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El creciente acceso a la red ha venido acompañado de una explosión de tecnologías que generan y utilizan datos y que están cambiando los mercados y la manera en que nos relacionamos.
De acuerdo con la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), el organismo especializado de las Naciones Unidas para las tecnologías de la información y la comunicación, se estima que en 2021 cerca de 4.900 millones de personas utilizaban internet, lo que supone más o menos el 63 % de la población mundial. Con respecto a 2019, esto significó igualmente un aumento de usuarios de internet del 17 %, es decir, casi 800 millones más de personas. Dicho ascenso se registró particularmente en países de África, Asia y el Pacífico.
Así lo explica un estudio publicado este año por Oxfam Intermón, efectuado dentro del marco del programa de Justicia Digital Global que impulsa el Ayuntamiento de Barcelona. En dicho informe, se ofrecen algunas claves para ayudar a entender la dinámica y el impacto que la tecnología y la digitalización mantienen sobre las sociedades actuales a nivel global, cuya aceleración y universalización en términos de conectividad sigue creciendo.
En este sentido, el informe alerta de que, ante el rápido avance de las tecnologías de la información y la comunicación, se ha producido un profundo impacto en las democracias de todo el mundo, puesto que este proceso de aceleración ha permitido la aparición de nuevas plataformas para la movilización cívica y la difusión de noticias y comentarios, pero también su efecto contrario, es decir, el crecimiento de la censura, la vigilancia y la explotación por parte de fuerzas antidemocráticas.
De acuerdo con el último informe de Freedom House, cuyo dato del 2022 se incluye en el estudio sobre “Geopolítica de la tecnología: actores, procesos y dinámicas”, a nivel mundial, la libertad global de internet ha disminuido por duodécimo año consecutivo y, al menos en 53 países, los usuarios tuvieron que enfrentarse a repercusiones legales por expresar sus opiniones en línea, lo que consideran como el paso de la democracia digital a la represión digital. Este autoritarismo digital, como explica el informe compartido por la ONG española, se ha convertido en algo habitual en países como China, Uganda, Myanmar, Sudán, Turquía, Rusia, Tailandia y Nicaragua. Un fenómeno cada vez más replicable y exportable a otros territorios del mundo.
Según la información proporcionada, el cada vez mayor acceso a la información ha permitido una mayor democratización de esta, pero también ha producido lo contrario, es decir, la necesidad por parte de algunos actores políticos de restringir su acceso y emisión, y potenciar su control. De esta manera, el estudio advierte de que el aumento del autoritarismo digital también ha tenido consecuencias en otros frentes, como el tema migratorio y la defensa de la diversidad. Los discursos antinmigración han crecido en los últimos años, inundando las redes sociales de mensajes de odio promovidos por grupos radicales y de extrema derecha. De este modo, la realidad geopolítica de los últimos años ha venido marcada por un aumento significativo de los movimientos de desplazados forzados en todo el mundo, especialmente en América Latina, África, Estados Unidos y Europa, algo que es fruto de los conflictos y las crisis de seguridad, tanto como de las crisis humanitarias, el cambio climático y el aumento de las desigualdades.
Cabe resaltar que en 2019, las investigadoras Alina Polyakova y Chris Meserole describieron el uso de la competencia tecnológica por parte de regímenes autoritarios para vigilar, manipular y extender su represión como autoritarismo digital. Esto incluye la manipulación de las redes sociales o el uso de la inteligencia artificial y otros sistemas de vigilancia como herramientas para controlar el debate político y social interno, así como para incidir en los debates públicos externos, especialmente en etapas electorales. El análisis de las expertas, enfocado en los modelos chino y ruso, como ejemplos de autoritarismo digital, advierte que están siendo exportados y asumidos por gobiernos de todo el mundo.
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ctxt
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