Es el debate de los últimos días entre la parroquia colchonera. La apuesta de Simeone por alinear a cuatro jugadores en el centro del campo, Gabi, Tiago o Augusto, Koke y Saúl, que tienen un perfil parecido, no termina de convencer a parte de la afición, una situación alimentada por el mal inicio de temporada, con dos empates ante dos recién ascendidos que han hecho perder ya a los rojiblancos cuatro puntos.

Los tropiezos han provocado que más de un aficionado reclame al Cholo que aproveche a los jugadores que tiene con unas características más verticales, más desequilibrantes, como Gaitán, Carrasco o Correa, a los que ha dejado de inicio en el banquillo en ambas citas, dándoles entrada cuando los partidos ya se habían puesto cuesta arriba. Pero, ¿por qué prefiere sacar ese centro del campo en lugar de otro más ofensivo?

Al técnico argentino le gusta tener siempre preparado un plan B y considera que jugadores como Carrasco o Correa rinden más con las defensas contrarias más cansadas

El entrenador argentino siempre ha declarado que antes de cada enfrentamiento él decide un once inicial y también los posibles cambios que puede hacer a lo largo del encuentro. Le gusta tener un plan B ya preparado por si falla la idea inicial o en función de las exigencias del encuentro. No quiere gastar toda la pólvora desde un principio porque si no sale bien, luego no tendría alternativas.

Una de sus prioridades es que el equipo sea sólido, que no se parta, tener bien guardada su parcela y a partir de ahí, desplegarse y aprovechar las oportunidades que se generen con la calidad de los hombres de ataque. Él está convencido de que esa solidez la consigue en mayor grado con los cinco jugadores que ha elegido de inicio para la línea de centrocampistas en las dos primeras jornadas.

También cree que es mejor sacar a velocistas o regateadores como Carrasco o Correa cuando los defensas contrarios ya puedan notar el cansancio de los minutos disputados para que puedan lucir mejor sus virtudes. Y se remite a actuaciones del belga o el argentino en las que saliendo desde el banquillo fueron mucho más productivos que cuando en otras ocasiones formaron de inicio.

Una de las prioridades del Cholo es que el equipo sea sólido, que no se parta en el campo. Cree que lo consigue formando de inicio con los centrocampistas que ha alineado hasta ahora

Otro de los interrogantes es por qué no juega más Gaitán, una de las incorporaciones estrella de este año. Lo normal es que termine gozando de más minutos, pero Simeone tiene en mente seguir con él el mismo plan que llevó a cabo con Griezmann. El francés no fue titular en muchos partidos al comienzo de su primera temporada. Hasta que el ex del Benfica no haya asimilado los conceptos que hay que cumplir para jugar en este equipo, prefiere apostar por los que ya lo tienen aprendidos de memoria. Además, hay que recordar que el argentino se incorporó tarde a la pretemporada, por lo que se ha perdido semanas importantes de trabajo.

No le ha ido nada mal a Simeone con esta idea de juego en los últimos años, en los que ha llevado al Atleti a la élite nacional y mundial. Otros destacan por batir récords goleadores. Los rojiblancos lo hacen por superar marcas de imbatibilidad año tras año. Partidos del nivel de los dos disputados hasta ahora ha jugado muchos el equipo rojiblanco en estas últimas temporadas. Pero como se ganaban 1-0 todo se daba por bueno. De no haber entrado aquel disparo del alavesista Manu García o hubieran aprovechado alguna de las ocasiones que tuvieron frente al Leganés, el debate sería mucho menor.  Aun con los cuatro centrocampistas que eligió el técnico para los dos primeros compromisos, debería haber sacado el Atleti los tres puntos de ambos partidos.

Ocurre que Simeone tiene esta temporada muchos jugadores de un perfil más creativo de centro del campo hacia delante. Y a la gente le chirría ver en el banquillo a Gaitán, Carrasco, Correa y Torres. Especialmente si no se gana. Pero hay que recordar que en los apenas 180 minutos que llevamos de campeonato ya han jugado todos ellos, los seis. Y ni con unos ni con otros en el campo se ha conseguido marcar, excepto de penalti.  Más allá de las prestaciones de cada jugador, el principal problema  ha sido la falta de gol. Y ahí, más que salgan de inicio Koke, Saúl, Gaitán o Carrasco, han influido otras cuestiones. Como que Gameiro acabe de aterrizar, le falte aún acoplarse y se muestre un poco ansioso por agradar y responder a las expectativas puestas en él. Que Griezmann haya tenido que debutar directamente en partido oficial después de mes y medio sin jugar un minuto. E incluso que haya habido enfrente dos porteros con un nivel excepcional.

Simeone quiere seguir con Gaitán el mismo plan que hizo con Griezmann: darle entrada poco a poco para que tenga tiempo de asimilar los conceptos del equipo

¿Significa eso que no haya cosas que mejorar? Claro que no. Incluso con esa composición de equipo las cosas se pueden hacer mucho mejor. Por ejemplo, la intensidad en el juego y la presión a realizar al equipo contrario para robar el balón más cerca de la portería rival. Lo hizo muy bien en la segunda parte frente al Alavés y los diez primeros minutos ante el Leganés pero debe ser más constante. Hay que mover el balón más rápido buscando cambios de banda para intentar superar a las defensas, especialmente cuando son tan cerradas como las que se ha encontrado. Hay jugadores como Koke o Saúl que deben tener más movilidad y apariciones en ataque para no dejar siempre en inferioridad a los delanteros. Y especialmente debe de trabajar las acciones a balón parado. Entre los dos partidos ha tenido más de 30 jugadas entre saques de esquina y faltas al borde del área de las que apenas habrá rematado dos o tres y sólo una con peligro.

Es posible que con la temporada más avanzada, con todos los jugadores más rodados y los conceptos más asimilados, Simeone decida cambiar su esquema y en partidos ante rivales que van a optar por cerrarse elija a jugadores de un perfil más ofensivo aún a costa de quemar una alternativa. Este año tiene numerosas alternativas y puede variar más. Al final, todo se resume en una de las máximas del Cholo. Es más importante la calidad de los minutos que la cantidad. Si Carrasco, Gaitán o Correa, cuando tengan la oportunidad de jugar, demuestran que se merecen jugar más, ya se las arreglará el Cholo para meterles de inicio. La orquesta tiene este año más músicos y es posible que cueste más tiempo afinarla. Pero hay que confiar en el director.