden su carácter de asociaciones sin ánimo de lucro en contra del deseo del nuevo presidente ultra de abrir las puertas a las sociedades anónimas deportivas
Ricardo Uribarri 23/11/2023
En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
Uno de los colectivos profesionales de Argentina que ha recibido con más preocupación la elección de Javier Milei como nuevo presidente del país es el del fútbol. El motivo es el deseo expresado por el máximo dirigente de la formación política La Libertad Avanza de que los clubes dejen de ser asociaciones civiles sin ánimo de lucro para que se conviertan en sociedades anónimas deportivas, una posibilidad contra la que en los últimos días se han manifestado más de cien equipos, desde los más famosos, como River Plate y Boca Juniors, hasta los de segunda categoría, además de numerosos exjugadores argentinos. Su mensaje es claro: la pasión no se privatiza. Un clamor que contrasta con un silencio significativo: el de los pocos futbolistas en activo que se han manifestado al respecto, incluidos los de la actual selección albiceleste.
En distintas entrevistas realizadas en los últimos meses, Milei ha dejado clara su postura de impulsar esta transformación en los clubes una vez que fuera elegido, poniendo el ejemplo de lo que ocurre en otros países: “A mí me gusta el modelo inglés. No les va mal. Tienen clubes que cotizan en bolsa y todo (…) ¿A vos que carajo te importa de quién es el club si le ganáis a River 5-0 y eres campeón del mundo y todo? ¿O preferís seguir en esta miseria que tenemos, cada vez con fútbol de peor calidad? ¿Cómo nos va cada vez que salimos fuera de la Argentina?”. Una teoría que reafirmó hace escasas fechas, justo antes de la segunda vuelta de las elecciones: “¿Por qué restringir la posibilidad de tener clubes que sean sociedades anónimas? ¿Qué pasa si alguien quiere que su club sea como el Manchester City? ¿Cuál es el problema? ¿En que afecta a las otras instituciones?” Aunque viendo el rechazo que ha provocado la propuesta en el sector, matizó posteriormente que “no obligo a nadie, los clubes también podrían seguir como hasta ahora. ¿Pero tiene que haber un solo esquema de estructura societaria?”
Lo que parece evidente es que la gran mayoría de los clubes argentinos no quieren que haya una puerta abierta a esa opción. Así lo manifestaron en los comunicados que hicieron públicos en redes sociales. El de Boca Juniors decía: “Fiel a sus orígenes, respetuoso de los claros principios defendidos durante casi 120 años, Boca Juniors ratifica su carácter de Asociación Civil sin fines de lucro y la premisa de que nuestro club es de su gente, socios y socias que lo vuelven cada día más grande”. Otra institución importante del fútbol del país, River Plate, señaló que “siguiendo el espíritu de nuestros fundadores, rechazamos a las sociedades anónimas en el fútbol argentino. El Club Atlético River Plate es una Asociación Civil sin fines de lucro y siempre será de sus socios y socias, que son el sustento de estos 122 años de grandeza”. Newell’s Old Boys ratificó “su posición histórica: la institución es de sus socios y socias. En tal sentido, nos pronunciamos enfáticamente en contra de las sociedades anónimas deportivas en el fútbol argentino”. Y en similares términos se han pronunciado hasta un centenar de equipos.
Para muchos argentinos, los clubes son algo más que un equipo de fútbol al que ir a ver cada 15 días, son entidades que aportan bienestar a la comunidad
El organismo que los agrupa a todos ellos, la Liga Profesional de Fútbol, emitió un comunicado donde resaltaba que “las instituciones pertenecen a aquellos que sostienen con sus aportes el funcionamiento de sus instalaciones, enalteciendo aquella vieja pero tan vigente frase: ‘El club es los socios’. Los clubes de fútbol no nacieron para generar negocios y ganancias para personas que ven en ellos una fuente comercial de ingresos para sus bolsillos personales, sino que vieron la luz para aportarle a la sociedad servicios que en otros sectores no encuentra. Las entidades funcionan como diques de contención de miles y miles de chicos y chicas y adolescentes que son rescatados de la calle para insertarlos en el mundo de la vida sana, de los deportes y hasta de la educación primaria, secundaria y hasta terciaria”. Argentina es uno de los pocos países en Sudamérica, junto a Ecuador y Paraguay, que mantienen a todos sus clubes de fútbol como asociaciones civiles. En el resto, conviven los dos modelos, los que siguen en manos de los socios y los que son propiedad de particulares. El estatuto actual de la Asociación de Fútbol Argentina (AFA) estipula que los clubes únicamente pueden ser asociaciones civiles sin fines de lucro.
En este sentido, conviene resaltar que, para muchos argentinos, los clubes son algo más que un simple equipo de fútbol al que ir a ver cada 15 días, son entidades que aportan bienestar a la comunidad. Sus instalaciones se convierten en centros sociales, en lugares de reunión en los barrios que dan servicio a los aficionados y a los vecinos. Allí pueden realizar actividades deportivas y culturales para pequeños y mayores, y reciben apoyo en asuntos relacionados con salud, educación, discapacidad e integración, además de ayuda para los necesitados, como sucedió durante la pandemia. Un ejemplo: el club bonaerense Vélez Sarsfield cuenta con más de 60 actividades deportivas y culturales y una institución educativa que convive con el deporte profesional. Y así muchos otros. Unos servicios que muchos temen perder si las entidades pasan a ser sociedades anónimas.
