![<p>Bar Beachcomber (1968), en la actual calle de doña María Barrabino. Delante: Doug Lane, Gary Hawkey, Art Forrester, Jack Yuill (todos de Canadá). Al fondo: Byron, Bob Ericksen y Carol. / <strong>Fuente: Torremolinos Chic</strong></p> <p>Bar Beachcomber (1968), en la actual calle de doña María Barrabino. Delante: Doug Lane, Gary Hawkey, Art Forrester, Jack Yuill (todos de Canadá). Al fondo: Byron, Bob Ericksen y Carol. / <strong>Fuente: Torremolinos Chic</strong></p>](/images/cache/500x300/nocrop/images%7Ccms-image-000035306.jpeg)
Revuelta mariquita en San Pedro de Alcántara
Álvaro González Montero / Richard Cleminson 4 Julio 2024
CTXT se publica gracias a sus 10.000 suscriptoras y suscriptores.
Apoya a la prensa crítica y libre aquí
EN ESTE NÚMERO
Álvaro González Montero / Richard Cleminson 4 Julio 2024
Rubén Pérez / Profesor de Historia del Derecho
Gorka Castillo
SI BREVE
La argumentación del Supremo no es tanto jurídica, sino parajurídica. Por lo que no es una región de la inteligencia. Algo dramático en una democracia ¿El fracaso de la amnistía afectará a la investidura de Illa? Sí, por un tubo
Guillem Martínez
EN ESTE NÚMERO
El partido de Starmer se beneficia de la baja participación, del sistema electoral y de la división de la derecha
Fray Poll 5 Julio 2024
ANÁLISIS
El crecimiento de Reagrupación Nacional tiene más que ver con el comportamiento de las élites políticas, especialmente el de Emmanuel Macron, que con su exitosa estrategia de ‘desdiabolización’
Pablo Castaño
IMPERIOS COMBATIENTES
La evolución política del viejo continente demuestra el colapso moral de su sistema
Rafael Poch
EN ESTE NÚMERO
Hervé Kempf (Reporterre) 14 Junio 2024
EN ESTE NÚMERO
June Fernández 13 Junio 2024
EN ESTE NÚMERO
ENTREVISTA
Rescatamos una entrevista de ‘Democracy Now!’ al activista y profesor, realizada en 2015, como homenaje al presidente de honor de CTXT
Democracy Now!
Leila Guerriero / Periodista
Guillermo Martínez
EN ESTE NÚMERO
CÉSAR RENDUELES / FILÓSOFO, SOCIÓLOGO, ENSAYISTA
Hugo de Camps Mora
Cómpralos aquí y te los mandamos a casa