prejuicios
Inmigración e inclusión: un reto social clave en España
Más de un 20% de los españoles participantes en un reciente estudio percibe a algunos inmigrantes como una amenaza relativa para la cultura y economía del país
CTXT / Observatorio Social La Caixa 9/08/2023
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Un reto social clave para España –al igual que para muchos otros países receptores de personas migrantes– consiste en prevenir la exclusión social de la inmigración. Las recientes tendencias políticas y sociales de nuestro país han dado lugar a un aumento del comportamiento discriminatorio hacia grupos minoritarios, y en especial hacia el de inmigrantes, en los últimos años. Según estudios recientes, los niveles de prejuicios étnicos en el mercado de la vivienda se duplicaron entre el 2013 y el 2020. Durante este mismo periodo creció también la discriminación en el sector educativo. Con el objetivo de encontrar vías para combatir los prejuicios xenófobos, la Universitat Ramon Llull y la ESADE Business School, con el apoyo del Observatorio Social de la Fundación “La Caixa” llevaron a cabo un estudio entre la población española (con una muestra representativa de 2.297 personas) que explora, principalmente, el papel del contacto social entre autóctonos e inmigrantes.
A partir de sus resultados, los expertos del proyecto desarrollaron un análisis cuantitativo entre la población para comprender qué factores impulsan tales actitudes de discriminación con la finalidad de identificar estrategias para prevenirlas, minimizarlas y combatirlas. En ese sentido, el estudio se centró en dos de los principales grupos de inmigrantes que viven en el país: el marroquí y el latinoamericano. Según los datos del informe, los marroquíes representan el 13% de la población inmigrante, mientras que los latinoamericanos conforman el 34%, con lo que ambos grupos suman el 47% de la población inmigrante que hay en el Estado español.
El 26,7% de las personas encuestadas consideró que la inmigración procedente de Marruecos representa hasta cierto punto un peligro para la economía de España y un 23% afirmó que representa una amenaza cultural. Sin embargo, el mismo informe subraya que la mayoría de la población participante en el estudio mantiene contactos positivos frecuentes con inmigrantes, y que sus valoraciones son más positivas.
Los participantes del estudio afirmaron tener menos contactos positivos con las personas marroquíes (35,9%) que con las latinoamericanas (59,8%), y que, por ende, sus relaciones tienden a ser peores con aquellas que con estas últimas. En ese sentido, el estudio consideró importante distinguir entre la frecuencia de los contactos positivos (encuentros amistosos con inmigrantes) y la de los contactos negativos (encuentros desagradables). Según su enfoque, es importante tener en cuenta ambos tipos de contacto, puesto que no se trata de interacciones simplemente opuestas entre sí, ya que los individuos pueden experimentar a la vez una frecuencia elevada (o baja) de contactos intergrupales positivos y negativos. Los participantes declararon tener menos contactos positivos, y más contactos negativos con los inmigrantes procedentes de Marruecos que con los provenientes de América Latina. Además, percibían a los inmigrantes latinoamericanos y marroquíes como menos competentes que el ciudadano medio español, y a los marroquíes como bastante menos cordiales.
Los investigadores concluyen que una estrategia prometedora para erradicar las actitudes excluyentes consiste en impulsar los contactos intergrupales positivos. Se observó que la frecuencia de contactos positivos con un grupo de inmigrantes se correlaciona con una mejor valoración de ese grupo, pero no sólo eso, sino que el contacto positivo con el grupo latinoamericano se correlacionó también con una mejor valoración hacia otros, como el marroquí, siguiendo lo que el informe llama “efectos de transferencia secundarios”.
Como conclusión, los expertos señalan que dicho “efecto de transferencia” del contacto social puede resultar especialmente útil para prevenir la discriminación y las actitudes socialmente excluyentes hacia grupos de inmigrantes con los que los ciudadanos españoles son inicialmente reacios a interactuar, o con los que no pueden interactuar fácilmente debido a que no hablan el mismo idioma.
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CTXT / Observatorio Social La Caixa
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