A pesar de las subidas del SMI de los últimos años, la capacidad adquisitiva de los más pobres de nuestro país dista de plantear una situación en la cual la riqueza esté repartida de forma equitativa entre toda la ciudadanía. El 50% de los hogares más pobres apenas llegaba a concentrar el 7,8% de la riqueza de España en 2022, mientras que en el caso de los más ricos el 10% acaparaba más de la mitad (53,8%), y el 1% el 22,4%. Estos son solo algunos de los datos que ofrece el recién publicado informe de Oxfam Intermón sobre desigualdad y reparto de la riqueza.

En lo que llevamos de siglo, la brecha entre el 50% más pobre y el 10% más rico del país se ha duplicado. El estudio señala que uno de los principales problemas de esta desigualdad se encuentra en un reparto dispar del creciente Producto Interior Bruto, que ha sido acaparado por unos pocos bolsillos, y en concreto por los de algunos poderes corporativos. Casi la mitad de las 50 empresas más grandes de España tienen una vinculación significativa con personas que están en el 1% más rico.

El salario medio de los consejos de dirección es 10,2 veces mayor que el de la media de sus empleados

Intermón recalca cómo la concentración extrema en sectores clave, como el eléctrico o el bancario, propician comportamientos que únicamente favorecen a estos, y en la mayoría de los casos son contrarios a los intereses de la ciudadanía. Tan solo en 2022, el beneficio de las compañías aumentó un 16%, mientras que apenas contribuyeron al crecimiento del empleo. El número de trabajadores de las grandes compañías aumentó un 0,1% entre 2021 y 2022. Incremento que no corrige la reducción del 2% de 2020, y aún menos la tendencia negativa que dio comienzo en 2015 entre las empresas del IBEX 35, con una caída de un 25% en el número de personas empleadas hasta 2022.

Si hablamos de los salarios, la realidad tampoco es mucho mejor. El sueldo medio de estas empresas se incrementó un 8% en 2022 y apenas un 9% desde 2020, mientras que el de los miembros del consejo de dirección del conjunto de las grandes compañías aumentó un 19% entre 2021 y 2022 y un 45% desde 2020. Según el estudio, el salario medio de los consejos de dirección es 10,2 veces mayor que el de la media de sus empleados. La diferencia más reseñable de entre todas las compañías se da en la multinacional textil Inditex, con una distancia de 189 veces –la remuneración media de sus altos ejecutivos es de 4,6 millones de euros–. Seguida por Telefónica (61 veces) y CIE Automotive (59).

En el caso de los directores ejecutivos el salario medio fue de 3,5 millones de euros en 2022, 91 veces el salario medio de las empresas. Si analizamos en concreto a Prosegur, esta cifra se dispara a 408 veces. Cabe destacar los llamativos repuntes de compañías como Iberdrola, Banco Santander e Inditex, con sueldos anuales de 13,1, 11 y 8,4 millones de euros respectivamente.

El estudio, además, muestra cómo la desigualdad salarial también es una cuestión de género: las mujeres ganan un 15% menos que los hombres en promedio. Una diferencia que aumenta cuanto mayor es el rango dentro de la empresa. Mientras que en las categorías inferiores, las que concentran a la mayoría de los empleados, la diferencia es de un 8%, en las intermedias y los cargos de dirección la desigualdad se dispara a un 13% y 18%.

15.000 millones de euros de beneficios empresariales son eludidos mediante paraísos fiscales

Según la organización, 15.000 millones de euros de beneficios empresariales, que tendrían que tributarse en España, son eludidos mediante paraísos fiscales, provocando unas pérdidas de 3.620 millones de euros al Estado. Lo que equivale al 15,6% de la recaudación del impuesto sobre sociedades. De las 50 empresas españolas analizadas en el informe, 22 han formado parte del IBEX 35 y han tenido presencia en paraísos fiscales de forma ininterrumpida desde 2009. El número de sucursales de estas empresas alcanzó su máximo en 2015, con un total de 883. Desde entonces la cifra se ha reducido progresivamente hasta 2022, año en el que estas aumentaron un 5% hasta alcanzar las 654 filiales.

A nivel mundial, a pesar de representar solo al 21% de la población, los países del Norte global poseen el 69% de la fortuna y concentran el 74% de los milmillonarios del mundo. Siete de las diez empresas más grandes del mundo tienen hoy a un milmillonario como accionista principal o director ejecutivo. El valor conjunto de estas empresas es de 10,2 billones de dólares, cifra que supera el PIB de todos los países de África y América Latina juntos. Uno de ellos es Jeff Bezos, presidente de Amazon y una de las personas más ricas del mundo. Su fortuna ha aumentado en 32.700 millones de dólares desde 2020, hasta alcanzar los 167.400 millones de dólares. Durante su viaje espacial, valorado en 5.500 millones de dólares, agradeció a los trabajadores de Amazon el haberlo hecho posible.

La riqueza de los cinco hombres más ricos del mundo ha pasado de 405.000 millones a 869.000 millones de dólares en 2022

Desde 2020, la riqueza de los cinco hombres más ricos del mundo ha pasado de 405.000 millones a 869.000 millones de dólares, un incremento del 114%; mientras que la del 60% más pobre (4.800 millones de personas) ha disminuido. El desmesurado aumento de las grandes fortunas de los últimos tres años se ha consolidado en un modelo en el cual los milmillonarios se aseguran de que las grandes empresas generen más riqueza aprovechándose de contextos de crisis (como han sido la pandemia, las guerras o la inflación) a costa del resto de la población. En términos reales, la riqueza de los milmillonarios a nivel mundial se ha incrementado en 3,3 billones de dólares desde el año 2020.

Por citar algunos ejemplos, 148 de las mayores empresas del mundo obtuvieron unos beneficios netos conjuntos de 1,8 billones de dólares en los 12 meses previos a junio de 2023. Las compañías más beneficiadas fueron las dedicadas al petróleo y el gas, 14 de las compañías más grandes del sector tuvieron ganancias un 278% superiores al promedio de 2018 a 2021. El informe revela que por cada 100 dólares de beneficios generados por 96 de las empresas más grandes del mundo entre julio de 2022 y junio de 2023, 82 acabaron en manos de sus accionistas. En el otro extremo, los salarios de casi 800 millones de personas de 52 países han perdido 1,5 billones de dólares en los últimos dos años debido a la inflación.

Por todo ello, Oxfam Intermón propone una reforma fiscal que asegure que las grandes fortunas y corporaciones tributen las ganancias responsablemente sin evadir sus impuestos. Además, insta a los Estados a que regulen la situación monopolística de algunos sectores, garanticen el cumplimiento de los derechos laborales y vigilen las irresponsables prácticas de algunas compañías. La asociación estima que un impuesto sobre el patrimonio de los millonarios y milmillonarios del mundo podría generar 1,8 billones de dólares al año.