Ese aspecto viene recogido en el comunicado realizado por exfutbolistas, entre los que están campeones del mundo como el Pato Fillol, Jorge Olguín y el Negro Enrique, y algunos jugadores y jugadoras en activo, que también se han mostrado en contra de la intención de Milei. En uno de los párrafos se puede leer: “Con mayor preocupación observamos las declaraciones del candidato donde reivindica las sociedades anónimas deportivas, porque adherimos fervientemente a aquel lema que dice ‘un pibe más en el club es un pibe menos en la calle’, porque nuestros clubes no son el negocio de nadie, sino la inclusión de miles y porque creemos que la pasión no se privatiza. Que nuestros clubes no son un negocio y que se sostienen con el esfuerzo voluntario de muchos y muchas que los mueve el compromiso, la solidaridad y la vocación. Que no nos mueven las reglas del mercado. No queremos que el mercado sea el que ordene las relaciones de nuestras vidas”.
El futbolista Luciano Aued, integrante de Instituto de Córdoba, destacaba hace unos días la importancia de la labor social de los clubes en sus redes sociales: “Muchas veces pensé qué hubiera sido de mi vida sin los clubes de barrio, sin los clubes siendo asociaciones civiles sin ánimo de lucro. Siempre me respondo lo mismo: soy el resultado, como miles y miles de nenes y de nenas en este país, de esa solidaridad que nunca van a entender quienes creen que todo es un negocio. Por eso defiendo que nuestros clubes sigan siendo de nuestra gente. Por eso estoy convencido que hay cosas a las que decirles nunca más”.
A pesar de estos testimonios, no son muchos los jugadores que siguen en activo que hayan opinado sobre este asunto y que hayan tomado partido por Milei o Massa antes de las elecciones, especialmente entre los que juegan en la máxima categoría o en la selección. De los internacionales actuales tan sólo hubo un gesto de Lisandro Martínez, que dio un ‘me gusta’ en sus redes sociales a un artículo que criticaba el apoyo de Milei a la exprimera ministra británica Margaret Thatcher. El seleccionador nacional, Lionel Scaloni, fue preguntado en una rueda de prensa por la polémica de las sociedades anónimas y no quiso posicionarse: “No, en eso no me meto”, fue su respuesta.
Incluso centenares de periodistas argentinos dedicados al deporte hicieron una declaración conjunta en la que muestran su disconformidad con la intención de Milei: “Nos manifestamos en contra de las sociedades anónimas en los clubes de fútbol y reivindicamos su condición histórica de asociaciones civiles sin fines de lucro. Además, nos pronunciamos en favor del apoyo del Estado a los clubes de barrio y pueblos pequeños de todo el territorio nacional, que ejercen una función social determinante”.
No es la primera vez que hay intentos de introducir las sociedades anónimas en el fútbol argentino. Ya en los años 90, el entonces presidente de Boca Juniors, Mauricio Macri, lideró una iniciativa en ese sentido, pero el comité ejecutivo de la AFA la rechazó por 19 votos en contra y uno a favor, el suyo. Años después, en 2018, Macri, como presidente del país, volvió a hacer un intento que se encontró de nuevo con el rechazo de los clubes y los aficionados. Macri, que apoyó la opción política de Milei, se presenta a las elecciones del 2 de diciembre en Boca Juniors como vicepresidente de una candidatura que se va a enfrentar a otra que encabeza una leyenda de la institución, Juan Román Riquelme. Si sale elegido, seguro que será el mejor aliado del nuevo presidente argentino para impulsar esta posibilidad.
Puede que Milei ralentice su deseo de ver a los clubes argentinos convertirse en sociedades anónimas viendo el rechazo que produce, pero habrá que ver qué sucede si en el futuro cumple su promesa de eliminar los subsidios públicos de agua, luz y gas que tienen las instituciones, y la normativa que otorga beneficios fiscales a los clubes a través del decreto 510/2023 en relación con las cargas sociales de los trabajadores de las entidades. Llegado ese caso, muchos equipos humildes, en los que se han formado todos los actuales jugadores campeones del mundo, se verían en graves dificultades para hacer frente a sus gastos bajo su actual estructura societaria. Es evidente que Milei tiene muchos asuntos prioritarios que abordar antes que tratar de transformar el fútbol de su país. Pero si llega el caso, ya sabe que enfrente tendrá un colectivo unido en defensa de sus intereses.
Uno de los colectivos profesionales de Argentina que ha recibido con más preocupación la elección de Javier Milei como nuevo presidente del país es el del fútbol. El motivo es el deseo expresado por el máximo dirigente de la formación política La Libertad Avanza de que los clubes dejen de ser asociaciones civiles...
Autor >
Ricardo Uribarri
Periodista. Empezó a cubrir la información del Atleti hace más de 20 años y ha pasado por medios como Claro, Radio 16, Época, Vía Digital, Marca y Bez. Actualmente colabora con XL Semanal y se quita el mono de micrófono en Onda Madrid.
Suscríbete a CTXT
Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias
Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí