Entre 2013 y 2023 se crearon en España 445.000 puestos de trabajo en las ramas más tecnológicas, según un reciente informe de la Fundación Cotec con datos de la Seguridad Social. El 45% de ellos fueron creados en los últimos tres años, es decir, tras la pandemia.

El empleo tecnológico creció así un 47,7% en este decenio, una cifra que casi duplica el aumento del empleo en su conjunto, que fue de un 26,4%. La mayor parte del crecimiento se atribuye al sector de la programación, consultoría y otras actividades relacionadas con la informática, un sector que ha crecido un 147%. Cerca del 70% de los empleados en este ámbito son hombres.

No todo el empleo tecnológico está tan masculinizado como la programación. En investigación y desarrollo, el segundo ámbito que más creció, trabajan más mujeres (54%) que hombres y en la fabricación de productos farmacéuticos hay prácticamente igualdad. Por contra, en los empleos relacionados con la fabricación de vehículos y maquinaria la representación femenina es escasa.

El empleo tecnológico tiende a estar más concentrado que la media y su peso es mayor en las zonas de rentas elevadas. En España, se trata del noreste peninsular, donde se encuentra el 37,5% de estos trabajadores, y la Comunidad de Madrid, que es líder con un 10,5%. La brecha entre norte y sur es manifiesta. Baleares (2,7%), Extremadura (2,3%), Canarias (2,2%) y Ceuta y Melilla (por debajo del 2%) son los territorios donde menos peso tiene el empleo tecnológico.

A nivel municipal, el 40% de este empleo se concentra en las diez mayores ciudades. De ellas, Barcelona es la que más porcentaje de empleo tecnológico tiene en su estructura productiva: un 11,8%. También es donde más ha crecido en la última década. En segundo lugar se sitúa Madrid, con un 9,8%. Zaragoza (8,5%), Sevilla (7,6%), Málaga (6%) y Valencia (5,6%) se encuentran por detrás. 

Si se observa el conjunto de municipios con más de 50.000 habitantes, Las Rozas, Boadilla del Monte y Tres Cantos, todas en la Comunidad de Madrid, son líderes en este tipo de empleo.

Con un 7,7% de trabajadores en el sector tecnológico, España ocupa el puesto 18 de 27 en la Unión Europea. Lógicamente, los países con un modelo productivo más orientado a la industria muestran una intensidad de empleo tecnológico más alta. Un ejemplo claro sería Alemania, con un 13,7%. España se sitúa por debajo de Italia (9,1%), pero algo por encima de Francia (7,2%).

El informe señala que en los últimos años se ha dado una convergencia entre los Estados de la UE que se explica tanto por el crecimiento del empleo tecnológico que se ha dado tras la pandemia en países como España y Francia como por el retroceso en los países líderes, entre ellos Alemania, la República Checa y Eslovaquia, que han resultado más afectados por la guerra de Ucrania.