EL HACHA
“Costiezmann”
Si Griezmann y Costa forman una sociedad imparable, que juegue de memoria y se complemente, Simeone sabrá que, como él dice, lo mejor está por venir
Rubén Uría 2/01/2018

Diego Costa durante su presentación en el Wanda Metropolitano
ALBERTO SAENZ MOLINA / WEB ATLÉTICO DE MADRIDEn CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí
CTXT está produciendo el documental 'La izquierda en la era Trump'. Haz tu donación y conviértete en coproductor. Tendrás acceso gratuito a El Saloncito, la web exclusiva de la comunidad CTXT. Puedes ver el tráiler en este enlace y donar aquí.
Una carrera de obstáculos. Eso ha sido la primera parte del curso para el Atlético de Simeone. Sancionado sin poder inscribir jugadores, obligado a jugar las tres primeras jornadas de visitante por las obras de un nuevo estadio que aún no siente como su casa, envuelto en un conflicto con su estrella, eliminado, con justicia, de la Champions y víctima de un falta de gol galopante que sirvió para que algunos le dieran por muerto – como siempre–, antes de tiempo, el Atleti ha ido sorteando todos y cada uno de los obstáculos. Con partidos densos, desde la espesura, donde el resultado servía como justificante de encuentros donde el equipo se ha movido a caballo entre la agonía y un parto por cesárea, acumulando con más puntos que juego. Pero el Atleti, como el famoso dinosaurio, sigue ahí. Lejos del Barça, pero delante del resto.
Y eso, después de lo que ha llovido y de los esfuerzos continuados del equipo para no caer, lentamente, como caen las hojas de los árboles en otoño, tiene un mérito incalculable. A partir de ahora, Simeone tendrá lo que pidió. Vitolo y Costa. El primero, después de unos meses de pesadilla en Gran Canaria, azotado por diferentes lesiones, llega con ganas de volver a demostrar lo que vale. Llega para completar al equipo en los flancos, aportando dos cualidades de las que no va precisamente sobrado: potencia y uno contra uno. Resulta imposible saber qué tipo de rendimiento ofrecerá Vitolo, que tendrá que ganarse un puesto en el once – todos sabemos que Simeone no regala nada a nadie y que para jugar hay auténticas tortas-, pero si el extremo está cerca de su mejor versión, será una bendición para el Cholo. Qué decir de Diego Costa, la pieza ansiada, codiciada y perseguida después de varios años por el entrenador. Anillo al dedo del cholismo, Costa regresa para aportarle al equipo todas esas características que reflejan el ardor guerrero del equipo: trabajo, presión extenuante, agresividad – con sus consiguientes cruces de cable, peligro-, velocidad, amenaza, juego de espaldas, un radio de acción enorme y, lo más importante un poder de intimidación brutal entre las líneas enemigas, que se traduce en gol. Que Diego Costa vuelva a recuperar el nivel exhibido con Simeone sería la mejor noticia posible para un equipo que inspiraba auténtico miedo a los rivales cuando el ariete de Lagarto estaba ‘on fire’. ¿Veremos al mejor Costa? ¿Una versión que se acerque a ese demonio del área que brilló en la Premier? El Profe Ortega ha hecho su trabajo con una preparación física casi paramilitar, Costa sabe que ha vuelto al que es su lugar en el mundo y Simeone sabe que es la pieza maestra de su plan.
Más allá de las quinielas sobre los jugadores que tendrán que dejar el equipo para liberar masa salarial – el límite de la plantilla del Atleti estipulado por La Liga es de 237.7 M€, por 507 del Barça y 499 del Madrid, tomen nota--, sean Vietto, Gaitán, Gameiro o quien toque, Vitolo y Costa están llamados a responder con rendimiento a las altísimas expectativas e ilusiones que han despertado entre el pueblo rojiblanco. Queda un mundo por delante, toda la segunda vuelta del campeonato, la Copa y la Europa League. Mucha tela que cortar. Hasta aquí, el Atlético ha llegado por sus valores como equipo. Nada estéticos, pero siempre éticos. El mejor jugador del Atleti ha sido el bloque y mientras siga ahí Simeone, lo seguirá siendo, porque en este equipo, como el propio Cholo confiesa, sólo juegan los que ponen trabajo, trabajo, trabajo y después, talento.
Ahora está por ver si las dos nuevas piezas del Atlético encuentran acomodo en el puzle de Simeone y si la máquina de competir es capaz de subir de revoluciones. La teoría señala que Vitolo será un buen refuerzo, aportando vértigo y desborde; y dice que Costa, si rinde como se espera, será la guinda del pastel, porque bajará balones de 40 metros, permitirá que Simeone se salte la elaboración en el centro del campo y meterá miedo a todas las defensas. La letra es una maravilla. Habrá que esperar unos días para saber cómo suena la música. Si las piezas encajan, si Vitolo está en su nivel y sobre todo, si Griezmann y Costa forman una sociedad imparable, que juegue de memoria y se complemente, Simeone sabrá que, como él dice, lo mejor está por venir. Su Atleti seguirá siendo un equipo de autor, siderúrgico, fiero y fiable. Pero si arriba cuenta con el factor “Costiezmann”, el Atleti puede ser temible. La respuesta, en mayo. Hasta entonces, ya saben, un clásico: partido a partido.
CTXT está produciendo el documental 'La izquierda en la era Trump'. Haz tu donación y conviértete en coproductor. Tendrás acceso gratuito a El Saloncito, la web exclusiva de la comunidad CTXT.
Autor >
Rubén Uría
Periodista. Articulista de CTXT y Eurosport, colaborador en BeIN Sports y contertulio en TVE, Teledeporte y Canal 24 Horas. Autor de los libros 'Hombres que pudieron reinar' y 'Atlético: de muerto a campeón'. Su perfil en Twitter alcanza los 100.000 seguidores.
Suscríbete a CTXT
Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias
Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí